La parálisis de la vacuna de Janssen complica en España el objetivo de inmunizar al 70% de la población
Aunque los demás medicamentos comprometidos alcanzarían para llegar a la meta en verano, las dosis de la farmacéutica estadounidense son claves para acelerar el ritmo durante este trimestre
El retraso del inicio de la vacuna de Janssen es otro palo en las ruedas para el camino que lleva al objetivo de inmunizar al 70% de la población adulta. Aunque las dosis previstas de los demás medicamentos en España serían suficientes para alcanzar esta ...
El retraso del inicio de la vacuna de Janssen es otro palo en las ruedas para el camino que lleva al objetivo de inmunizar al 70% de la población adulta. Aunque las dosis previstas de los demás medicamentos en España serían suficientes para alcanzar esta meta en verano, tal y como está previsto, la monodosis de la farmacéutica estadounidense es clave para acelerar el proceso y que se pudiera llegar a ese porcentaje incluso en las primeras semanas del estío.
Los primeros perjudicados serán los septuagenarios. Quienes tienen entre 70 y 79 años están recibiendo hasta el momento vacunas de ARN mensajero (Pfizer y Moderna), y a partir de este miércoles estaba previsto que se sumaran también las de Janssen. Sin embargo, la farmacéutica ha decidido este martes suspender temporalmente el inicio de la campaña en Europa después de que las autoridades sanitarias estadounidenses recomendaran parar la vacunación al detectar casos muy esporádicos (menos de uno por millón de vacunados) de eventos trombóticos similares a los identificados tras la vacuna de AstraZeneca. Todavía es una incógnita cuánto durará el parón.
La noticia ha pillado por sorpresa a las autoridades españolas. Al Ministerio de Sanidad le llegó a través de la nota de prensa de Janssen en Estados Unidos. Su titular, Carolina Darias, ha afirmado tras la sesión de control del Senado que su departamento está “expectante” ante las novedades. “La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios está en permanente contacto con la Agencia Europea del Medicamento. Estamos preparados para recibir la vacuna”, ha afirmado.
El impacto en los primeros compases, en cualquier caso, será relativo. La previsión era que en abril llegaran a España 300.000 dosis de este laboratorio, que solo requiere un pinchazo. Una cantidad muy inferior a los 2,7 millones (contando las de esta semana) solo de Pfizer. La mayoría de comunidades comenzaron entre la semana pasada y esta a vacunar al grupo de entre 70 y 79 años, formado por 3,9 millones de personas, de las que un 21,4% ya ha recibido al menos una dosis, según los datos de este martes.
El problema puede venir más bien a medio plazo si la parálisis continúa con Janssen. Este trimestre España preveía recibir 5,5 millones de dosis de esta farmacéutica, que al ser monodosis avanza en la inmunización al doble de ritmo que el resto. Esto, sumado a las incertidumbres en torno a AstraZeneca, tanto porque ha presentado los mismos efectos secundarios y el Ministerio de Sanidad ha restringido su uso a personas de entre 60 y 69 años como porque su suministro está siendo mucho menor del esperado, lleva a poner las esperanzas en que Pfizer y Moderna cumplan sus promesas: entregar 63,6 millones de dosis de aquí a final del verano.
Con las previsiones de estas dos vacunas de ARN mensajero, inmunizar al 70% de la población adulta en verano está más que al alcance de la mano: son 27,4 millones de personas que necesitan menos de 54 millones de dosis, ya que los menores de 65 que han sido diagnosticados de covid en los seis meses previos reciben una sola inyección. Teniendo además en cuenta las de AstraZeneca que se han puesto y que van llegando, sería también posible cumplir un objetivo más ambicioso que el presidente del Gobierno prometió la semana pasada: inmunizar a 33 millones de personas en verano, una cantidad que representa al 70% de la población total, no solo de los adultos.
Pero ya son cálculos más precarios y sujetos a muchas incertidumbres. Cualquier nuevo contratiempo podría desbaratarlos. No sería la primera vez que se incumplen los objetivos marcados: ningún país de la Unión Europea consiguió inmunizar al 80% de su población mayor de 80 años en marzo, como se había marcado. A mediados de abril, España está a las puertas de este objetivo, con más de la mitad de los ancianos con doble dosis.
Todas las cuentas están ahora a falta de saber qué sucederá con Janssen. “Si se trata de un parón de unos días no sería mayor problema, pero si se alarga, la aceleración del ritmo que preveíamos no se va a cumplir”, lamenta José Antonio Forcada, de la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (Anevac). En su opinión, lo lógico sería autorizar la de AstraZeneca para mayores de 70 años, como han hecho la mayoría de los países europeos, ya que en este grupo el riesgo de evento trombótico tras la vacuna es todavía inferior al de la población más joven. “Una vez que tenemos a los mayores de 80 más protegidos con la primera dosis y la mitad de ellos con la segunda, es el grupo que ahora presenta más riesgos, por lo que tenemos que intentar acelerar el ritmo como sea”, justifica Forcada.
En paralelo al grupo de los septuagenarios, la mayoría de las comunidades han comenzado esta semana la vacunación de 355.000 personas con patologías que les hacen vulnerables a la covid: pacientes con trasplante de progenitores hematopoyéticos (médula ósea), trasplante de órgano sólido y quienes están en lista de espera para este, personas en hemodiálisis y diálisis peritoneal, enfermedad oncohematológica, cáncer de órgano sólido en tratamiento con quimioterapia citotóxica, cáncer de pulmón en tratamiento con quimioterapia o inmunoterapia, los pacientes con sida, personas con inmunodeficiencia primaria y personas con síndrome de Down mayores de 40 años. Todos ellos recibirán vacunas con ARN mensajero.