Leonor de Borbón, jefa suprema de unos ejércitos con solo un 13% de mujeres
La primogénita de los Reyes será la primera mujer Borbón y la primera princesa de Asturias en recibir formación militar. Su paso por las academias castrenses reabre el debate sobre la igualdad en las Fuerzas Armadas
Menos de una docena de mujeres han sido princesas de Asturias por derecho propio en los 635 años de historia del título, creado por Juan I de Castilla en 1388 para el heredero de la corona. Cada una de ellas, en su estilo, tuvo que librar su batalla en un mundo dominado por los hombres. María de Castilla, la primera de esta breve lista, fue reina de Aragón por matrimonio y medió en las luchas castellano-aragonesas de 1453. Juana de Castilla, llamada “la Beltraneja”, se enfrentó a su propia tía, Isabel la Católica, por el trono. Isabel I, que solía acompañar a Fernando de Aragón en sus campañas...
Menos de una docena de mujeres han sido princesas de Asturias por derecho propio en los 635 años de historia del título, creado por Juan I de Castilla en 1388 para el heredero de la corona. Cada una de ellas, en su estilo, tuvo que librar su batalla en un mundo dominado por los hombres. María de Castilla, la primera de esta breve lista, fue reina de Aragón por matrimonio y medió en las luchas castellano-aragonesas de 1453. Juana de Castilla, llamada “la Beltraneja”, se enfrentó a su propia tía, Isabel la Católica, por el trono. Isabel I, que solía acompañar a Fernando de Aragón en sus campañas militares, fue decisiva para la victoria del reino castellano-aragonés en las guerras que emprendió en Granada entre 1482 y 1492. Isabel II, apodada “la de los tristes destinos”, perdió el trono enredada en las intrigas de su corte de políticos, militares y clérigos. Leonor de Borbón y Ortiz, descendiente de todas ellas y primera en la línea de sucesión, probablemente no tendrá que llevar armadura ni luchar cuerpo a cuerpo, pero sí tendrá un papel en una “contienda”: la de la igualdad en las Fuerzas Armadas.
“El ingreso de Su Alteza Real la Princesa de Asturias en las academias militares refuerza el papel cada vez más relevante de la mujer en las Fuerzas Armadas”, reza el preámbulo del Real Decreto 173/2023, la norma publicada este miércoles en el Boletín Oficial del Estado que regula la formación y carrera militar de la primogénita de Felipe VI y la reina Letizia. Según el nuevo reglamento, Leonor de Borbón, de 17 años, se incorporará en agosto a la Academia General Militar de Zaragoza como dama cadete en el curso académico 2023-2024 y luego pasará por la Escuela Naval Militar como guardiamarina de primero y por la Academia General del Aire como alférez alumna. La confirmación de que la princesa de Asturias tendrá una instrucción militar de tres años abre el debate sobre la paridad en los tres ejércitos, en los que todavía hay una gran desigualdad entre hombres y mujeres.
El Observatorio Militar para la Igualdad entre mujeres y hombres en las Fuerzas Armadas, organismo creado por el Ministerio de Defensa en 2005, acaba de publicar su informe anual sobre el personal del ejército, en el que se vuelve a confirmar que el porcentaje de efectivos de sexo masculino es mayoritario. Según los últimos datos, correspondientes a 2022, ellos representan el 87% mientras que ellas, solo el 13%. Un total de 106.204 hombres frente a 15.864 mujeres. La cifra está estancada y no ha variado mucho desde el nacimiento de la princesa Leonor, en 2005, cuando el porcentaje de mujeres rozaba el 12%. Actualmente, ellas conforman el 11,5% del Ejército de Tierra, el 13,8% de la Armada y el 14,2% del Ejército del Aire. Donde más mujeres hay, el 36,6%, es en los Cuerpos Comunes: el Jurídico Militar, el de Sanidad, el de Intervención y el de Músicas Militares.
En 1955, cuando el entonces príncipe Juan Carlos de Borbón inició su formación militar en la Academia General de Zaragoza y juró la bandera como caballero cadete, era impensable que una mujer aspirara a una carrera en los ejércitos. En aquella España franquista, la mujer ni siquiera podía abrir una cuenta del banco, hacerse el DNI o administrar los bienes comunes. En 1985, cuando el príncipe Felipe siguió los pasos de su padre, las Fuerzas Armadas todavía eran terreno vedado para las españolas. No será hasta 1988 cuando se apruebe el acceso de estas al cuerpo de ingenieros y cuerpos comunes, y en 1999, con la Ley del Régimen Personal de las Fuerzas Armadas, se aprobará su ingreso a todos los cuerpos, escalas y destinos. En 2007, durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y dos años después del nacimiento de la princesa de Asturias, se hizo efectiva la Ley de Igualdad, que en unos de sus capítulos recuerda el principio de igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres dentro de las Fuerzas Armadas.
“Yo y el resto de mis compañeras nos hemos sentido de continuo cuestionadas y retadas”, reconoció Patricia Ortega, una de las primeras 27 mujeres en ingresar en el Ejército en 1988 y la primera en alcanzar el empleo de general de división de las Fuerzas Armadas, en una entrevista con EL PAÍS en 2019. “Pero cuando todo se pone en contra, sacas lo mejor de ti misma”, añadía, exigiendo más transparencia en los procesos de promoción. El próximo mes de agosto, 35 años después de que Ortega fuera admitida en la Academia General Militar de Zaragoza, Leonor de Borbón también ingresará en el centro de enseñanza superior del Ejército de Tierra y hará historia. Será la primera mujer Borbón y la primera princesa de Asturias en recibir formación militar.
La primogénita de Felipe VI está llamada a ser reina de España algún día, algo que no ocurre desde hace más de 150 años (la última fue Isabel II). Tal como establece la Constitución, ostentará el mando supremo de las Fuerzas Armadas, pero será capitana general de una institución en la que, paradójicamente, por el momento es difícil encontrar mujeres en los escalafones más altos. Según el informe del Observatorio Militar para la Igualdad, el 8,3% de los cuadros de mandos están ocupados por mujeres. En el caso de oficiales generales, la cifra cae al 0,9%. Actualmente, solo hay dos generales: Patricia Ortega, que fue promovida en 2019, y Begoña Aramendía Rodríguez de Austria, promocionada en 2021. Ambas fueron ascendidas a propuesta de Margarita Robles, la tercera mujer ministra de Defensa en la historia. Desde que llegó Robles a esta cartera, en 2018, se fomenta activamente que más militares mujeres aspiren a general. Este año, siete de ellas, todas coroneles, han completado el curso de ascenso a ese empleo.
Un 13% de mujeres en el Ejército puede parecer poco, pero la integración e igualdad de las militares en España se encuentra ligeramente por encima de la media de los países de la OTAN (11%). The #Shecurity Index, un informe anual basado en la evolución de la composición de los ejércitos de cada país, estima que las españolas necesitarán 558 años para lograr la paridad en las Fuerzas Armadas. Defensa aspira a que la instrucción de la princesa de Asturias refuerce el papel de la mujer en la institución. La incógnita es si la presencia de una princesa de 17 años en ese mundo de hombres servirá o no para acortar los cinco siglos que restan para alcanzar la igualdad.
La formación militar de las herederas de Europa
El de Leonor no es un caso aislado entre las mujeres herederas de las familias reales europeas. Todas ellas han pasado por distintas formaciones militares, desde la mayor de todas, la princesa Victoria de Suecia, de 41 años y alejada generacionalmente de las que le siguen, hasta las más jóvenes: Isabel de Bélgica (21 años), Amalia de los Países Bajos (de 19) e Ingrid de Noruega (de 19, heredera del heredero, Haakon). En marzo de 2003, Victoria pasó apenas tres semanas en el ejército de Suecia, pero cada año participa en diversos ejercicios militares. Aunque consorte, también será reina Mary de Dinamarca, la esposa del heredero Federico, que participó en ejercicios militares de tiro y se entrenó en la Milicia Nacional (Hjemmeværnet) durante varias semanas en 2008, cuando tenía 36 años y dos niños. En 2019 fue nombrada capitana de la Guardia Nacional Danesa.
Isabel de Bélgica y Amalia de los Países Bajos ya han completado su formación militar. La duquesa de Brabante, heredera del rey Felipe de los Belgas (que también estudió el Bachillerato en el mismo UWC Atlantic College de Gales que Leonor, solo que antes), se formó en el Ejército desde agosto de 2020 y durante un año en la Real Academia Militar de Bélgica (por la que ya pasaron su padre y su abuelo, Alberto II) para asumir en el futuro la jefatura de las Fuerzas Armadas de su país. Amalia, por su parte, hizo visitas a distintas bases de los Ejércitos de tierra, mar y aire para conocer su labor a lo largo de 2022, y las imágenes de dichos encuentros se publicaron en diciembre. El rey neerlandés no es comandante en jefe de los Ejércitos del país, pero Amalia vivió la experiencia de conocerlo con actividades como volar un avión de caza F-16, pilotar un tanque y sumergirse en un submarino de la clase Walrus (morsa) para luego llevarlo a la superficie.
Aunque todavía no es heredera, Ingrid de Noruega ya ha recibido alguna instrucción y realizado visitas, aunque no ha pasado por un servicio militar extenso. Fue en octubre de 2022. Entonces visitó un buque de combate y una corbeta, y pasó por la Brigada Norte del Ejército en el campamento de Setermoen, en Indre Troms, participando en batallones médicos, de artillería o de inteligencia. En un futuro, tras su abuelo, Harald V, y su padre, Haakon, Ingrid se convertirá en comandante suprema de las Fuerzas Armadas de su país.