Los andaluces votan con un pie en la playa y un ojo en las urnas
Las costas se llenan en la jornada de votación, en la que ha habido atascos en las principales vías de salida de Sevilla y Málaga
Aunque la bajada de las temperaturas ha dejado este domingo en calma chicha lo que durante toda la semana era una ola de calor, la incertidumbre por conocer si la brisa del mar ha ejercido de efecto disuasorio en el votante ha recorrido los colegios electorales de Andalucía durante todo el día de votaciones. Si se puede tomar como un síntoma la caravana de coches que antes del mediodía y por la tarde había en ambos sentidos de la A-49 ―la que u...
Aunque la bajada de las temperaturas ha dejado este domingo en calma chicha lo que durante toda la semana era una ola de calor, la incertidumbre por conocer si la brisa del mar ha ejercido de efecto disuasorio en el votante ha recorrido los colegios electorales de Andalucía durante todo el día de votaciones. Si se puede tomar como un síntoma la caravana de coches que antes del mediodía y por la tarde había en ambos sentidos de la A-49 ―la que une Sevilla con Matalascañas y otros lugares de costa onubense a donde los sevillanos suelen escaparse del calor―, se podría concluir que los andaluces se han levantado con un ojo puesto en las urnas y otro en las playas. No obstante, un 44,52% de los votantes andaluces ha depositado su voto para las elecciones andaluzas hasta las seis de la tarde de este domingo, según ha informado la Junta de Andalucía.
Para los granadinos y los sevillanos, además, este es el final de un puente, ya que en sus respectivas capitales tuvieron fiesta oficial el jueves, con la celebración del Corpus. En Granada, muchas familias han hecho justo lo contrario que reclamó el candidato a la reelección del PP, Juan Manuel Moreno, cuando apeló a los andaluces a que primero votaran y luego se fueran a la playa para evitar que posibles atascos de vuelta les impidieran llegar a tiempo a su colegio electoral.
En la playa de Salobreña, el pueblo electoral de la cabeza de lista por Vox, Macarena Olona, a primera hora de la mañana, Carlos Cano (28 años), Paola Martín (26) y María Martín (25) acaban de tumbarse en la arena. Los tres aseguran que su plan es pasar parte del día frente al mar y después acudir a las urnas. Cano pretende irse camino de Málaga después de la siesta, para votar a última hora. María Martín dice que lo hará antes de comer, y Paola Martín aún no sabe la hora exacta.
Como Cano, muchos de los bañistas de Salobreña también van a aguantar al sol hasta después de comer. Alfonso, de 49 años, ha llegado con su familia desde Jaén para pasar el fin de semana, y calcula que estará de vuelta sobre las siete, con tiempo suficiente para ducharse e ir a votar.
Álvaro y Marisa no han querido apurar tanto. “Decidimos volvernos ayer de Isla Antilla [Huelva] para evitarnos atascos y porque iban a bajar las temperaturas y con tanto fresquito no se está tan bien en la playa”, explica este matrimonio sevillano que al filo de las doce acudía a votar al colegio Nuestra Señora de los Reyes, en el centro de la capital andaluza.
Las chanclas, las sombrillas y las sillas de playa se mezclan con las papeletas electorales en Málaga y Cádiz. En el colegio público Gibraljaire, en el barrio obrero malagueño de Miraflores de los Ángeles —feudo tradicional del PSOE—, aguardaba una treintena de personas a las nueve de la mañana a la apertura de las puertas del centro escolar.
“Yo no recuerdo unas elecciones con tanta gente esperando para entrar a votar”, confiesa Sonsoles, una vecina, “pero es que con el calor que hará hoy, pues muchos han preferido madrugar”. Macarena ha acudido con el bolso de la playa colgado del brazo y la toalla asomando. “Mira, yo llevo aquí el bronceador, el abanico, las gafas de sol y la papeleta ya preparada… que no quería perder tiempo”, ha relatado esta malagueña lista, dice, para disfrutar del mar y “del chiringuito en Pedregalejo, que lo necesito para descansar”.
Las playas de Málaga capital presentan este domingo “un lleno casi total” han explicado algunos de los socorristas que velan por la seguridad en La Malagueta. “Yo iré a votar cuanto termine aquí de trabajar a las cinco de la tarde”, ha afirmado Juanjo, socorrista en este punto del litoral de la Costa del Sol. Esta jornada, además, muchos comercios, sobre todo supermercados, están abiertos, al menos, hasta las tres de la tarde. “Si me da tiempo iré a votar, y si no, pues nada, porque la verdad, tampoco tengo muchas ganas”, ha explicado una cajera que atiende a los clientes que hacen cola con las compras del domingo.
El ambiente en el centro histórico de Málaga a media mañana ha sido de mucho movimiento de turistas recorriendo las calles y ajenos a la jornada electoral que se vive en Andalucía. Las terrazas de bares y cafeterías estaban copadas de ingleses, alemanes y franceses. “No sabía que hoy se votaba aquí; yo estoy disfrutando del sol, de estas calles y de la comida tan maravillosa que tenéis”, explica George, un turista norteamericano. En la capital gaditana, los extranjeros se han topado con votantes, el desfile del Corpus y hasta chirigotas que apuran los últimos coletazos del Carnaval. Y es que Cádiz ha acudido a las urnas con la incertidumbre de si tantas actividades de ocio, a las que hay que sumar el día de playa, restarían afluencia al voto.
“Supongo que el que está concienciado al final tiene claro ir a votar”, ha asegurado Vicente Quiño, después de recoger a su hija Sofía, vestida de primera comunión, tras participar de la procesión del Corpus Christi. Entre tanto acto, Verónica Chouza se quedó finalmente con un día de playa en La Caleta. Antes de intentar tomar el sol en un día encapotado, se ha acercado hasta el colegio Santa Teresa con su hija Verónica para votar. “Desde que nació, la traigo para que sepa lo que es”, explica. José del Pino, sombrilla y sillas de playa al ristre, también tiene sus dudas del resultado. “Pienso que va a haber bastante gente que no vaya a votar”, ha explicado poco antes de internarse en la playa de La Caleta por su arco más emblemático.
A pocos metros de allí, junto a las escalinatas de Correos, que hoy ejerce como colegio electoral, la chirigota callejera Los Capitán Andalucía, vestidos de superhéroes de la Junta de Andalucía, han optado por cantar un repertorio en el que han dado un repaso al presidente de la comunidad o a la candidata de Vox, Macarena Olona. “Señores, en el día de las elecciones cantamos un pasodoble”, ha advertido uno de los integrantes, vestidos con el logo de la Junta nuevo y una montera de torero, ante un público heterogéneo de gaditanos y turistas. “Qué pena que te prostituyan los gobernantes”, pero la libertad “resiste hasta el final en manos del pueblo”, han cantado, mientras en otra esquina de la plaza de Abastos comenzaban a resonar los acordes de otra agrupación callejera.
Y como en toda jornada electoral, las monjas también han protagonizado las imágenes más curiosas de Jaén. Las hermanas clarisas han acudido a votar muy temprano al colegio de la Capilla de San Andrés, rompiendo así la clausura a la que está sometida esa congregación. En ese colegio electoral, el presidente ha tenido que trasladar la urna hasta la entrada del edificio ante la imposibilidad de varios ancianos de acceder a la mesa electoral por las barreras arquitectónicas de ese inmueble del casco histórico de Jaén. Por lo demás, y como en el caso de Cádiz o del barrio sevillano de Triana, la jornada electoral coincide con las procesiones del Corpus en la mayor parte de municipios.
Sanlúcar de Barrameda y sus colegios ‘insumisos’
Más allá de las dudas sobre si quedarse en la playa o ir a votar, la jornada electoral ha arrancado sin incidentes, aparte del retraso en la constitución de cuatro mesas electorales en tres colegios de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), al no presentarse sus miembros. Uno de ellos es el CEIP Guadalquivir. Aquí han faltado todos los seis miembros de dos de las cuatro mesas y todos los respectivos suplentes. En este centro de votación sí ha habido problemas. Ante la actitud bronca de los votantes que no querían quedarse en la mesa como sustitutos, los agentes de la policía les han requerido la documentación, aunque se han marchado igualmente. Otros han salido corriendo directamente al ver que faltaba gente. “Aquí no viene la gente porque no le da la gana”, cuentan en el colegio. Se da la circunstancia de que, en 2018, en este centro también hubo varias ausencias y, como hoy, y ante la negativa de los votantes a permanecer en la mesa, tuvo que venir e intervenir un agente judicial. Hoy los policías estaban prevenidos por si acaso y no ha sido necesario llamar a la autoridad judicial. Las dos mesas que faltaban han abierto 45 minutos más tarde. Según explican en el colegio, este es un barrio de “gente pudiente” donde suele ganar la derecha en las autonómicas, como confirman los datos de la Junta.
Más allá de la accidentada apertura de los colegios sanluqueños, a media mañana una votante ha interpuesto una denuncia contra un vocal de un colegio electoral de Torremolinos (Málaga) alegando que al ir a meter su papeleta había comentado: “¿De qué tribu vendrá esta?”.
Un 44,52% de los votantes andaluces ha depositado su voto para las elecciones andaluzas hasta las seis de la tarde de este domingo, según ha informado la Junta de Andalucía. El porcentaje supone una bajada de 1,95 puntos con respecto a los anteriores comicios, en diciembre de 2018 (46,47%). El de las seis es el último dato de participación que se ofrece antes del cierre de las urnas, a las ocho de la tarde.
Por provincias, Córdoba es donde más porcentaje de votantes había acudido a los colegios electorales hasta las seis (un 48,49%, 0,40 puntos menos que a la misma hora en 2018), seguida de Jaén (47,22%, 0,71 puntos menos), Sevilla (46,78%, 1,27 puntos menos), Granada (44,48%, 4,04 menos), Málaga (43,59%, 2,05 menos), Almería (41,78%, 4,17 menos), Cádiz (41,37%, 1,55 puntos menos) y, finalmente, Huelva (39,9%, 2,72 puntos menos).
La participación en las elecciones de 2018 fue del 58,65%, una de las más bajas en unas elecciones autonómicas en Andalucía, ya que solo acudieron a las urnas 3,6 millones de personas. Aquellos comicios fueron ganados por el PSOE, con 33 escaños, pero el pacto de Gobierno del PP (26 sillones) y Ciudadanos (21), con el apoyo parlamentario de los ultras de Vox (12), llevó a Juan Manuel Moreno Bonilla a la presidencia de la Junta, pese a no ser el candidato del partido más votado. El calor extremo de este fin de semana, las fiestas en numerosas localidades y el atractivo de las playas ha hecho temer a los responsables de la Junta una nueva bajada de la participación este domingo.