La Delegación del Gobierno en Murcia abre un expediente a Vox por reunir a 1.500 personas en plena pandemia
El acto, anunciado como una rueda de prensa, se convirtió en un mitin mulitudinario de Abascal
La Delegación del Gobierno en Murcia ha abierto expediente sancionador a Vox por reunir sin autorización a unas 1.500 personas de pie frente a la catedral murciana a primera hora de la tarde del jueves para escuchar a su líder Santiago Abascal. El expediente se ha abierto por no haber comunicado previamente la celebración del acto, pero la sanción podría ser mayor al haberse incumplido las medidas adoptadas por el Gobierno regional para frenar el contagio del coronavirus, que limitan las reuniones al aire l...
La Delegación del Gobierno en Murcia ha abierto expediente sancionador a Vox por reunir sin autorización a unas 1.500 personas de pie frente a la catedral murciana a primera hora de la tarde del jueves para escuchar a su líder Santiago Abascal. El expediente se ha abierto por no haber comunicado previamente la celebración del acto, pero la sanción podría ser mayor al haberse incumplido las medidas adoptadas por el Gobierno regional para frenar el contagio del coronavirus, que limitan las reuniones al aire libre a un máximo de 100 personas de pie y 500 sentadas, siempre que se respeten las distancias de seguridad.
Vox había convocado en teoría una rueda de prensa, pero a través de las redes sociales se movilizó a sus simpatizantes, convirtiendo el acto en un mitin político contra la moción de censura presentada por Ciudadanos y PSOE contra el presidente regional, Fernando López Miras, del PP. Durante la pasada campaña al Parlamento catalán, Vox recurrió a la fórmula de no convocar mítines, sino teóricas “declaraciones a la prensa” en lugares públicos a los que acudían sus militantes y simpatizantes y donde los periodistas no podían hacer preguntas.
En su cuenta de Twitter, Abascal ha acusado a la Delegación del Gobierno de tratar de “criminalizar a los murcianos que salieron a la calle convocados por la traición de Cs y el robo del socialismo corrupto”. El PSOE murciano, por su parte, ha acusado al presidente regional de “irresponsabilidad” por mirar para otro lado ante un acto “vergonzoso y peligroso” que pone en riesgo la salud pública.