Paro generalizado en Vizcaya y Guipúzcoa contra el terrorismo de ETA

Entre un 80% y un 85% de la población laboral de Vizcaya y Guipúzcoa (en Alava y Navarra el nivel de paro fue bajo) secundó la convocatoria de huelga general firmada por UGT y CCOO, en protesta por el asesinato de Germán González. El hecho de que la convocatoria se enfocase como una acción «contra el terrorismo de ETA» restó a la huelga el apoyo de los trabajadores cercanos a Herri Batasuna, que militan en el sindicato LAB. ELA-STV y USO no apoyaron oficialmente la jornada por considerar que el llamamiento se había realizado de forma unilateral. Pese a compartir este criterio, SU y CSUT adoptaron una postura de colaboración en la acción.

El paro fue generalizado en Vizcaya, donde pararon la casi totalidad de las plantillas más importantes de las empresas situadas en la margen izquierda del Nervión (incluidas las grandes, Altos Hornos, General Eléctrica, Babcock Wilcox y La Naval). En la margen derecha, la inactividad fue grande, excepción hecha de Lemóniz -un 50%- y Mecánica la Peña. En tanto que, en las zonas de Amorebieta, Guernica y el Alto Nervión (Basauri), se registraron altos índices de paro, la respuesta fue menor en Durango y la costa.A media mañana había parado el 70% de la construcción de Vizcaya. A esa hora no funcionaban autobuses y trenes de Bilbao y cercanías. El personal de Renfe acordaba paralizar los servicios de once a una y de cuatro a seis, en los trenes con destino a la zona minera de Somorrostro y Musques. Correos y Telégrafos únicamente atendían servicios de urgencia. Idéntica actitud observaban la Delegación de Trabajo y la Consejería del Trabajo del CGV. El personal del sector de espectáculos aprobó a mediodía un paro «en señal de duelo» por la muerte de Germán González.

La huelga fue también secundada en algunos colegios nacionales, en tanto que el profesorado de la Universidad de Bilbao-Lejona realizaba asambleas. Medio centenar de profesores de la Universidad de Deusto -facultades de Derecho, Sociología y Filosofía y Ciencias de la Educación- hacían público, al término de su asamblea, un escrito en que denuncian el atentado contra Germán González, «precisamente», afirman, «en el momento en que se abre una nueva etapa para Euskadi».

Por la tarde cerraron algunos bares y comercios en Bilbao y sus alrededores. Varios piquetes de afiliados de UGT y CCOO, identificados con chapas y pegatinas, recorrían amplias zonas de Bilbao para informar -tal era su exclusivo cometido- de la huelga a los patrones reticentes al cierre.

LKI hacía público al final de la noche un comunicado, en el que considera que el medio más idóneo para protestar «contra la brutal agresión que ha sufrido la clase trabajadora» no debía haber sido el de una huelga general, sino la convocatoria de asambleas y la aprobación de comunicados contundentes, dirigidos a condenar y aislar socialmente a los «comandos autónomos».

Algo inferior con respecto a Vizcaya fue el porcentaje de paro registrado ayer en Guipúzcoa, donde la respuesta a la convocatoria de huelga tuvo especial eco en el alto Gohierri, Elgóibar, Eibar, Hernani, Irún, Rentería y Zumaya. El puerto de Pasajes quedó paralizado. En Deva, Zarauz y Mondragón, el paro fue inferior, por no haber secundado la convocatoria las cooperativas.

En San Sebastián -el paro fue elevado en el cinturón industrial-, no funcionaron ayer los autobuses urbanos ni los trenes de cercanías Paró el personal de algunos bancos (Banco Central y dos cajas de ahorro), de la plantilla del Ayuntamiento, de la Consejería de Trabajo del CGV, de la Delegación de Hacienda y del INP. Hubo inasistencia a clase en algunos colegios nacionales. El personal de Correos y Telégrafos atendía únicamente urgencias. Por la tarde podían verse cerradas algunas tiendas y cafeterías, aunque no en alto porcentaje.

En Alava y Navarra, la respuesta a la convocatoria de paro fue reducida. En la zona industrial de Vitoría pararon ayer alrededor de 5.000 trabajadores de la pequeña y mediana empresa. Medio millar realizó una concentración en el barrio de Zaramaga. En las empresas grandes, pese a haberse celebrado asambleas, no se secundó la huella. Por la tarde pararon los trabajadores urbanos, Correos y Telégrafos y el personal de la Consejería de Trabajo del Consejo General Vasco.

En los cinturones industriales de Pamplona, Estella, Tafalla y Alsasua se celebraron ayer asambleas, en las que se denunció la muerte de Germán González. Sin embargo, los paros fueron ayer «simbólicos» en la mayoría de los casos.