Roban joyas en la Catedral de Plasencia valoradas en más de un millón de euros
Entre los elementos hurtados se encuentra la corona de la patrona de la ciudad, realizada en oro macizo el pasado siglo por donación de los ciudadanos
La catedral de Plasencia (Cáceres, 39.412 habitantes) sufrió el pasado sábado por la noche un robo de joyas en el interior del museo, entre ellas la corona de la Virgen del Puerto, patrona de la ciudad, la corona del Niño Jesús, dos cruces pectorales y varios anillos episcopales valorados en más de un millón de euros.
La voz de alarma la daba el domingo el Cabildo de la Catedral placentina cuando los trabajadores de este lugar llegaban al recinto para preparar la misa de Ramos. En ese momento se dieron cuenta de lo ocu...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
La catedral de Plasencia (Cáceres, 39.412 habitantes) sufrió el pasado sábado por la noche un robo de joyas en el interior del museo, entre ellas la corona de la Virgen del Puerto, patrona de la ciudad, la corona del Niño Jesús, dos cruces pectorales y varios anillos episcopales valorados en más de un millón de euros.
La voz de alarma la daba el domingo el Cabildo de la Catedral placentina cuando los trabajadores de este lugar llegaban al recinto para preparar la misa de Ramos. En ese momento se dieron cuenta de lo ocurrido, por lo que interpusieron la correspondiente denuncia ante la Policía Nacional, que se ha puesto al frente de la investigación.
El objeto robado más importante es la corona de la Virgen y del Niño Jesús, elaborados en oro macizo gracias a las donaciones de ciudadanos el pasado siglo, en concreto en 1952. Para su elaboración se emplearon 2.261 gramos de oro, más de 85 gramos de platino, 124 brillantes, 1.377 rosas, 15 perlas, una perla japonesa, 39 medias perlas, 506 aljófares, 44 turquesas, 53 esmeraldas, 175 topacios, 100 olivinas y 12 turmalinas. Todas las donaciones se encuentran recogidas en el “Libro de la Coronación” con los nombres de las personas que quisieron aparecer o de manera anónima.
En el reverso de la corona lleva cuatro esmaltes con los escudos del Papa, del obispo Pedro Zarránz y Pueyo, de la catedral y de la ciudad de Plasencia. La corona de la Virgen está rematada por una paloma de muy fina traza.
Los autores del robo lograron acceder a estas joyas, a pesar de que el museo catedralicio cuenta con cámaras de vigilancia, alarmas y cristales blindados. El suceso se produce a dos semanas de la celebración de la novena de la Virgen, porque el próximo 6 de abril estaba previsto el traslado de la corona hasta el santuario debido a que un día después tiene lugar la romería en honor a la patrona.
“Son horas difíciles y tristes para la ciudad, ya que este suceso ha supuesto un duro golpe, no por el valor material, que lo tiene, sino también por el valor emocional”, ha trasladado el alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, el cual ha informado del coste millonario de lo sustraído. “Hablamos de una corona que el nuncio de su santidad colocó a la imagen de la Virgen del Puerto el 27 de abril de 1952 en el acto de la coronación canónica como patrona de la ciudad”, ha contado Pizarro.
La policía Nacional tiene abierta una investigación para esclarecer lo sucedido y el posible destino de las joyas, “las investigaciones ya están en marcha con el objetivo de recuperar las joyas de todos los placentinos y de toda la gente que tiene devoción a la Virgen del Puerto”.
Desde la Junta de Extremadura, el director del centro de conservación y restauración de bienes culturales, Javier Cano, ha explicado que en la investigación se encuentran trabajando la policía científica de Cáceres y Plasencia y este lunes se ha sumado la de Madrid para conocer todos los detalles del robo. “Esperemos que saquen sus frutos las investigaciones y saber si ha sido una banda organizada o no, o si las piezas están en la Península o ya no”, destacaba el responsable público en Cadena SER Norte de Extremadura.
El obispo de Plasencia, Ernesto Brotóns, ha afirmado sobre este robo en un comunicado que “duele en el alma” porque no solo han sustraído, entre otras piezas, “una joya preciada y preciosa, de incalculable valor, sino un pedacito, no pequeño, del corazón de los placentinos”.
En un mensaje dirigido a los fieles, Brotóns ha puesto de manifiesto que dichas coronas fueron “forjadas gracias al cariño y la devoción de nuestros mayores, ricos y pobres. Dos coronas robadas, testigos de muchas lágrimas, oraciones, súplicas, recuerdo y memoria tierna y agradecida de nuestros antepasados, de nuestros mayores”. “Aun siendo consciente de que suena ingenuo, y quizá lo sea, ruego a quien nos ha arrebatado este tesoro que recapacite y lo retorne”, ha señalado el prelado.
Mientras desde la cofradía de la Virgen del Puerto, su presidenta Leonor Nogales trasladaba la indignación de los ciudadanos de Plasencia, ya que fueron muchos los que aportaron algo para elaborar la corona. “Fueron 800 familias que, según sus posibilidades, aportaron su esfuerzo para que la Virgen luciese la corona y que llevara algo de cada placentino, de nuestros abuelos, es una pena que haya pasado a quince días de la novena”, decían desde la cofradía. Nogales dice que tiene confianza en que los ladrones se arrepientan y devuelvan la corona de la Virgen.
La corona se realizó en los talleres Félix Granda de Madrid y que en el “Libro de la Coronación” se dice de ella: “La corona es un verdadero prodigio del arte. A la suntuosidad y riqueza une su labor dina y delicada de filigrana, con una acertada combinación de las piedras preciosas. Es un maravilloso encaje de oro y pedrería, verdadero encanto de los ojos, cuando la luz, al quebrar en ella, le arranca destellos deslumbrantes tonos y matices de insuperable belleza”.