Podemos acude a la policía tras el vaciado de los despachos que sus diputados tenían con Sumar en el Congreso

Las estancias estaban en el espacio asignado al grupo parlamentario de Yolanda Díaz, que fue abandonado por el partido de Ione Belarra en diciembre para pasarse al Grupo Mixto

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, asistía a la reunión de la Junta Portavoces del Congreso, el martes en Madrid.Foto: J. P. Gandul (Efe) | Vídeo: EPV
Madrid -

Podemos ha pedido amparo a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, por la “entrada forzada” a los despachos de los cuatro diputados que la formación conserva y el vaciado de sus pertenencias, que han sido depositadas en un pasillo. El partido que dirige Ione Belarra ha denunciado en la comisaría de policía de la Cámara “el acceso irregular al despacho de sus diputados”, ya que asegura que no tiene comunicación alguna sobre cambios en los espacios personales de trabajo adjudicados a sus parlamentarios. Fuentes de Sumar han explicado que, desde el pasado diciembre, ...

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Podemos ha pedido amparo a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, por la “entrada forzada” a los despachos de los cuatro diputados que la formación conserva y el vaciado de sus pertenencias, que han sido depositadas en un pasillo. El partido que dirige Ione Belarra ha denunciado en la comisaría de policía de la Cámara “el acceso irregular al despacho de sus diputados”, ya que asegura que no tiene comunicación alguna sobre cambios en los espacios personales de trabajo adjudicados a sus parlamentarios. Fuentes de Sumar han explicado que, desde el pasado diciembre, cuando Podemos abandonó la confluencia de Yolanda Díaz para pasarse al Grupo Mixto, habían pedido a los diputados de Belarra que cambiasen los despachos. La Mesa del Congreso decidió en una reunión del 30 de enero ejecutar ese cambio, según confirma oficialmente la Cámara. Ninguna de las fuentes ha aclarado si el vaciado ha sido ejecutado por personal de Sumar. Hay una investigación en curso.

Los cuatro diputados de Podemos abandonaron en diciembre el Grupo de Sumar y se pasaron en bloque al Grupo Mixto (en realidad fueron cinco, pero una de ellos, Lilith Verstrynge, anunció el 26 de enero que dejaba Podemos y el Congreso). Los despachos de esos cuatro parlamentarios están en la cuarta planta del Congreso, donde sigue instalado Sumar. Fuentes de esta formación aseguran que se les dio un “tiempo prudencial” para que los desocuparan. La semana pasada, agregan, la Mesa emitió una instrucción para que las cuatro estancias fueran desalojadas, a la que no respondió Podemos.

La formación fundada por Pablo Iglesias afirma que desconocía esta instrucción, ya que asegura que no ha recibido “ninguna notificación referida a los despachos de sus diputados”. Podemos se aferra a que la resolución de la Mesa, literalmente, solo notifica que se acuerda “modificar la distribución de espacios entre los grupos parlamentarios” y “asignar” al Grupo Parlamentario Mixto “los despachos 53 y 56 de la planta 3 bis del edificio de ampliación 2 que anteriormente pertenecían al grupo de Sumar”. El texto no dice que los diputados de Podemos deban dejar su anterior despacho, pero sí asigna nuevas dependencias al Mixto, por lo que fuentes parlamentarias razonan que esa sería la ubicación de sus cuatro parlamentarios.

En declaraciones a los medios de comunicación, el secretario general de Sumar, Txema Guijarro, ha reiterado que la Mesa tomó hace días la decisión sobre el cambio de despachos. “Se tendrán que producir esos cambios con normalidad. Hemos estado esperando a que actuaran porque tenemos a compañeros que tienen que trabajar y no se pueden instalar. Esperamos que se resuelva cuando antes”, ha explicado.

El partido de Belarra denuncia que ha habido “un acceso irregular” a los despachos, de los que han sido extraídas las pertenencias de los mismos, “y depositadas en una zona de paso de la Cámara”. Podemos considera estos hechos “de la máxima gravedad” y espera que Armengol “actúe” y la policía “esclarezca los hechos por si fueran constitutivos de delito”.

Los despachos del Congreso no son personales, sino que la Cámara los asigna a los grupos parlamentarios en función de un acuerdo de distribución que se adopta al inicio de cada legislatura. Y cuando hay relevos o cambios de un grupo a otro, se da un tiempo para desalojarlos o bien para que el personal de la Cámara proceda a vaciarlos.

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