Muere el exalcalde de Marbella Julián Muñoz a los 76 años
El antiguo regidor de la localidad malagueña y expareja de Isabel Pantoja fallece a causa de un cáncer
Julián Muñoz (El Arenal, Ávila, 1947) ha fallecido este martes en Marbella a los 76 años, según han confirmado a Europa Press fuentes cercanas a la familia. El que fuese alcalde de la localidad malagueña entre 2002 y 2003 sufría un cáncer que le había mantenido hospitalizado en la última semana en el Hospital Costa del Sol y donde fue sedado la tarde del lunes, en presencia de su familia que acudió a arroparlo. El exregidor marbellí, detenido en la operación Malaya y que se hizo asiduo a las revistas del corazón tras comenzar una relación con Isabel Pantoja. Estuvo casado previamente con Maite Zaldívar, con la que tuvo dos hijas. “Tengo un cáncer galopante”, confesó este mes de abril.
Muñoz fue una de las piezas fundamentales del Grupo Independiente Liberal (GIL), partido político que creó Jesús Gil. De su mano entró como concejal en el Ayuntamiento de Marbella en 1991, donde año a año fue adquiriendo más responsabilidades hasta ser elegido teniente de la alcaldía. En 2002, tras la dimisión de Gil por su imputación en el caso ‘Camisetas’, fue investido alcalde. En 2003 obtuvo mayoría absoluta en las elecciones municipales con casi el 50% de los votos. Duró poco: una moción de censura impulsada por Marisol Yagüe le apartó de la alcaldía apenas dos meses después. Por aquel entonces había empezado ya un mediático idilio con Isabel Pantoja, que llevó a la pareja a protagonizar decenas de portadas de la prensa rosa. “Estaba envuelto en una nube y me creía el príncipe Aladdin. Se dieron una serie de circunstancias y emprendí un camino sin retorno”, dijo Muñoz en Televisión Española sobre su relación con la cantante muchos años más tarde.
La idílica situación de Muñoz y Pantoja cambió de manera drástica en 2006. El 19 de julio de aquel año agentes de la Policía Nacional detenían al exalcalde dentro de la tercera fase de la operación Malaya contra la corrupción en el consistorio marbellí. Un caso, dirigido por el juez Miguel Ángel Torres, que puso patas arriba al municipio. Arrancó entonces un largo proceso de idas y venidas al juzgado, de largas investigaciones y tantas causas abiertas que hasta los propios tribunales perdieron la cuenta. Todos tenían que ver con distintos delitos relacionados siempre con licencias y convenios urbanísticos.
Muñoz acumuló condenas: sumaban más de un centenar en 2013 y luego llegaron más. Eso sí, el tribunal dictó que las penas se podrían acumular, pero que su paso por la cárcel nunca superaría los 20 años. Ingresó en prisión en Alhaurín de la Torre en 2013 y dos años más tarde, en otro juicio, pidió perdón a Marbella por todos sus actos delictivos. En 2016 ya consiguió sus primeros beneficios penitenciarios para salir los fines de semana. “Quiero estar con mis hijas y con mis nietos, nada más. Aspiro a intentar vivir”, dijo en su primer permiso Muñoz. Poco después pasó a tercer grado del Centro de Inserción Social (CIS) de Algeciras debido a una “enfermedad muy grave con padecimiento incurable” según dictó la audiencia malagueña. A partir de febrero de 2017 pudo ya pasar las noches en su casa debido a ese estado de salud. Eso sí, fue obligado a volver al CIS después de que se hiciera viral un vídeo en el que se le veía bailar sevillanas en enero de 2018. “Me he equivocado, me arrepiento”, dijo entonces el exregidor, que consiguió la libertad vigilada por motivos de salud en noviembre de aquel año. En verano de 2021 obtuvo ya la libertad condicional por razones médicas debido a la “pluripatología grave e incurable” que padecía, según reflejaba el auto dictado por la Audiencia Nacional.
Sus visitas a los juzgados continuaron por la maraña de casos en los que había sido investigado a partir de la operación Malaya. Aún tenía, de hecho, asuntos pendientes. Y la última vez que se sentó en el banquillo de la Audiencia Provincial de Málaga fue en noviembre de 2020 en un juicio en el que también estaba acusado Juan Antonio Roca, cerebro de la corrupción en Marbella. El aspecto de Muñoz ya mostraba un fuerte deterioro físico. Y en las siguientes causas pendientes ya declaró por videoconferencia por enfermedad. La última vez fue el pasado otoño. En octubre, también junto a Roca y al empresario Tomás Olivo, reconoció los delitos de los que se le acusaba: fraude y prevaricación por distintas operaciones urbanísticas.
En la serie de Telecinco Julián Muñoz: No es la hora de la venganza, es la hora de la verdad declaró que su estado de salud empeoró durante sus años de estancia en la cárcel. También después, hasta que su delicada situación le llevó a ser ingresado a principios del pasado marzo en el Hospital Costa del Sol de Marbella. El día 25 del mismo mes pidió el alta voluntaria para continuar su tratamiento en casa y descansar rodeado de su familia. En los últimos días varios medios publicaron imágenes de Muñoz paseando con dificultades por Marbella.