Terremoto en la izquierda de Madrid tras la salida de Mónica García al Ministerio de Sanidad

El terremoto que supone la salida de Mónica García hacia el Ministerio de Sanidad en la política madrileña queda retratado este lunes sin ningún pudor por Juan Lobato, el líder de los socialistas en la región: “Ninguno somos tontos. Se abre un tiempo nuevo. Se reconfiguran espacios. Este paso supone un cambio de dinámica”. Porque la salida de la líder de la oposición al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso es una oportunidad para el PSOE, un reto para Más Madrid y un motivo de alegría para el PP. Todo un antes y un después que enfrenta a Manuela Bergerot (Argentina, 1976), sustituta de García como portavoz regional de Más Madrid, con un desafío mayúsculo. Primero, debe reorganizar un grupo parlamentario que pierde a sus referentes: el diputado Javier Padilla acompañará a García en el ministerio como secretario de Estado. En paralelo, tiene que asentar y expandir un partido casi recién nacido, pues también es su secretaria de organización, salvo que renuncie. Y, finalmente, aspira a convencer a quienes hubieran preferido un liderazgo alternativo.

Solo 5.453 votos separaron a Más Madrid del PSOE en las elecciones autonómicas de mayo. Ese exiguo margen le dio al partido verde el liderazgo de la oposición, con todos los privilegios ornamentales y mediáticos que conlleva. La posibilidad de presentarse ante los electores como la formación de referencia en el sector progresista vuelve a ponerse ahora en juego con la salida de García. Si en Más Madrid son todo incógnitas (¿volverá la nueva ministra como candidata en 2027? ¿Servirá el ministerio para visibilizar el proyecto madrileño? ¿Ocupará su vacío Bergerot?), en el PSOE no hay dudas. Es la gran oportunidad de Lobato. Ahora o nunca.

“A nosotros nos da más foco”, argumenta un veterano socialista con muchos trienios de política madrileña a sus espaldas. “Ahora el tema económico va a ser más central que el sanitario, que promocionó a Mónica durante la pandemia”, añade sobre las especialidades de los dos políticos, que son técnico de Hacienda del Estado y anestesista, respectivamente.

La posibilidad de que la configuración del Gobierno central generara una oportunidad para el PSOE de Madrid llevaba semanas sobre las mesas de los principales despachos socialistas. El equipo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compartió con el entorno de Lobato el análisis de la conveniencia (o no) del ascenso de García al ministerio, según detalla un segundo interlocutor del PSOE. Las dos partes coincidieron en que la salida de la portavoz de Más Madrid beneficiaría a Lobato en sus aspiraciones regionales. Y no solo porque el secretario regional dejará de competir por los focos con una portavoz experimentada, para pasar a hacerlo con una recién llegada al puesto como Bergerot. También porque la salida de García afectará a Ayuso, según creen los socialistas.

“Mónica es la que ha hecho crecer a Díaz Ayuso”, opinan en el PSOE de Madrid, donde están convencidos de que la líder del PP ha confrontado con la de Más Madrid porque su estrategia era la de crear una némesis capaz de movilizar a los votantes conservadores. “Sin Mónica”, aventuran, “Ayuso pierde mucho potencial”.

También lo pierde Más Madrid. Este partido no es una balsa de aceite perfecta. En junio, Pablo Gómez Perpinyà, fundador de la organización, mano derecha de Íñigo Errejón, y en su día el portavoz parlamentario que le dio la alternativa a García en la Asamblea, dimitió de todos sus cargos al saber que la líder había decidido que no repitiera como senador por designación autonómica. El congreso interno celebrado esta semana ya había colocado a la organización en un momento de “transición”, según una fuente conocedora de las interioridades del partido, que, ahora, vivirá “un gran reto”: sustituir a García.

“Con las dificultades que hay, creo que Manuela [Bergerot] es una muy buena opción”, dice este interlocutor. “No para sustituir a Mónica, porque eso no toca, ya que Mónica va a estar muy presente en Madrid, sigue liderando el partido y su ministerio tiene mucha incidencia en Madrid... pero sí para liderar el nuevo momento, que seguramente será más coral”, explica. “Nacimos [en 2019] con dos liderazgos muy marcados [Manuela Carmena e Íñigo Errejón] que salieron al poco de las elecciones; aquel vacío sí que era complicado y seguimos subiendo y subiendo”, añade.

Una tesis que ha defendido este lunes Bergerot en una rueda de prensa en la Asamblea regional.

“Vamos a demostrar que somos la alternativa para la Comunidad”, ha afirmado la nueva portavoz de Más Madrid, nacida en Argentina en 1978 y llegada a España dos años después junto a sus padres, refugiados políticos. “Somos una fuerza que no para de crecer, consolidada, que ha quintuplicado el número de concejales”, ha recordado Bergerot, diplomada en Biblioteconomía, Archivística y Documentación y graduada en Información y Documentación por la Universidad Complutense de Madrid. “Un partido que ahora tiene una ministra al frente de la principal preocupación de los madrileños [la sanidad]”, ha rematado la dirigente, que entró en política con Podemos, ha liderado las negociaciones para los gobiernos municipales y la integración en Sumar, y que ha avanzado que Más Madrid mantendrá con ella el tono beligerante de García frente a Ayuso. Algo que se vio ya en su intervención del pleno del pasado jueves, tras la que el número dos de la líder conservadora, Alfonso Serrano, le mostró un cartel con un número tres, calificando su discurso en el contexto de la carrera abierta en Más Madrid para sustituir a la portavoz saliente.

Porque los enfrentamientos entre las dos líderes han sido constantes. Por la política sanitaria. Por la fiscal. Por la polémica comisión que cobró el hermano de Díaz Ayuso de una empresa que había contratado con la Comunidad. Por todo. Y quizás por eso la baronesa y su equipo llevan semanas celebrando por adelantado la salida de García, que intentan vender como un éxito personal de Díaz Ayuso.

“No ha resistido el cuerpo a cuerpo con la presidenta”, ha afirmado este lunes Carlos Díaz-Pache, el portavoz del PP en la Asamblea.

Una línea argumental parecida a la de Alfonso Serrano, el número dos de Díaz Ayuso, que ha hecho la lista de todos los portavoces de la oposición de izquierdas que han dejado la Cámara desde que la baronesa llegó al poder, en agosto de 2019: Pablo Iglesias, Isa Serra y Alejandra Jacinto en Podemos; Íñigo Errejón y Mónica García en Más Madrid; y Ángel Gabilondo en el PSOE. Son seis bajas en cinco años. El reflejo de lo que desgasta hacer política desde la izquierda en Madrid, donde el PP gobierna de forma continuada desde hace más de un cuarto de siglo, y donde Díaz Ayuso goza ahora de mayoría absoluta.

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