Si usas un sérum de ácido hialurónico en cápsulas esto es todo lo que conseguirá tu piel
Se considera la panacea de la juventud, el ingrediente estrella de los cosméticos antiedad. De la mano de Elizabeth Arden y sus nuevas Hyaluronic Acid Ceramide Capsule, repasamos junto a una experta todas las propiedades de esta versátil molécula.
El ácido hialurónico es el secreto de la juventud de esta era. Se ha convertido en un ingrediente omnipresente en cosmética –raro es el producto antiedad que no lo destaque entre su fórmula–, y en un pilar fundamental de nuestra rutina diaria. Aunque sus aplicaciones en el campo dermatológico son relativamente nuevas, lleva décadas utilizándose en medicina gracias a sus propiedades regenerativas. El descubrimiento, de hecho, se lo debemos a dos farmacéuticos, Karl Meyer y John Palmer, que al estudiar el ojo de un buey en 1923 se percataron de que era la razón por la que mantenía su forma córnea.
La sustancia saltaría al universo de la belleza gracias a sus beneficios hidratantes, reafirmantes o voluminizadores: se emplea en medicina estética, cirugía plástica y por supuesto, en cosmética. Elizabeth Arden ha lanzado este año Hyaluronic Acid Ceramide Capsule, un sérum ligero y sedoso en cápsulas monodosis, que aúna las propiedades del ácido hialurónico con la capacidad reafirmante de las ceramidas, con el fin de incorporarlo a nuestra rutina de forma sencilla (y sin necesidad de pasar por el quirófano) y lograr un rostro hidratado, firme y luminoso. Para exprimir todos los beneficios de este súper ingrediente, sin embargo, lo primero que debemos hacer es despejar dudas y conocer todas sus propiedades.
Empecemos por el principio, ¿qué es el ácido hialurónico?
Se trata de una molécula natural presente en los tejidos de nuestro cuerpo, siendo la piel el principal reservorio, con un increíble poder hidratante y antiedad. «Juega un papel fundamental en el envejecimiento cutáneo ya que, con la edad, existe un empeoramiento de la calidad de tejido conectivo humano y de sus procesos de reparación. Podemos decir además que los patrones de ácido hialurónico en la piel van cambiando con el tiempo; de hecho, un tercio de su cantidad total de ácido hialurónico se degrada y se vuelve a sintetizar a diario. Con la edad ese ritmo no se mantiene y las cantidades necesarias son deficientes», explica la Training Manager de Elizabeth Arden, Tatiana Recuero. Esta es la razón principal por la que a medida que nos hacemos mayores, nuestra piel va a necesitar una ayuda extra para suplir las carencias.
¿Qué beneficios tiene sobre nuestra piel?
La razón por la que se ha convertido en el ingrediente preferido de la industria cosmética es su gran versatilidad, siendo la hidratación una de sus propiedades más codiciadas. «Actúa como un imán captando agua: 1 gramo de ácido hialurónico es capaz de retener hasta 6 litros de agua. Los lugares de la epidermis ricos en ácido hialurónico pueden atraer agua desde la dermis favoreciendo la hidratación en las capas superiores y reforzando la barrera cutánea», explica la experta. «Su capacidad de retención acuosa le hace jugar un papel importante en el mantenimiento del espacio extracelular, facilita el transporte de solutos iónicos y nutrientes, y preserva la hidratación cutánea». En otras palabras, las moléculas de ácido hialurónico penetran en las capas más profundas de la piel, capturando el agua y, en consecuencia, favorecen el relleno de las arrugas y alisan y redefinen el rostro. Porque el ácido hialurónico estimula también la producción de colágeno, la renovación celular y los procesos de cicatrización. El hype está más que justificado.
¿Cómo se obtiene el ácido hialurónico?
La ciencia ha avanzado mucho en este sentido. Al principio, se extraía de las cresta de los gallos o de las aletas de los tiburones, algo que resultaba bastante caro y, desde luego, bastante alejado de los estándares ecofriendly que le exigimos a la cosmética actual. «Al tratarse de una biomolécula se puede obtener de origen animal o de síntesis. El ácido hialurónico que se suele usar en cosmética es desarrollado en laboratorio por fermentación bacteriana», puntualiza la training manager de la firma cosmética.
Las cápsulas Hyaluronic Acid Ceramide Capsule son un ejemplo de esta simbiosis entre ciencia y naturaleza. Su fórmula combina el ácido hialurónico y las ceramidas obtenidas en el laboratorio con un uso inteligente de ingredientes naturales, como los aceites vegetales de aguacate, oliva y girasol que ayudan a reparar la piel, o el extracto de jengibre, un poderoso antioxidante que potencia el colágeno de la piel y la protege de los radicales libres. Las nuevas cápsulas, además, están realizadas con materiales biodegradables para que nuestro ritual diario sea tan beneficioso para nuestra piel como para el entorno.
¿Todos los ácidos hialurónicos son iguales?
Está presente en la fórmula de muchos cosméticos en distintos porcentajes y tamaños, por eso su efectividad varía considerablemente de unos a otros. «Se procesa químicamente para crear diferentes pesos moleculares: cuanto menor es el peso, aumenta su permeabilidad en la piel. Lo ideal es que la fórmula combine ácido hialurónico de diferentes pesos moleculares para una acción de hidratación más completa», explica Tatiana Recuero. Todo ello se entiende de manera muy gráfica en el nuevo sérum de Elizabeth Arden. Frente a las fórmulas tradicionales, gracias a la tecnología Zero H20, el ácido hialurónico es hasta 500 veces más pequeño. Esto le permite penetrar de forma más eficaz en la piel y que los resultados no se limiten a la superficie: la hidratación y densidad de la piel aumenta intensamente, preparándola para asimilar con más facilidad el resto de cosméticos de nuestra rutina facial.
El formato importa
En forma de crema, sérum, ampollas, nutricosméticos… las opciones en el mercado son infinitas. «Los sérums van más concentrados y suelen combinar ácido hialurónico de distinto peso molecular, pero la efectividad depende de la fórmula completa, no del ingrediente aislado», puntualiza la especialista. Así, el nuevo Hyaluronic Acid Ceramide Capsule conjuga el ácido hialurónico con las ceramidas, otro elemento natural de la piel que fortalece la barrera cutánea. Mediante la revolucionaria tecnología Double-Lock, los beneficios hidratantes y redensificantes de ambos se elevan al máximo. La piel se hidrata y reafirma al instante, recuperando su elasticidad y luminosidad natural, mientras las ceramidas actúan como barrera para evitar la futura pérdida de hidratación. Las cápsulas monodosis además permiten conservar los ingredientes de forma más pura.
¿A qué edad deberíamos empezar a utilizarlo?
«Como tratamiento diario, a partir de los 25 años es un buen momento para integrarlo en el ritual de cuidados, especialmente las personas con tendencia a la deshidratación o que vivan en ciudades con alta densidad de población y altos índices de contaminación», responde la experta. Al tratarse de una sustancia natural de nuestro cuerpo es compatible con todo tipo de pieles y no tenemos que descansar entre su aplicación. Al contrario: «Cuanto más tiempo se utiliza más visibles son los beneficios», explica.
¿Cuándo debemos aplicarlo?
Tanto por la mañana, debido a sus propiedades protectoras y antioxidantes; como por la noche, para favorecer la renovación natural de la piel. «Si es una formulación en sérum, se aplica sobre la piel perfectamente limpia y seca», nos recuerda Recuero. Lo más efectivo es extenderlo sobre rostro y cuello con las yemas de los dedos, mediante movimientos circulares, insistiendo en las zonas más sensibles: frente, mejillas y barbilla. «A continuación aplicamos la crema o fluido hidratante y/o fotoprotección. Lo ideal es aplicar una formulación que contenga ácido hialurónico combinado en varios pesos moleculares», apunta la profesional.
¿Cuánto tardaremos en notar los resultados?
«En las primeras aplicaciones ya se puede observar el beneficio de hidratación en la piel. Todo depende de la fórmula completa del producto, los tipos de ácido hialurónico y resto de ingredientes complementarios», puntualiza Recuero. Las cifras respaldan la teoría. El estudio llevado a cabo por Elizabeth Arden entre 55 mujeres utilizando Hyaluronic Acid Ceramide Capsule durante cuatro semanas, indicaba que el 87 % aseguraba tener la piel reafirmada al instante, con un aspecto brillante, redefinido y una elasticidad como en sus años de juventud.