El nuevo presidente de Indra ganará una quinta parte que sus dos principales subordinados
Mar Murtra percibirá 550.000 euros al año frente a los más de 2,5 millones que recibirán los dos nuevos consejeros delegados
Marc Murtra, el nuevo presidente de Indra, ganará cinco veces menos que sus principales subordinados, los dos consejeros delegados que ha nombrado la firma tecnológica para que se ocupen de la gestión de la compañía. Murtra recibirá 550.000 euros al año, frente a los 2,5 millones que ganarán cada uno Ignacio Mataix y Cristina Ruiz, responsables de las divisiones de Transpo...
Marc Murtra, el nuevo presidente de Indra, ganará cinco veces menos que sus principales subordinados, los dos consejeros delegados que ha nombrado la firma tecnológica para que se ocupen de la gestión de la compañía. Murtra recibirá 550.000 euros al año, frente a los 2,5 millones que ganarán cada uno Ignacio Mataix y Cristina Ruiz, responsables de las divisiones de Transporte y Defensa y Minsait y nombrados consejeros delegados, con carácter solidario.
Así se recoge en el informe “Política de Remuneraciones de los Consejeros Ejecutivos”, que ha presentado la Comisión de Nombramientos de Indra y que ha sido aprobado por el consejo de administración de la compañía, tras el relevo de Fernando Abril-Martorell al frente de la presidencia, por cuyo desempeño en 2020 percibió 3,7 millones de euros, incluyendo sueldo fijo, retribución variable, planes de pensiones y bonus del plan de incentivos. Ignacio Mataix recibió 2,72 millones y Carmen Ruiz ganó 2,47 millones en el ejercicio pasado por todos los conceptos, incluyendo aportación al fondo de pensiones y bonus en acciones.
El informe justifica esa rebaja drástica de remuneración en la consideración de aspectos como “el perfil de la persona, el alcance de las funciones asignadas al cargo y los datos retributivos de mercado sobre presidentes no ejecutivos en el Ibex-35 y en otros países europeos”. Es decir, fundamentalmente en la pérdida de los poderes ejecutivos que tenía su antecesor
El hecho de que el directivo que ocupa el más alto puesto en el organigrama tenga una remuneración tan inferior a la de sus subordinados es una situación completamente inusual en una compañía cotizada, salvo en los llamados presidentes honorarios, ejecutivos que, en razón de su trayectoria en la empresa o su currículo, son designados para representar a una compañía. En este sentido, fuentes de los accionistas han señalado a EL PAÍS que, tras la polémica y el revuelo mediático que ha causado el cese de Abril-Martorell a instancias de la SEPI y su sustitución por una persona con más perfil político (Marc Murtra ha ocupado diversos cargos en la Administración siempre el amparo del PSC-PSOE) que técnico, mantenerle la retribución hubiera supuesto un motivo de polémica añadido.
Solo sueldo fijo
Para evitar que crezca esa polémica, la Comisión de Nombramientos, con mayoría de consejeros independientes, ha retirado al nuevo presidente todos los conceptos variables de su retribución, que estará exclusivamente integrada por el sueldo fijo (los citados 550.000 euros), a la que podrán sumarse las dietas por su posible pertenencia a alguna comisión del consejo, y los complementos en efectivo o en especie en concepto de beneficios sociales (incluyendo seguro de vida y accidentes y de asistencia sanitaria).
Aunque la nueva política de retribuciones ha sido aprobada por el consejo de administración unánimemente, y ahora tiene que ser refrendada por la junta de accionistas que se celebra el próximo 30 de junio, ha contado con el apoyo expreso de la SEPI, accionista de control con el 18,7% del capital, informaron las citadas fuentes. Las razones de este apoyo incondicional ha sido que de haber mantenido a Murtra la retribución de Abril-Martorell hubiera supuesto un agravio comparativo sin precedentes para otros presidentes de sociedades estatales o controladas por el Estado como Aena, Renfe, Correos, Red Eléctrica, Hispasat o Seittsa, cuya remuneración es muy inferior.
El mayor de esos sueldos es del de la presidenta de Red Eléctrica, Beatriz Corredor, que percibe 546.000 euros al año. Hay que recordar que el presidente del Gobierno no alcanza ni los 90.000 euros anuales y la presidenta de la SEPI, Belén Gualda, en torno a 172.000 euros.
La comisión de nombramientos no solo ha propuesto la rebaja del sueldo del presidente, sino que ha aumentado de 550.000 a 600.000 euros, el sueldo fijo de los dos consejeros delegados en razón del mayor grado de responsabilidad que tendrán ahora en la compañía. Además, serán los principales beneficiarios del nuevo plan de incentivos para directivos 2021-23 con la entrega, sujeta a consecución de objetivos de un máximo de 1.254.320 acciones, que, a precio de cotización de este viernes (7,15 euros por título), están valoradas en casi 9 millones de euros.
Indemnización de Abril-Martorell
Por otra parte, Fernando Abril-Martorell recibirá tras su cese más de 6 millones de euros de indemnización por su salida de la compañía, por todos los conceptos, incluido el plan de prejubilación, la compensación por no trabajar durante un periodo en una empresa de la competencia y por no haber sido avisado del cese con antelación. Además, el directivo posee 543.101 acciones de la compañía, una participación que, a la cotización actual, tiene un valor cercano a los 4 millones de euros.