Un ‘podcast’ para entender la historia del diseño en cuatro horas

Ha entrevistado a más de 200 personas, pero en los casi 30 años que lleva publicando en El País Semanal Anatxu Zabalbeascoa (Barcelona, 56 años) jamás se había enfrentado a la radio. O a un podcast, que fue lo que en enero le propusieron la directora de Prisa Audio, María Jesús Espinosa de los Monteros, y Eugenio Viñas, director de formatos en la misma empresa, de cara a ...

Ha entrevistado a más de 200 personas, pero en los casi 30 años que lleva publicando en El País Semanal Anatxu Zabalbeascoa (Barcelona, 56 años) jamás se había enfrentado a la radio. O a un podcast, que fue lo que en enero le propusieron la directora de Prisa Audio, María Jesús Espinosa de los Monteros, y Eugenio Viñas, director de formatos en la misma empresa, de cara a la capitalidad mundial del diseño que Valencia ostenta en 2022. “Maneras de hacer diseño hay muchas, pero es que un podcast te acompaña, está contigo, te lo puedes llevar a cualquier sitio, volver a él cuando quieras y, aunque me tire piedras sobre mi tejado, ni siquiera tienes que hacer el esfuerzo de leerlo”. Lo comentaba Zabalbeascoa el pasado 19 de septiembre en el Ágora València, allí donde ocurren la mayoría de eventos de la capitalidad, el mismo día en que se presentó el primer episodio de La Gran D, que es como se titula este podcast de ocho capítulos de media hora cada uno, disponibles a partir de cada lunes.

Los dos primeros ya se han estrenado y denotan la falta que hacía que alguien tratase este tema de esta manera: alguien especializado, no un señor sentado en una silla de gamer, que hablara en castellano de diseño y no solo para estudiantes y profesionales del sector. La Gran D está pensado para que nadie se pierda en el discurso ni se encuentren con una sucesión de banalidades, de acuerdo con Zabalbeascoa: “La idea es que, en tan solo cuatro horas, tú puedas tener claro en la cabeza lo que es el diseño”.

Diseño no es solo una silla cuyo precio alcanza los cuatro dígitos, o la remodelación de un edificio histórico, sino un protocolo de emergencia, los parquímetros, el sistema administrativo que gestiona online las multas de tráfico, una aplicación de sexo y citas. “Son respiradores, un tenedor o la manera de distribuir a la gente que viaja en un tren. Todo eso son decisiones de diseño”, defiende Zabalbeascoa. También dice que los ocho episodios no se ordenan cronológicamente: lo que el equipo y ella han planteado es una historia del diseño, una con un enfoque propio no limitado al ámbito español. Aquí se deja ver que los términos opuestos, las cosas que se definen por oposición como lo clásico y lo moderno, la forma y la función, la artesanía y la industria, lejos de ser contradictorios acaban complementándose, y es la trayectoria del mismo diseño la que se lo va explicando al oyente.

Lo hace con declaraciones de la comisaria de diseño y arquitectura del MoMA de Nueva York, Paola Antonelli. O con las de Miguel Milá, Philippe Starck, Antoni Arola y el escritor Deyan Sudjic –actual director del Design Museum de Londres–, aparte de referentes de Valencia entre los que se encuentran Javier Mariscal, el arquitecto Juli Capella e Inma Bermúdez, a la que se le ha otorgado esta semana el Premio Nacional de Diseño del 2022. Para quien necesite revisar el decálogo del milanés Bruno Munari, en La Gran D está junto al del alemán Dieter Rams, autor de los electrodomésticos más emblemáticos de Braun. Hay incluso un episodio que subraya que un mismo objeto puede figurar en varios sitios a la vez. Así lo defiende su presentadora: “Hay tanto prejuicio en pensar que el buen diseño no está en el supermercado como en pensar que una cosa del día a día no puede entrar en el museo. El prejuicio es el mismo, y no beneficia a nadie”.

A las mujeres, las grandes olvidadas en este sector, Zabalbeascoa les ha dedicado otra media hora de la mano de Lola Castelló, pionera en el diseño patrio, citando ejemplos como el de Aino, la pareja de Alvar Aalto: “En 1937, en su pabellón finlandés para la Exposición de París Aino quedó fuera del catálogo, no aparecía en ninguno de los créditos pese a ser su socia, arquitecta mucho antes que él y la directora de Artek, la empresa que fabrica los muebles de Aalto. Y lo mismo le pasó a la mujer de Charles Eames, Ray Eames, o a la diseñadora y arquitecta irlandesa Eileen Gray, que no solo Le Corbusier se apoderó de su casa más famosa –la Villa E-1027–, sino que a ella le cambiaron la sexualidad”, recuerda la periodista. “Decidieron hacerla bi, y hoy en día figura como una diseñadora lesbiana. ¿Que su sexualidad importa? Importa muy poco, e importa mucho cuando se convierte en algo que sirve para negar un avance más de la sociedad”.

Anécdotas y curiosidades tampoco faltan en La Gran D, muchas de ellas históricas y contadas por el diseñador Nacho Lavernia. Nada más empezar el primer episodio él ya menciona por qué el reloj de bolsillo pasó a ser de muñeca o cuál fue la marca responsable de quitarle la batería de la batidora al vaso de plástico para añadírsela al propio utensilio. Son cambios que en este podcast describen como tipológicos, que es lo mismo que en una entrevista de Zabalbeascoa en 2015 la diseñadora Patricia Urquiola –otra de las participantes de La Gran D- augura que les ocurrirá a los teléfonos móviles. Según la asturiana, el futuro de los smartphones será como los pendientes o las lentillas, no nos daremos cuenta de que los llevamos encima. Parece algo muy loco, y para algunos casi tan impensable como si hace años les hubieran dicho que la radio iba a vivir un nuevo esplendor, con un formato online y a la carta.