El PSOE andaluz evita avivar la guerra en su comité regional a la espera de una señal de Sánchez
Espadas elude ante el máximo órgano del PSOE presentar su candidatura a la reelección
Desde hace una semana, los dirigentes socialistas llevaban advirtiendo de que el comité director del PSOE de Andalucía, el máximo órgano de decisión entre congresos, sería de “trámite”. Y así ha sido. Los 215 miembros acreditados de los 421 que lo integran (se superó el quórum exigido por los pelos) salieron igual que entraron y esperando la señal de Pedro Sánchez a favor o en contra de un cambio en el liderazgo de la federación socialista más numerosa. El secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, ha e...
Desde hace una semana, los dirigentes socialistas llevaban advirtiendo de que el comité director del PSOE de Andalucía, el máximo órgano de decisión entre congresos, sería de “trámite”. Y así ha sido. Los 215 miembros acreditados de los 421 que lo integran (se superó el quórum exigido por los pelos) salieron igual que entraron y esperando la señal de Pedro Sánchez a favor o en contra de un cambio en el liderazgo de la federación socialista más numerosa. El secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, ha evitado decir durante los 35 minutos que ha durado su intervención lo que apenas horas antes había dicho a un grupo de periodistas cuando le preguntaron si se presentaría a las primarias. “Claro que sí”, dijo enfáticamente a las dos de la tarde del pasado jueves.
A pesar del intenso debate interno que hay en el PSOE andaluz, no ha habido réplicas ni cuestionamientos por parte de los críticos, que han preferido no exhibir fricciones en el cónclave en tanto que haya señales más claras sobre la viabilidad de un candidato alternativo. Los socialistas solventaron su comité director en menos de hora y media (uno de los más breves en mucho tiempo), en el que solo ha habido una petición de palabra, la del secretario general del PSOE de Jaén, Paco Reyes, que ha ejercido de anfitrión, ya que el comité se ha celebrado en la capital jienense. Pero nadie más ha reclamado turno, cuando lo habitual es lo contrario.
Este silencio es una absoluta anormalidad en el comité director, aunque los dirigentes con los que habló este periódico lo consideraban lógico, dado que daban por hecho que todo se trataba de una pura gestión burocrática. Daban la impresión de que estaban como observadores y oyentes y a la espera de lo que tenga que pasar. A este órgano es al que le corresponde convocar formalmente el 15º Congreso Regional que se celebrará en Armilla (Granada) el 22 y 23 de febrero. Del 7 al 10 de enero se pueden presentar las precandidaturas a la secretaría general. Del 11 al 18 está prevista la recogida y presentación de avales, y el 1 de febrero, la votación, si la hubiera. A ella están convocados 40.138 militantes.
A lo más que se ha acercado Espadas a hablar de primarias ha sido al final de su larga intervención: “Esta dirección le deja paso y peso a la militancia, a la renovación de este partido para hacerlo más fuerte, con nuevas propuestas”. Nadie ha deducido de esto ni que se vaya a presentar ni que no se vaya a presentar, porque a la hora de escribir estas líneas nadie sabe lo que piensa el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre el futuro de Andalucía.
Varias fuentes socialistas aseguran que Sánchez conoce de primera mano la opinión de muchos dirigentes andaluces, no sólo las de los secretarios generales provinciales, sino otros que desde hace tiempo no ocupan la primera línea y cuya voz tiene mucho peso por su autoridad pasada y porque no juegan ya a nada. Tampoco se sabe cuándo van a llegar las noticias sobre el futuro del PSOE andaluz. Algunas fuentes aseguran que desde ya, a partir de mañana, y otras a partir del 7 de enero, una vez se pueden presentar las precandidaturas.
Los dirigentes andaluces temen que las primarias reabran la guerra en el PSOE de Andalucía y que eso además incendie la mayoría de las agrupaciones provinciales donde se vaticinan batallas muy duras para renovar liderazgos. Tampoco ha sido habitual la entrada, rodeado de cámaras en el hotel donde se ha celebrado el acto de Juan Francisco Serrano, la mano derecha del secretario de Organización, Santos Cerdán. Serrano es el nombre que con más insistencia circula para sustituir a Espadas, aunque la única persona que pondría a todo el PSOE andaluz de acuerdo se llama María Jesús Montero.
En declaraciones a varios medios locales, el también diputado al Congreso por Jaén ha dicho: “Se abre un proceso chulo de reconstrucción del PSOE, con un proyecto, y ahora a seguir trabajando. Salimos de un congreso federal que ha sido un gran congreso, con un gran proyecto para nuestro país, y vamos a salir del congreso regional con un gran proyecto regional donde van a ganar Andalucía y los andaluces”, informa Efe.
En su intervención, Espadas ha reivindicado su gestión al frente a la oposición en los 30 meses que ha durado su mandato como secretario general. Y ha repetido su intervención en el reciente debate de la comunidad frente al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno. También ha hecho una encendida defensa del Gobierno de Pedro Sánchez y ha llamado a todos los socialistas a salir en su defensa. “Estamos obligados a apoyar sin descanso a un Gobierno perseguido por la derecha que quiere tumbarlo”, ha dicho.
Pocos aplausos ha habido, salvo cuando ha salido a reivindicar la gestión socialista con las ayudas de los ERE, el apoyo al Ejecutivo central, y el minuto de silencio que han dedicado a Miguel Ángel Seda, un trabajador de la sede andaluza del PSOE. Era el guardián de la portería y el que tenía la llave de San Vicente 37.