Sumar afronta la bomba de Errejón en su momento de mayor debilidad
A la petición de responsabilidades que hace IU se suma un primer diputado que cree que la dimisión del portavoz no es suficiente. La dirección del partido de Díaz, mientras, defiende que ”lo único que había eran rumores”
La crisis por la caída de Íñigo Errejón sacude a Sumar en su momento más débil y pone a prueba de nuevo al espacio que coordina en el Gobierno Yolanda Díaz. Tras la dimisión de su portavoz parlamentario, forzada el jueves por las acusaciones de violencia machista, el líder de IU, Antonio Maíllo, elevó las críticas y pidió cuentas al apuntar, sin nombrarlo, al partido de la vicepresidenta. El diri...
La crisis por la caída de Íñigo Errejón sacude a Sumar en su momento más débil y pone a prueba de nuevo al espacio que coordina en el Gobierno Yolanda Díaz. Tras la dimisión de su portavoz parlamentario, forzada el jueves por las acusaciones de violencia machista, el líder de IU, Antonio Maíllo, elevó las críticas y pidió cuentas al apuntar, sin nombrarlo, al partido de la vicepresidenta. El dirigente reclamó “responsabilidades” si alguien “tuvo conocimiento” del comportamiento del entonces diputado “y no hizo nada”, mientras Más Madrid se afanaba en atribuirse la precipitación de su renuncia. La presión llega cuando la organización carece de un liderazgo claro tras el paso a un lado de Díaz en junio, en plena redefinición del proyecto y con la reapertura del debate para elegir a un sucesor en la portavocía del Congreso. En un tono muy diferente, desde el Ejecutivo, la socialista María Jesús Montero trasladó su respaldo al socio minoritario de la coalición al defender la “contundencia” con la que había actuado Sumar.
El mensaje de Maíllo, primero en alzar públicamente la voz para pedir que se den “respuestas”, golpeó este viernes al núcleo de Sumar, que con Díaz de viaje oficial en Colombia, mantuvo perfil bajo a lo largo de la jornada. En España, únicamente su responsable de comunicación, Elizabeth Duval, ofreció explicaciones en La Sexta, donde reiteró la versión de un día antes: que no había constancia de acusaciones por acoso contra Errejón.
La dirección del Movimiento Sumar insiste en ello, que nunca tuvo información fehaciente de que Errejón estuviese implicado en este tipo de agresiones. “Lo único que había eran rumores, pero como tantos que afectan a otras personas. Y nadie toma una decisión a partir de rumores”, afirma un destacado dirigente. Esos rumores apuntaban a excesos en las salidas nocturnas del hasta el jueves portavoz parlamentario, pero en ningún caso, aseguran las mismas fuentes, a hechos delictivos o degradantes para las mujeres. Sin embargo, sí reconocen que tuvieron conocimiento en 2023, en vísperas de las elecciones generales, de que una mujer había denunciado en las redes sociales tocamientos por parte de Errejón durante un concierto. Las fuentes consultadas señalan que el partido inició de inmediato averiguaciones sobre el caso porque el ahora dimitido iba a ser candidato. Pero resaltan que la denunciante borró al poco tiempo el mensaje y ningún otro testimonio lo corroboró. En los meses que ha ejercido como portavoz, agregan en la dirección de Sumar, no se recibió ninguna queja de su comportamiento y mantuvo una buena relación con el conjunto de diputados y diputadas.
“Hay responsabilidades de quien, si tuvo algún indicio o conocimiento de estos testimonios, no hizo nada. Sobre esas responsabilidades, alguien tendrá que dar respuestas”, aseguró muy duro Maíllo el viernes por la mañana en Málaga. La cúpula de Sumar, sin embargo, sostiene que ha actuado de forma “rápida y contundente” desde que conoció que Errejón era el aludido en la denuncia anónima de una mujer que circulaba por las redes sociales.
La líder de Más Madrid (MM), Mónica García, fue más crítica. “Todo lo que estamos conociendo en las últimas horas es horroroso y demoledor. Desgraciadamente, no hemos sabido hacer lo suficiente y no tengo palabras para expresar mi profundo pesar y mi preocupación y apoyo a todas las víctimas”, expuso en redes. El ya exdiputado creó la organización en 2019 junto a la entonces alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. Errejón fue candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid aquel mayo y tras unos meses en el puesto, en noviembre de ese año dio el salto a la política nacional y fundó Más País. Una legislatura después, tras las generales del 23-J, ese partido se ha ido integrando en Sumar. Errejón llevaba tiempo alejado de la actual dirección de MM, que sí mantiene su identidad separada de la del partido de Díaz y la formación ha presionado como ninguna otra para consumar la renuncia del portavoz, algo que también ha querido hacer ver estos días.
“Creamos un personaje con imagen a prueba de bombas. Sabíamos que el riesgo asociado era la sensación de impunidad. Comentamos cómo iba a peor los últimos años. Especulamos sobre cuándo estallaría. Nos alejamos de él. Nunca supimos cómo gestionarlo. No había forma buena de hacerlo”, comentó este viernes en X Jesús Jurado, antiguo colaborador de Errejón.
Voces críticas
En el grupo parlamentario empiezan a surgir voces que cuestionan abiertamente la deriva de Sumar. “Las responsabilidades no pueden limitarse a la dimisión de Errejón”, afirma el diputado de Sumar por Sevilla Francisco Sierra, que en la próxima reunión del grupo, que previsiblemente será el lunes por la tarde, exigirá “explicaciones detalladas” a los “responsables de haberle otorgado tanto la portavocía como el liderazgo de facto de Sumar como espacio político, una decisión tomada sin transparencia ni democracia interna por un pequeño grupo poco representativo pero que nos afecta a todos”. “Si la explicación sobre lo que sabían y lo que hicieron no es convincente, ni Yolanda Díaz ni Ernest Urtasun [portavoz de Sumar y ministro de Cultura] pueden seguir siendo las personas con las que se identifica el liderazgo del proyecto”, afirma el catedrático de Teoría de la Comunicación de la Universidad de Sevilla, que cree es “pronto” para exigir “dimisiones” y que antes hay que “escuchar”. Aunque milita en IU —y en el PCE—, Sierra recalca que no forma parte de sus órganos de dirección, que su posición es “como diputado de Sumar comprometido con un proyecto colectivo” y que de hecho fue elegido miembro de la dirección de Sumar salida de la asamblea fundacional de Villaverde en marzo pasado.
La coalición debe nombrar ahora un sustituto en la portavocía parlamentaria. Aunque el acuerdo firmado en 2023 recoge que es el partido de Díaz el que ocupará el puesto, Izquierda Unida ya ha pedido ser “copartícipe” tanto de esa decisión como de la “restructuración” del grupo. Distintas fuentes apuntan a que tras el escándalo de acoso esta debe ser ocupada por una mujer y mientras unos son partidarios de abrir el debate, otros creen que el cambio debe resolverse de forma rápida para llegar con los deberes hechos al pleno del martes. “Hay que abordar con carácter integral medidas reorganizativas del grupo parlamentario para iniciar una nueva etapa. Pero las nuevas etapas se pueden iniciar si se resuelven bien las pasadas”, advirtió este viernes Maíllo.
Este sábado a las 12.00 comparecerán ante los medios varios altos cargos de la cúpula de Sumar: dos de las cuatro coordinadoras, Lara Hernández y Elizabeth Duval; el portavoz de la formación, Ernest Urtasun; y la secretaria de feminismos, Amanda Andrades, dos días después de que el ya exportavoz parlamentario de la formación anunciara su dimisión.