Mentir o rectificar

¿Qué verbo deben usar los medios con los políticos cuando modifican su propia opinión? Depende

María Guardiola, presidenta del PP extremeño, en una rueda de prensa el pasado día 21. Foto: PP EXTREMADURA | Vídeo: EPV

Les voy a contar un cuento. El Diccionario de la RAE tiene seis acepciones para mentira. A nosotros nos interesa la primera: “Expresión o manifestación contraria a lo que se sabe, se piensa o se siente”. Rectificar es, entre otras nueve acepciones, “modificar la propia opinión que se ha expuesto antes”. ¿Cuál deben usar los medios con los políticos cuando mienten o, perdón, rectifican? Depende.

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Les voy a contar un cuento. El Diccionario de la RAE tiene seis acepciones para mentira. A nosotros nos interesa la primera: “Expresión o manifestación contraria a lo que se sabe, se piensa o se siente”. Rectificar es, entre otras nueve acepciones, “modificar la propia opinión que se ha expuesto antes”. ¿Cuál deben usar los medios con los políticos cuando mienten o, perdón, rectifican? Depende.

Carlos Alsina recibió en su entrevista a Pedro Sánchez con un directo al mentón: “¿Por qué nos ha mentido tanto?”. El presidente le dijo que había rectificado sus posiciones y cambiado de opinión en función de los acontecimientos políticos. ¿Mintió Sánchez? Leyendo muchos medios el día después de la entrevista está claro que sí porque la mayoría informó titulando con esa pregunta.

La semana pasada, María Guardiola, candidata del Partido Popular a la Junta de Extremadura, tenía todo listo para pactar con Vox y obtener la presidencia a la que parecía atornillado de por vida Guillermo Fernández Vara. Pero Guardiola hizo algo inopinado: mantuvo su palabra de campaña y se negó a compartir Gobierno con miembros de Vox: “No puedo dejar entrar en el Gobierno a los que niegan la violencia machista. Si hay que ir a nuevas elecciones, se va”.

Guardiola se había salido del carril. El Mundo le dijo que su estrategia era “demasiado arriesgada” y la llamó “baronesa roja”. Cuidado, Guardiola, que de ahí a sanchista faltan dos párrafos. Le afearon “un discurso rayano en el populismo” y un “veto existencial” a Vox. En Herrera en Cope le recordaron que hablar tan mal de Vox está feo porque deja en mal lugar a sus compañeros de partido.

Pero Guardiola también recibió aplausos. En Más de uno, Carlos Alsina dijo que era “insólito, una candidata manteniendo su palabra”. Entrevistada por su compañera de Atresmedia Susanna Griso apostó por dos posibles soluciones: o Vox cambiaba de opinión o se volvería a las urnas. No vio venir la tercera: la mentira o la rectificación.

Guardiola viajó a Madrid a la toma de posesión de Isabel Díaz Ayuso y donde dije ya no dije y ahora Vox merece “respeto, diálogo y acuerdo pragmático”. Su asesor de prensa, contrario a Vox, se fue a la calle. Volvió el orden. ¿Mintió Guardiola? ¡Nooooo! Según El Mundo y La Razón, lo que hizo fue “rectificar”. El Confidencial lo llamó “recular”. ABC fue más romántico: “Tiende la mano a Vox”. Entrañable.

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