Una fuerte explosión sobresalta a Teherán de madrugada
El Ministerio de Defensa de Irán atribuye al estallido de un depósito de gas la deflagración que tiñó de naranja el cielo de la capital
Una fuerte explosión que ha teñido el cielo de naranja durante unos segundos ha desatado la alarma entre los habitantes de Teherán en la madrugada de este viernes. El incidente se ha producido al este de la capital iraní, en una zona donde hay varias instalaciones militares y depósitos de armas. El Ministerio de Defensa ha atribuido la deflagración a un depósito de gas en las proximidades y asegurado que no había causado víctimas.
“Un depósito de gas ha estallado en el espacio público de Parchin. Gracias a Dios no hay ninguna víctima”, ha declarado a la televisión estatal el general Dav...
Una fuerte explosión que ha teñido el cielo de naranja durante unos segundos ha desatado la alarma entre los habitantes de Teherán en la madrugada de este viernes. El incidente se ha producido al este de la capital iraní, en una zona donde hay varias instalaciones militares y depósitos de armas. El Ministerio de Defensa ha atribuido la deflagración a un depósito de gas en las proximidades y asegurado que no había causado víctimas.
“Un depósito de gas ha estallado en el espacio público de Parchin. Gracias a Dios no hay ninguna víctima”, ha declarado a la televisión estatal el general Davud Abdi, portavoz de Defensa, sin precisar el lugar exacto del suceso. El portavoz, cuyas palabras repiten todos los medios iraníes, también ha dicho que los bomberos habían controlado el incendio y que se estaba investigando la causa del accidente.
Pasada la medianoche, numerosos tehraníes se lanzaron a las redes sociales para compartir imágenes de la espectacular explosión. Enseguida, varias agencias de noticias locales se hicieron eco y una de ellas, Fars, aseguró que se trataba de un depósito de gas. De acuerdo con sus fuentes, el lugar de la explosión no pertenece al Ejército, aunque se encuentra cerca de unas instalaciones del Ministerio de Defensa.
Muchos iraníes cuestionaban la versión oficial. Escaldados por la falta de transparencia de su Gobierno, en especial tras el derribo por un misil de un avión de pasajeros el pasado enero, se preguntaban si había habido un accidente o un sabotaje en los cuarteles.
Parchin, a las afueras de Teherán, alberga el mayor centro militar de fabricación de explosivos. Además de producir munición de artillería, esas instalaciones también se asocian con el programa nuclear. Durante años, Irán negó el acceso a los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) con el argumento de que se trataba de una base militar. En 2014 ya hubo un incendio en el recinto que las autoridades liquidaron como un mero accidente. Cuando un año más tarde, se autorizó la entrada de los verificadores nucleares, el lugar había sido ‘limpiado’.
A poca distancia de Parchin, en Khojir, hay también un centro de producción y prueba de misiles en el que se almacenan tanto combustible líquido como sólido para su funcionamiento.