La Generalitat planea reclasificar zonas cerca de los barrancos tras la dana mientras se abre a urbanizar en terreno inundable de la costa

Medioa Ambiente aprovecha para modificar la Ley de la huerta y “facilitar las obras de encauzamiento de ríos y ramblas”. El PSPV acusa al Consell flexibilizar los usos del suelo para construir en 1.100 hectáreas inundables en la costa

Viviendas junto al barranco del Poyo de Pîcanya, tras la dana del 29 de octubre.ÓSCAR CORRAL

La Consejería de Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana va a modificar el Plan de acción territorial sobre prevención de riesgos de inundaciones (Patricova) para reclasificar áreas situadas en las proximidades de ramblas y barrancos, con el fin de establecer nuevas prioridades a la hora de construir en zonas inundables. “Hoy mismo”, señalan, “hemos mantenido una reunión con los alcaldes afectados por la dana” para avanzarles que “se clasificarán como inundables nuevas zonas próximas a ramblas o barrancos”, según han explicado este lunes fuentes del departamento. Ante la pregunta de si esta reclasificación supondrá una limitación en las construcciones en esas áreas, las mismas fuentes señalan: “Es pronto pero la intención es reformularlo y establecer más zonas inundables, por tanto con limitaciones”. También ha anunciado la modificación de la ley de la Huerta para facilitar las obras de encauzamiento de ríos y ramblas.

Sin embargo, la Generalitat continúa con su reformas para que se puedan levantar hoteles y viviendas en 1.100 hectáreas de suelo urbanizable inundable a lo largo de la costa valenciana, según denuncia la diputada autonómica socialista y exconsejera de Medio Ambiente, María José Salvador, y adelanta eldiario.es. A su juicio, la enmienda al Plan Simplifica pactado por PP y Vox, que permite construir hoteles a 200 metros de la línea de costa, y la tramitación de los anteproyectos de la ley de Costas y de la ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje (LOTUP), que flexibilizarán los usos del suelo, es una “derogación indirecta” del Plan de acción territorial de la infraestructura verde del litoral (Pativel), medida impulsada por el anterior gobierno autonómico. La Generalitat asegura que no se tocará este plan, si bien las reformas siguen en marcha.

Salvador indica que el Pativel, que fue validado por una sentencia del Tribunal Supremo en 2022, protegía “7.500 hectáreas en total, de las que 2.561 estaban sobre zona inundable”. De esa cantidad, 1.137 hectáreas fueron desclasificadas y ya no eran urbanizables: 297 en la provincia de Castellón, 477 en la de Valencia y 363 en la de Alicante. Sin embargo, con las modificaciones urbanísticas planeadas por el Consell actual, “esos suelos quedan desprotegidos”, sostiene “y por tanto se abre la puerta a la construcción en ellos de establecimientos hoteleros y cualquier otro tipo de edificios, incluidos los de viviendas”. Es pronto pero la intención es reformularlo y establecer más zonas inundables, por tanto con limitaciones

Salvador incide en que “la misma mañana del 29 de octubre”, día en el que se desencadenó la dana que arrasó Valencia, “PP y Vox estaban pactando una enmienda al plan Simplifica”, que, en principio, “permitía el uso terciario hotelero en terrenos situados a 100 metros de la línea de costa”. La formación de ultraderecha apostaba por alejar esa flexibilización “a los 400 metros, que finalmente se quedaron en 200″, dice la exconsejera, en los que no se especifica ningún tipo de dimensión, tal como sí establecía el Pativel. Por otro lado, continúa, “en la tramitación del anteproyecto de la ley de Costas, se establece un marco jurídico laxo sobre los usos del litoral”, al que se pretende dar “un uso flexible dependiente de la colaboración de los ayuntamientos”. Finalmente, el anteproyecto de la LOTUP “se permite que en la planificación urbanística se dé voz a los promotores privados”.

Todo junto, argumenta Salvador, se convierte en “una vuelta del modelo urbanístico del PP de permitir construir en cualquier sitio”. Y además, “sin control, sin racionalizar los usos del suelo y sin tener en cuenta la seguridad de las personas”. En su opinión, “después de lo que ha pasado”, en referencia a las inundaciones del 29 de octubre, “no es momento de retroceder en la protección del suelo, sino de ir más allá” y “no asumir decisiones que van en contra del avance del cambio climático”.

Lo que pretende el gabinete que preside el consejero de medio Ambiente, Vicente Martínez Mus es, aseguran, “establecer una normativa sin preceptos fijos, sino que recoja nuevas prioridades” para evitar la construcción en zonas de potencial alto riesgo. Una nueva cartografía “permitirá delimitar las zonas que han sufrido inundaciones y la altura de calado de cada una de ellas”, para “visualizar el territorio afectado y la magnitud de las inundaciones”, sufridas en el temporal de hace un mes.

Además, la Generalitat ha incidido este en que trabaja en la revisión del Plan de Acción Territorial de carácter sectorial sobre prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat Valenciana (Patricova) y en la modificación de la Ley de la Huerta con el objetivo de facilitar todas aquellas obras necesarias para desbloquear los proyectos de actuación sobre el encauzamiento de ríos y barrancos. Desde la Generalitat han indicado que se lleva trabajando meses en la modificación de la Ley de la Huerta que ahora se acelera “porque se ha demostrado que hasta ahora ha sido una norma que ha supuesto un freno a la puesta en marcha de estas actuaciones por su afección a zonas de huerta”.

Alcaldes reunidos

Así lo han trasladado el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, y el conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, durante una reunión con alcaldes y concejales de los ayuntamientos de Aldaia, Riba-roja, Loriguilla, Quart de Poblet, Xirivella, Alaquàs y Cheste.

En un nota informativa, los alcaldes, alcaldesas y miembros de los gobiernos locales de Aldaia (Guillermo Luján), Alaquàs (Toni Saura), Xirivella (Paqui Bartual), Quart de Poblet (Cristina Mora), Riba-roja (Robert Raga), Loriguilla (Montserrat Cervera) y Xest (José Morell) “siguen dando pasos, en común, para que se atienda la imperiosa necesidad del desvío del Barranco Pozalet-Saleta, que discurre por estas poblaciones. Tras la primera reunión celebrada hace unas semanas en Riba-roja, con el objetivo de crear esta alianza municipal y visibilizar este barranco que también ha sufrido la devastadora dana del 29-0, reclaman – de manera unánime- la urgencia de la tan aclamada canalización. En dicho encuentro acordaron solicitar sendas reuniones, con el Consell y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).

La primera cita ha tenido lugar esta misma mañana, el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Mus y su homólogo el conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, han recibido a los representantes municipales, que han asistido acompañados de sus técnicos, “tiene mucho que decir sobre el desvío del barranco que venimos reclamando desde hace años”, han defendido.

Transcurrido un mes desde la catástrofe, los ediles piden que se atienda “la urgencia y la emergencia”, todas las localidades representadas han sufrido “el tsunami”, sobre el que también quieren información, “no sabemos qué pasó”. El siguiente paso será trasladar esta misma petición a la CHJ, “dado que esta mañana ha imperado la filosofía de ir todos juntos, de la mano, la Generalitat se sumará a esta segunda y necesaria reunión para la ejecución del desvio del Pozalet-Saleta”, indica la nota de prensa.

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