Las claves del nuevo Ingreso Mínimo (IMV) que permite que personas sin hogar y temporeros accedan a la ayuda
La medida permitirá que parte de las 60.000 solicitudes del IMV rechazadas sean aprobadas, según el ministro Escrivá
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes una modificación en los requisitos para tener acceso al ingreso mínimo vital (IMV) para que temporeros, personas sin hogar o que residan en centros de acogida puedan acceder a esta prestación. El objetivo de esta reforma, según el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, es reducir el número de peticiones del IMV denegadas, ...
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes una modificación en los requisitos para tener acceso al ingreso mínimo vital (IMV) para que temporeros, personas sin hogar o que residan en centros de acogida puedan acceder a esta prestación. El objetivo de esta reforma, según el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, es reducir el número de peticiones del IMV denegadas, unas 60.000 hasta el momento. “Estamos rechazando a personas que con estos ajustes podrían tener acceso”, ha dicho Escrivá en este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
En concreto, la nueva norma suprime el límite de titulares por vivienda que pueden recibir el IMV, permitiendo que las personas sin hogar que duermen en centros temporales puedan percibir la ayuda, así como quienes se encuentran en situación vulnerable y comparten vivienda con otras personas en situación similar.
La Seguridad Social también facilitará el acceso al IMV a las llamadas unidades familiares transitorias. Esto es, aquellos beneficiarios del ingreso que tienen que mudarse junto a otros inquilinos por casos de violencia de género, divorcio o desahucio. La Administración no penalizará (durante un máximo de tres años en el caso de desahucio) que el beneficiario conviva con otras personas. Según ha detallado el ministro, hasta la reforma de este martes, “irse a vivir con un familiar configura una unidad familiar mayor que puede resultar una renta agregada que impida acceder al IMV”.
Para que los nuevos beneficiarios puedan demostrar todo esto y tengan acceso a la prestación, el Estado permitirá que los servicios sociales y entidades colaboradoras realicen el seguimiento de estas familias. Escrivá ha concretado que deberá demostrarse, por ejemplo, la ausencia de vínculos entre personas del mismo domicilio que demanden la ayuda “en el momento de solicitar la prestación”. También podrá ser la Seguridad Social la que se dirija a estas personas para pedir una aclaración de su situación.
Las cifras del IMV
El beneficiario individual del IMV recibe 469,93 euros mensuales en 2021. Esta cantidad aumenta hasta los 610,91 euros mensuales para una pareja, 751,89 euros si tienen un hijo o si son tres adultos y continúa aumentando a medida que la unidad tiene más miembros. En el caso de las familias monoparentales, la cuantía se eleva hasta los 714,30 euros para un adulto y un menor y también crece cuantos más hijos tenga a su cargo.
En los primeros seis meses de funcionamiento, de mayo a noviembre, el IMV ha llegado a un total de 160.000 hogares donde vivían 460.000 personas. Según destacó a la semana pasada Franc Cortada, director de Oxfam Intermón, esta prestación necesita “una mejora urgente en su puesta en práctica”, ya que estaba previsto que llegase a 850.000 hogares, como calculó el Gobierno antes de su puesta en marcha. Según cálculos de la ONG, si el IMV hubiese actuado sobre el número de familias esperadas, “habría salvado de la pobreza a 277.000 personas y reducido la pobreza severa en 230.000 personas” en España.