Ni calor ni vacaciones: los barrios obreros de Madrid salen a votar y el PSOE recupera cuatro distritos
La movilización de la izquierda hace que en Usera, Puente de Vallecas, Villaverde y Villa de Vallecas no haya ganado el PP, al contrario que en las municipales de mayo
Cuatro distritos obreros del sur de Madrid han dado un golpe encima de la mesa este domingo. Los barrios pobres, marginados, con tasas de desempleo por encima de la media, fuerte presencia de población inmigrante arraigada en estos rincones de la capital, donde la renta media anual es cuatro veces menor que la de los más ricos de la capital, han salido a votar y el mapa madrileño no se ha teñido completamente de azul, como sí lo hizo hace dos meses, en las elecciones municipal...
Cuatro distritos obreros del sur de Madrid han dado un golpe encima de la mesa este domingo. Los barrios pobres, marginados, con tasas de desempleo por encima de la media, fuerte presencia de población inmigrante arraigada en estos rincones de la capital, donde la renta media anual es cuatro veces menor que la de los más ricos de la capital, han salido a votar y el mapa madrileño no se ha teñido completamente de azul, como sí lo hizo hace dos meses, en las elecciones municipales. Ni el calor, ni las vacaciones: la movilización de la izquierda en estas zonas —con alguna tasa de participación propia de las zonas acomodadas, por encima del 70%— ha arrebatado al PP de Alberto Núñez Feijóo cuatro distritos. Usera, Puente de Vallecas, Villaverde y Villa de Vallecas se han pintado de rojo.
El aumento de la participación en estos distritos ha sido clave. En los anteriores comicios, la mayoría (excepto Villa de Vallecas) contaban con cifras que apenas llegaban al 60%. Pese a ser rincones donde los gobiernos municipales mantienen fuertes deudas políticas, pues siguen siendo históricamente distritos con altas tasas de pobreza, marginalidad, desempleo, delincuencia, falta de acceso a una vivienda digna, desconexión entre barrios y mala comunicación con el resto de la capital, muchos de estos electores se quedaron en casa el día de las elecciones. El mapa de la capital en las municipales, como el del voto autonómico, se volcó con la candidatura de José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, y con la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, los dos del PP. Pero este domingo algo ha cambiado.
En Usera, uno de los distritos más pobres de Madrid, hace dos meses votó el 58,9% del censo, pero este 23 de julio lo ha hecho un 64%. En Puente de Vallecas ha subido cinco puntos la participación (64% frente al 59,5); en Villaverde, otros cinco (hasta 66% en estos comicios) y en Villa de Vallecas, han pasado de 66,7% en mayo al 71% este domingo. Las zonas marginadas de Madrid han salido a votar y gracias a eso la izquierda ha recuperado bastiones que hace años consideraba sagrados.
En estas zonas el PSOE ha rozado el 40% y lo ha llegado a superar en Puente de Vallecas. Si se suma el bloque de izquierda, en este distrito PSOE y Sumar han superado en más de 30 puntos a PP y Vox. En Usera, las dos formaciones progresistas han alcanzado el 57% de los votos, en Villa de Vallecas, el 54,4% y en Villaverde el 57,4. Unos resultados que ya hubiera soñado la izquierda hace solo unas semanas, cuando los conservadores se impusieron con claridad en estos distritos, siendo la fuerza más votada.
La izquierda gana en nueve distritos
El bloque de izquierdas, PSOE y Sumar, ha ganado además nueve de los 21 distritos de Madrid y en algunos, como Moratalaz, ha quedado casi en empate (49,3% de la izquierda frente al 49,4% de la derecha). Aunque solo el PSOE ha conseguido imponerse como fuerza más votada en estos cuatro distritos, la suma de los votos cosechados por los dos partidos muestra un mapa más complejo y que matiza la fuerza de la derecha en la capital. La izquierda ha ganado también en Centro, Carabanchel, Vicálvaro, Arganzuela y Latina. También en estos distritos la tasa de participación se ha disparado de tres a seis puntos porcentuales.
Hace solo dos meses, en estos mismos rincones de Madrid se imponía el PP con contundencia. Almeida celebraba haber “tomado” Vallecas, históricamente controlado por la izquierda, con un apoyo del 26,5% de los votos. En Usera, los populares vencieron con más del 32%, frente al 25,6 de Más Madrid. En Villa de Vallecas, el alcalde obtuvo más de un 33,4% y en Villaverde, el PSOE solo podía optar al segundo puesto, pues los conservadores le habían arrebatado otro feudo más con casi un 32%.
Este domingo no solo no se han cumplido los pronósticos de la derecha sobre participación en toda España, sino que frente a la tasa de 66,2% de las últimas generales en noviembre de 2019, se ha superado en cuatro puntos este domingo hasta el 70,3%. El calor de julio y las vacaciones, dos de las causas fundamentales que esgrimían las fuerzas conservadoras, PP y Vox, para alegar un desplome en la convocatoria, no ha resentido la movilización tampoco en estas zonas obreras, donde para muchos vecinos la playa y el aire acondicionado les quedan muy lejos.
Feijóo pierde contra Ayuso en Madrid
En el resto de Madrid, la presencia conservadora se mantuvo. Aunque el Partido Popular ha revalidado solo en parte el dominio que logró en las últimas municipales, con casi un 60% de los votos en Chamartín y Salamanca. Excepto los cuatro distritos del sur, ha sido la fuerza más votada en todos los demás. Sumar obtuvo su mejor resultado en el centro de la ciudad, un 31%; mientras que Vox tocó techo con el 15% alcanzado en el barrio de Salamanca.
El PP venció cómodamente en el norte (Chamartín, Fuencarral-El Pardo, Hortaleza, Ciudad Lineal, Salamanca, Tetuán, Chamberí o Moncloa-Aravaca) y de manera mucho más ajustada en otros como Carabanchel, Latina, Vicálvaro, Moratalaz, San Blas-Canillejas o Centro. En todos bajó en número de votos, salvo en Chamberí, donde creció ligeramente.
Los partidos de izquierda sumaron más votos que el 28-M: 87.500 más. El PSOE ganó en los citados Puente de Vallecas, Usera Villa de Vallecas y Villaverde, mientras que fue el segundo partido más votado en el resto salvo en Centro, donde Sumar le arrebató esa plaza, dejándolo tercero.
Alberto Núñez Feijóo cosechó este domingo 15 de los 37 escaños que reparte Madrid, con el 99% del voto escrutado, por encima de los 11 que obtuvo Pedro Sánchez, una victoria previsible para los populares en uno de sus mayores feudos en España. Sin embargo, el resultado es menor a los 17 diputados que esperaba conseguir Génova. Los datos de Feijóo han sido mucho peores que los de su compañera Ayuso, al recibir un 40,4% de los votos, por debajo del 47,3% que consiguió la presidenta madrileña el 28-M. El domingo por la noche, los simpatizantes del partido en Génova llegaron a interrumpir el discurso de su líder para corear a Ayuso.
Sumar superó a Vox en la pugna por la tercera plaza, al recibir seis escaños frente a cinco gracias en parte al desplome de los ultras. El resultado muestra el mejor desempeño de la coalición de Yolanda Díaz en el ámbito urbano frente a los de Santiago Abascal, que resistieron mejor en la España vaciada. Con todo, Sumar consiguió menos porcentaje de voto (15%) que el recibido en conjunto por Más Madrid y Unidas Podemos el 28-M (que sumaron un 27%). En mayo, la candidata de Más Madrid, Mónica García, consiguió quedar por encima del socialista Juan Lobato. Pero ahora, el PSOE, gracias a la movilización de la izquierda, vuelve a ser la fuerza más votada.