Telefónica cierra la venta del 60% de su filial de fibra en Colombia a KKR
La operadora española consigue 180 millones de euros que destinará a la reducción de deuda
Telefónica Colombia ha cerrado el acuerdo alcanzado con InfraCo, una sociedad colombiana controlada por el fondo KKR, para venderle activos de fibra óptica por unos 200 millones de dólares (180 millones de euros al cambio actual) y crear una empresa conjunta para desplegar y ofrecer fibra óptica en unas 90 ciudades del país sudamericano, según ha comunicado la operadora este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV),
La transacción se anunció el pa...
Telefónica Colombia ha cerrado el acuerdo alcanzado con InfraCo, una sociedad colombiana controlada por el fondo KKR, para venderle activos de fibra óptica por unos 200 millones de dólares (180 millones de euros al cambio actual) y crear una empresa conjunta para desplegar y ofrecer fibra óptica en unas 90 ciudades del país sudamericano, según ha comunicado la operadora este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV),
La transacción se anunció el pasado mes de julio y consiste en la venta de ciertos activos de fibra óptica propiedad de Telefónica Colombia —participada en un 32,5% por el Estado colombiano y por un 67,5% por la empresa española— para la prestación de servicios mayoristas de conectividad por parte InfraCo, para el desarrollo de actividades de despliegue de red de fibra óptica y otros servicios asociados.
Telefónica Colombia ha recibido como contrapartida 200 millones de dólares y un 40% de las acciones de una sociedad española controlada por KKR (HoldCo), el accionista único de InfraCo
La valoración implícita de HoldCo derivada de la transacción se estima en 500 millones de dólares, lo que supone unos 400 millones de euros al cambio que ofrece la propia operadora en el comunicado (1 euros a 1,25 dólares), aunque al cambio de hoy (1,136 dólares) el importe ronda los 440 millones. “Esta operación se enmarca dentro de la política activa de gestión de cartera del grupo Telefónica, basada en una estrategia de creación de valor y optimización del retorno sobre el capital”, explica el grupo español de telecomunicaciones.
En su día ambas empresas explicaron que se trata de un acuerdo con el que las compañías llevarán internet de fibra óptica a cerca de 90 ciudades de Colombia durante los próximos tres años “con una red que cubrirá 4,3 millones de Unidades Inmobiliarias Pasadas (UIPs)”. El Gobierno colombiano se ha propuesto alcanzar el 70% de los hogares conectados y mejorar la velocidad en la conectividad del país.
Los resultados de esta sociedad, en la que KKR adquirirá una participación mayoritaria del 60% y Telefónica Colombia el 40% restante, contribuirán además a avanzar en el propósito de eliminar las desigualdades en la transformación digital en las zonas más apartadas del país. Telefónica Colombia, que cuenta con más de 380.000 clientes de su servicio de fibra con velocidades simétricas de hasta 500MB, aportará a esta nueva sociedad su actual infraestructura de fibra óptica al hogar con la que llega a 50 ciudades y municipios.
Plan de desinversiones
La operación se enmarca en un plan de desinversiones que Telefónica está ejecutando para reducir su endeudamiento. En esa línea, la operadora cerró la venta de un 60% del capital de su vehículo de inversión en fibra en Chile a la propia KKR, valorado en unos 800 millones de euros, con una reducción de deuda de 400 millones.
Asimismo, Telefónica y el grupo financiero canadiense Caisse de dépôt et placement du Québec (CDPQ) alcanzaron en marzo un acuerdo para la construcción, desarrollo y explotación de una red mayorista de fibra óptica neutral e independiente en Brasil, a través de la sociedad FiBrasil Infraestrutura e Fibra Ótica SA (FiBrasil). Cada socio tiene un 50% del capital de la empresa, que prevé extender la fibra a cerca de seis millones de unidades inmobiliarias en 2024. En Alemania, Telefónica ha empezado a desplegar fibra a través del vehículo de inversión UGG, participado por Allianz. El objetivo es desplegar esta infraestructura en cerca de 2,2 millones de hogares, especialmente en las zonas rurales.