Hamilton se mete en un lío

En la Fórmula 1, un segundo es un mundo que en el momento de la salida, cuando todos los coches están colocados en la parrilla, completamente parados, se convierte en una eternidad. Pues todo eso perdió Lewis Hamilton en la arrancada de la carrera al sprint que este sábado se disputó en Monza y que definió el orden en el que partirán los monoplazas este domingo en este templo de la velocidad (15:00 horas, Movistar Fórmula 1, Dazn). Mercedes creía tenerlo todo co...

En la Fórmula 1, un segundo es un mundo que en el momento de la salida, cuando todos los coches están colocados en la parrilla, completamente parados, se convierte en una eternidad. Pues todo eso perdió Lewis Hamilton en la arrancada de la carrera al sprint que este sábado se disputó en Monza y que definió el orden en el que partirán los monoplazas este domingo en este templo de la velocidad (15:00 horas, Movistar Fórmula 1, Dazn). Mercedes creía tenerlo todo controlado con Valtteri Bottas en la primera posición y Hamilton en la segunda, pero todo se torció de repente. Se apagaron los semáforos y el británico se quedó clavado en su casilla, circunstancia que aprovecharon tres de sus rivales, lobos que lo devoraron desde atrás, para relegarle hasta la quinta plaza que ocupó al cruzar bajo la bandera de cuadros, 18 vueltas más tarde.

El tiempo de reacción de Bottas en el inicio del ‘mini’ gran premio fue de 4,2 segundos –el margen que tardó en hacer que su coche pasara de 0 a 200 kilómetros por hora–. El de su vecino de taller, de 5,2 segundos. Las cámaras colocadas en el prototipo del actual campeón dejaron claro que el motor de su Mercedes cayó de vueltas más de lo deseado. Eso propició que el corredor le pegara un pisotón al pedal del acelerador para que el propulsor recuperara la alegría, y eso hizo que las gomas se pusieran a derrapar. Una cadena de despropósitos que finalmente le recolocó el quinto en el pelotón, y que le harán comenzar el cuarto la carrera una vez se le aplique a su compañero de equipo la penalización pertinente por descorchar la cuarta unidad de potencia en lo que va de curso.

El patinazo sería menos grave de no ser porque Max Verstappen, su principal rival en la gresca por el Mundial, arrancará sin tráfico delante en una pista en la que adelantar a los rivales de delante le será prácticamente imposible al de Stevenage. “No hay que mirar los datos para saber qué ha pasado. La culpa fue toda mía y de nadie más. He perdido puntos (dos) respecto de Max y ahora me tocará limitar los daños”, reconoció Hamilton. Daniel Ricciardo saldrá el segundo mientras que Carlos Sainz lo hará el sexto y Fernando Alonso, el décimo.

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