Cupra prepara el ‘sorpasso’ a Seat: aspira a vender medio millón de vehículos
La nueva marca de la filial española de Volkswagen presenta tres nuevos modelos
Desde hace cuatro años la compañía Seat funciona como un monstruo con dos cabezas. Por una parte, la septuagenaria marca española Seat, cuyo puntal era la capacidad de vender vehículos a volumen: antes de que asomara la cabeza el coronavirus, en 2019, comercializó 549.000 coches. La otra alma era Cupra, una enseña lanzada para atraer clientes con mayor capacidad adquisitiva y que buscaran...
Desde hace cuatro años la compañía Seat funciona como un monstruo con dos cabezas. Por una parte, la septuagenaria marca española Seat, cuyo puntal era la capacidad de vender vehículos a volumen: antes de que asomara la cabeza el coronavirus, en 2019, comercializó 549.000 coches. La otra alma era Cupra, una enseña lanzada para atraer clientes con mayor capacidad adquisitiva y que buscaran modelos con mayores prestaciones. Su objetivo era impulsar la rentabilidad de la filial española de Grupo Volkswagen. Pero ese reparto de papeles parece haberse acabado. A partir de ahora, Cupra representará el margen y el volumen: su objetivo es alcanzar el medio millón de vehículos comercializados al año a medio plazo.
Lo ha anunciado este martes el presidente de Seat, Wayne Griffiths, en un acto en Sitges (Barcelona) en el que ha presentado tres nuevos modelos para la marca ante un público de excepción como son los miembros de las familias Piech y Porsche, accionistas históricos del consorcio alemán. A la presentación también han asistido el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès; la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y la presidenta navarra María Chivite, entre otras figuras del ámbito político, económico y social.
Hace años que la compañía no celebra un evento similar para impulsar la marca Seat, que además de representar un catálogo envejecido en el que no entran nuevos modelos, se ha quedado de momento fuera de la apuesta por la electromovilidad en la que sí estará Cupra, de la que Griffiths ha dicho que es uno de los mayores éxitos entre las nuevas marcas lanzadas en los últimos años.
El momento en el que se producirá el sorpasso en ventas es solo una cuestión de tiempo. El pasado año Seat vendió 391.000 unidades por 79.000 de Cupra, marca que asimismo ha visto como su facturación saltaba de 430 millones de euros en 2018 a 2.200 millones en 2021. Este año las previsiones del grupo apuestan por duplicar tanto las ventas como la facturación. El crecimiento de Cupra marcará el futuro de Seat, explica el presidente del comité de empresa de Seat, Matías Carnero, que de momento solo tiene garantizados modelos hasta 2030, teniendo en cuenta el ciclo de vida de los vehículos. El Seat León fue el último en lanzarse y debería salir del mercado en 2029 si no es renovado.
Ese es el marco de empresa con el que Seat ha presentado en el centenario autódromo de Terramar los nuevos modelos que pretende comercializar bajo la enseña Cupra. Uno, que tomará el nombre del circuito de Sitges, será un todocamino deportivo que se fabricará en la factoría de Audi en Gyor (Hungría). Y los otros dos ya eran conocidos: el Tavascán, otro SUV, y el UrbanRebel, que será el vehículo más pequeño y el más económico de Cupra. Esos tres modelos se sumarán a los cuatro que actualmente figuran en el portafolio (Ateca, León, Formentor y Born) de la marca mimada por Wayne Griffiths.
El UrbanRebel es un modelo significativo porque es la piedra angular del futuro de la producción industrial de Seat en España. Sobre su plataforma la compañía española ha desarrollado la base para los modelos más económicos que desarrollarán también Volkswagen y Skoda a partir de 2025. El plan de 10.000 millones de euros de Grupo Volkswagen para la electrificación en España, con la transformación de las plantas de Martorell (Barcelona) y Landaben (Pamplona) y la futura fábrica de celdas de baterías de Sagunto, no se entiende sin la base de ese vehículo. “Es más que un coche para Cupra, es el modelo que democratizará la movilidad eléctrica urbana”, ha ensalzado Griffiths.
El Terramar presentará todavía versiones de combustión con tecnología de motores híbridos, mientras que el Tavascán (ambos se lanzarán en 2024) es una clara apuesta por la electrificación y se convertirá en el segundo modelo con solo versiones eléctricas de la compañía. Este último, junto al Formentor (el vehículo más vendido de Cupra) son la apuesta para ganar nuevos mercados internacionales y huir de la dependencia de Europa.
Producción en Barcelona y empleo
Tras detallar los planes de nuevos productos, la pregunta que se hacen los sindicatos es cuántos de esos modelos acabarán fabricándose en Barcelona y cuántos empleos se acabarán salvando de la transformación al vehículo eléctrico. En plenas negociaciones por el nuevo convenio colectivo, Seat ha comunicado al comité de empresa sus previsiones de recortes de empleo vinculados a la electrificación, que requiere de menos horas de mano de obra por vehículo producido. La compañía plantea que esa transformación requerirá suprimir 2.130 de los 15.000 puestos de trabajo actuales, lo que pretende hacer a través de prejubilaciones y bajas voluntarias. Martorell sufrirá, pero más lo hará la fábrica de componentes de El Prat de Llobregat, que pasará de unos 1.100 trabajadores a 500.
Los sindicatos pretenden que, además del vehículo eléctrico pequeño, en Martorell se fabrique un vehículo de mayores dimensiones para poder anclar el mayor nivel de empleo posible.