El cumpleños más amargo de Miguel Bosé

Miguel Bosé mide como nadie sus pasos en público. En él nada es casual. Ni una foto en Instagram lo es. Blinda su vida al margen de los escenarios como nadie. Una prueba de ello es que durante 26 años no hizo una referencia a su pareja Nacho Palau, con quien crió a sus cuatro hijos, dos biológicos de cada uno. Pero desde que hace 12 días falleció su madre, Lucia Bosé, muestra sus emociones en las redes sociales a modo...

Miguel Bosé mide como nadie sus pasos en público. En él nada es casual. Ni una foto en Instagram lo es. Blinda su vida al margen de los escenarios como nadie. Una prueba de ello es que durante 26 años no hizo una referencia a su pareja Nacho Palau, con quien crió a sus cuatro hijos, dos biológicos de cada uno. Pero desde que hace 12 días falleció su madre, Lucia Bosé, muestra sus emociones en las redes sociales a modo de reconocimiento a la actriz. En medio de este duelo, el cantante cumple este viernes 64 años. Lo hace en México, donde lleva instalado cerca de dos años y donde recibió la noticia de su orfandad.

Marzo será para Miguel Bosé un mes para el olvido. Los que han sido los pilares personales de su vida se han tambaleado. Por un lado, la muerte de su madre, una mujer que a los 89 años mantenía un espíritu jovial y unas ganas de vivir encomiables y con quien mantenía ahora una fluida relación tras tiempos de desencuentros que llegaron a durar nueve años. Pero de ese momento ya nadie quiere hablar en la familia porque en el fondo el cantante y la actriz nunca dejaron de adorarse, aunque su carácter les pusiera en ocasiones en el disparadero.

Ninguno de sus tres hijos temía por la vida de su madre, a quien veían mayor pero con una salud controlada, hasta que una neumonía repetitiva acabó con ella. Solo Paola estaba con ella cuando sucedió todo. En tiempos de coronavirus no hay despedidas. Paola y Lucía la recuerdan desde el campo valenciano y Miguel desde México. Desde el día en que falleció es habitual que el cantante publique mensajes dedicados a su madre. El último incluye también a su padre, Luis Miguel Dominguín. Se trata de una foto de ambos con Picasso y la esposa de este con el texto: “Y así era el azul del Lucia de esos años. ¡Grandes!”.

Días antes usaba de nuevo sus redes para apoyar la iniciativa de sus clubes de fans de confeccionar mascarillas contra el coronavirus de color azul, el que definía a su madre. “Todos unidos en un solo color”, decía a la vez que lanzaba la etiqueta “AzulDeLucia”. Todos estos homenajes han sido agradecidos por el cantante. “A tod@s los que con tanto cariño y respeto habéis tenido tan bellas palabras para mi madre, quiero agradecéroslo. Se dicen y escriben cosas muy emocionantes. Os quiero mucho”.

En el negro mes de marzo de Miguel Bosé había otra fecha marcada en el calendario. Un día después de la muerte de su madre estaba convocado en un juzgado de Madrid, el que dirime la demanda presentada por Nacho Palau, primero para establecer la filiación de los hijos que han criado en común hasta su separación y más tarde para resolver asuntos pendientes entre ellos. La aparición de la pandemia aplazó la cita pero no acabó con las diferencias de la que fue un día pareja. Bosé cura sus penas en México y Palau vive con las suyas en Chelv. Cada uno con sus hijos, todos ellos considerados como nietos por Lucia Bosé.