La subida de la electricidad reabre el debate sobre el sistema energético
El precio de la energía aumenta hoy otro 6,7% y acumula un incremento del 110% en enero
La tormenta Filomena y la ola de frío que azota a España no solo han causado destrozos y han bloqueado las vías de comunicación. También han desatado una espiral alcista en el mercado mayorista de la electricidad: el precio medio del megavatio-hora (MWh) volverá este miércoles a subir hasta los 89,94 euros, un repunte del 6,7% respecto al día anterior y del 110% en lo que va de año. La mayor demanda, unida a la menor presencia de renovables y a que el ...
La tormenta Filomena y la ola de frío que azota a España no solo han causado destrozos y han bloqueado las vías de comunicación. También han desatado una espiral alcista en el mercado mayorista de la electricidad: el precio medio del megavatio-hora (MWh) volverá este miércoles a subir hasta los 89,94 euros, un repunte del 6,7% respecto al día anterior y del 110% en lo que va de año. La mayor demanda, unida a la menor presencia de renovables y a que el precio del gas ha estado por las nubes, explican este repunte, que ha vuelto a colocar el recibo de la luz en el centro del debate político.
La expresión se ha repetido en los últimos días: una tormenta perfecta se abate sobre el mercado eléctrico. Las malas condiciones meteorológicas, con temperaturas históricamente bajas —en España y en otros países— han desencadenado un efecto dominó que lleva días empujando al alza la cotización media de la electricidad en el mercado mayorista. Este miércoles rozará los 90 euros por MWh, según los datos publicados por el Operador del Mercado Ibérico de la Electricidad (OMIE). Es el segundo precio más alto en lo que va de año, tras marcar el pasado viernes 8 de enero —cuando Filomena ya dominaba los cielos— un récord de 94,99 euros, la cifra más elevada desde 2002.
Hay que volver a diciembre de 2013 para encontrar un precio parecido: 93,11 euros el MWh de media. Entonces, como ahora, a la tormenta atmosférica se añadió una tormenta política, con acusaciones cruzadas entre el Gobierno y la oposición. Hace siete años se anuló el anterior modelo de subasta y Competencia (CNMC) abrió una investigación que, tras esos siete años, está en la Audiencia Nacional recurrida por las compañías eléctricas condenadas.
En enero de 2017, como consecuencia del frío y el cierre de más de un tercio de las centrales nucleares francesas, se produjo otro aumento considerable de los precios. El entonces ministro Álvaro Nadal también ordenó una investigación. Se produjeron, en ambos casos, acusaciones de incompetencia del Gobierno del PP por parte de la oposición y de favorecer a las eléctricas. Ahora, con un Ejecutivo de coalición de PSOE y Podemos, se han vuelto a producir ataques similares desde el otro bando y reacciones como las de la formación de Pablo Iglesias, que llega a propugnar la nacionalización de Endesa. La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, reiteró este martes que la subida es “coyuntural”, tal y como señaló la semana pasada la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Y eso que 2020, con el mismo sistema —pero, eso sí, con una pandemia que hundió la demanda y un récord de renovables—, fue el año con el precio de la electricidad más barato en más de una década.
El ministro de Comercio, Alberto Garzón, publicó ayer un hilo en Twitter tratando de explicar las causas de la actual subida del precio de la electricidad. “El mercado energético heredado por el Gobierno estaba mal diseñado y pensado para la era de los combustibles fósiles. Por eso se han realizado numerosas reformas para una transición energética justa, pero queda camino por andar. Por delante tenemos un problema que es estructural”, apuntó en uno de sus comentarios, en los que pedía nacionalizar una de las grandes operadoras del mercado. “En España el sector energético está dominado por tres grandes empresas, que tienen un gran poder de mercado. La composición social general de estas empresas es también problemática: años de conflictos de interés han puesto nombre a su poder”, lanzó.
Endesa recordaba esta misma semana que la electricidad en España es cara debido a que hay una serie de cargas que solo paga el consumidor eléctrico a través del recibo de la luz.
“El mercado mayorista no lo regula el Gobierno. Ni antes que estaba barato ni ahora que está caro”, zanja Joaquín Giráldez, socio de la consultora Ingebau. “Es algo coyuntural. Y si hablamos de consumo doméstico la subida es muy pequeña”, añade.
El pico máximo este miércoles se alcanzará a las 21.00, con 112,84 euros el MWh; la hora más barata será las cinco de la mañana (61,35 euros). Las razones son varias: pocas renovables en la generación eléctrica, que son las energías más baratas; aumento del precio del gas por la fuerte demanda, sobre todo de los países del norte de Asia; consumos disparados —en España la demanda ha rozado máximos por el frío, hasta alcanzar el viernes los 42.000 MW—, y el aumento del precio del CO₂.
El aumento de precios responde a circunstancias del mercado que no solo se han producido en España. También han afectado a Europa y Asia, dándose el caso de que en el Reino Unido o Japón el precio del MWh ha superado los 700 euros. “En Asia hay riesgo de suministro. Aquí la situación no es ni mucho menos dramática”, matiza Jorge Morales de Labra, ingeniero industrial especializado en el sector eléctrico. El gestor de la red, Red Eléctrica de España (REE), confirma que a pesar del mal tiempo no ha habido daños en las instalaciones ni cortes por averías.
Fijación de precios
Pero, como se dice en el mundillo, “si te han explicado el sistema eléctrico y lo entiendes, es que te lo han explicado mal”. Los precios en el mercado diario se fijan a través de un proceso de casación en el que las comercializadoras y generadoras de electricidad lanzan sus ofertas para cada hora del día siguiente: las fuentes más baratas —nuclear y renovables—, son las primeras en entrar; las más caras —como el ciclo combinado—, son las últimas. Pero finalmente todas las centrales acaban recibiendo el precio de la última oferta que cubre la demanda, la más cara.
“El mercado mayorista tiene reglas comunes en más de 20 países de la UE y es normal que haya vaivenes”, añade Morales de Labra, quien propone otra solución: una retribución fija para ciertas tecnologías para dar estabilidad a los precios. Estas son la nuclear, las renovables y las centrales hidroeléctricas. Estas últimas, en particular, no ofertan a su coste marginal sino al coste de oportunidad. Es decir, calculan qué central produciría si no estuviera el agua y entran cuando más conviene.
”Hay mucha alarma, pero la gente ni sabe qué factura tiene y la subida solo afecta al 40% de los consumidores”, matiza Francisco Valverde, analista del mercado eléctrico. Este 40% es el que tiene contratada una tarifa del mercado regulado, la única donde el coste de la electricidad consumida, que solo supone un 35% del recibo final, depende de la cotización del precio del kilovatio-hora (kWh) en el mercado mayorista. Aun así, expertos y asociaciones de consumidores recuerdan que este sistema es, pese a los vaivenes, más barato que el mercado libre, donde el precio del kWh es el acordado con la compañía comercializadora. “El escándalo de la subida de la electricidad es puntual y solo para el 40% de consumidores; el restante 60% paga todo el año la luz más cara”, concluye Valverde.
El alza de la demanda en Asia dispara el precio del gas
La ola de frío no solo está azotando a España. Las temperaturas extremas en el norte de Asia han tensionado los mercados tanto a nivel doméstico como internacional: el fuerte repunte en la demanda de gas natural licuado en esta región y problemas de transporte ha llevado a varios buques a desviarse para garantizar el suministro. En países como Japón, por ejemplo, el precio de la electricidad en el mercado mayorista ha alcanzado máximos históricos y ha obligado al Gobierno a pedir a sus ciudadanos que limiten el consumo para evitar apagones.
En España, el precio en el mercado ibérico del gas (Mibgas) superó los 50 euros por megavatio-hora (MWh) la semana pasada, cuando al empeoramiento de las condiciones meteorológicas se unieron problemas de suministro desde Argelia. También en el mercado holandés TTF, de referencia en Europa, el precio se incrementó por el alza de la demanda de gas en Asia.
A inicios de esta semana, el precio diario del gas en Mibgas descendió hasta niveles cercanos a los 30 euros el MWh. Los precios de la electricidad en el mercado mayorista español, sin embargo, se mantienen disparados.