El Gobierno aprueba el martes los Presupuestos: calendario de las cuentas más expansivas de la historia
El proyecto para 2021, con una subida récord de ingresos y gastos, debe pasar ahora el trámite parlamentario y podrá entrar en vigor como muy pronto a mediados de enero
El Consejo de Ministros aprobará este martes el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2021, que se perfila como el más expansivo de la historia. Estas cuentas, marcadas por la pandemia, recogerán unos gastos e ingresos públicos récord para hacer frente a la recuperación. “Mañana mismo [por el martes] el Gobierno presentará el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado, para ser aprobado en Consejo de Ministros. Un anteproyecto que incluirá un importante adelanto en los PGE de 2021 de 27.0...
El Consejo de Ministros aprobará este martes el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2021, que se perfila como el más expansivo de la historia. Estas cuentas, marcadas por la pandemia, recogerán unos gastos e ingresos públicos récord para hacer frente a la recuperación. “Mañana mismo [por el martes] el Gobierno presentará el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado, para ser aprobado en Consejo de Ministros. Un anteproyecto que incluirá un importante adelanto en los PGE de 2021 de 27.000 millones de euros con cargo a los fondos europeos”, ha escrito el presidente del Gobierno en su perfil de Twitter este martes, al arrancar la Conferencia de Presidentes.
El Plan Presupuestario que el Gobierno envió a Bruselas hace dos semanas fija un techo de gasto inédito para 2021, de 196.097 millones de euros, un 53,7% superior al aprobado a inicios de año, antes de que estallara la pandemia. Tras la aprobación por parte del Gobierno, el proyecto de Presupuestos tendrá que empezar su iter parlamentario, que suele demorarse unos tres meses, y pasar las enmiendas a la totalidad. Si finalmente logra el apoyo de ambas cámaras, serán las primeras cuentas que entren en vigor desde 2018.
Liturgia presupuestaria
La inestabilidad política antes, y la pandemia después, han trastocado toda la normal liturgia presupuestaria. Los Presupuestos suelen presentarse en septiembre del año anterior, pero actualmente siguen en vigor las cuentas que presentó en primavera de 2018 el Gobierno de Mariano Rajoy.
El Gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos había empezado a inicios de año los trámites para dar carpetazo definitivo a estas cuentas del PP, pero decidió aparcar el proyecto por la llegada de la covid-19 y concentrarse en unos Presupuestos de reconstrucción de cara a 2021. La fragmentación parlamentaria y la dificultad en llegar a un consenso sobre el contenido del documento han sin embargo vuelto a demorar la presentación del proyecto.
Este retraso en los trámites implica que las nuevas cuentas entrarán previsiblemente en vigor a mediados del próximo enero, pese a que el Gobierno haya reducido los trámites gracias a la suspensión de las reglas fiscales para este año y el que viene ―que se votó la semana pasada en el Congreso y elimina la necesidad de votar la senda de déficit y deuda―. Esto implicará que los Presupuestos de 2018, aunque sea por unos días o pocas semanas, volverán a prorrogarse a inicios de 2021 de manera automática.
Paquete fiscal
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aseguró en varias ocasiones que la “profunda reforma fiscal” planteada antes de la llegada de la covid-19 se aplazaría y solo habría “ajustes”. Según el Plan Presupuestario enviado a Bruselas, estos “ajustes” brindarán el año que viene más de 6.000 millones de euros adicionales a las arcas públicas.
El documento contempla distintas medidas como un alza del IVA del 10% al 21% a las bebidas azucaradas, la introducción del impuesto al plástico y una subida de la fiscalidad verde, las tasas Google y Tobin y la nueva ley sobre el fraude fiscal. Este conjunto de medidas arrojarían 6.847 millones de euros. Junto al impulso dado por el crecimiento económico, el Gobierno estima que en total los ingresos crecerán hasta los 33.447 millones el año que viene. En total, el Ejecutivo estima que el conjunto de ingresos públicos escale hasta los 493.000 millones de euros, y los gastos hasta los 588.000 millones.
El Ejecutivo no ha sin embargo dado a conocer los detalles de las medidas fiscales que pretende aplicar el año que viene: además de las figuras que están desglosadas el Plan Presupuestario también recoge un incremento genérico de los impuestos directos ―que podría traducirse en un aumento en el IRPF de las rentas altas y en sociedades―, con un impacto de 2.548 millones en los próximos dos años, y otra en los indirectos, con 1.724 millones.