Boyacá registra el primer muerto por los incendios forestales
Jacobo Roa sufrió graves quemaduras dentro de su vivienda por las llamas que consumieron a la vereda Peñas de La Capilla, Boyacá
Los incendios forestales que se han apoderado de gran parte de Colombia cobraron este lunes su primera vida. Se trata de Jacobo Roa, un residente de 74 años de la vereda Peñas de La Capilla, un municipio boyacense de unos 3.000 habitantes ubicado a un centenar de kilómetros de Bogotá. Se encontraba dentro de su vivienda cuando fue tomada por las llamas y sufrió graves quemaduras que le causaron la muerte, según Álvaro Rojas, el alcalde. “Nos duele la muerte de este adulto mayor, no queremos que este tipo de situaciones se repita”, declaró. Añadió que los bomberos pudieron controlar este lunes ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Los incendios forestales que se han apoderado de gran parte de Colombia cobraron este lunes su primera vida. Se trata de Jacobo Roa, un residente de 74 años de la vereda Peñas de La Capilla, un municipio boyacense de unos 3.000 habitantes ubicado a un centenar de kilómetros de Bogotá. Se encontraba dentro de su vivienda cuando fue tomada por las llamas y sufrió graves quemaduras que le causaron la muerte, según Álvaro Rojas, el alcalde. “Nos duele la muerte de este adulto mayor, no queremos que este tipo de situaciones se repita”, declaró. Añadió que los bomberos pudieron controlar este lunes la emergencia en la vereda.
El gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, confirmó el fallecimiento de Roa. “Lamentamos de todo corazón lo sucedido en el municipio La Capilla, en Peñas (…) y esperamos que no vuelva a suceder ningún fallecimiento de un habitante de Boyacá por esta causa”, dijo este lunes en un video publicado en X. Desde el municipio de Moniquirá, en el occidente del departamento, el mandatario anunció que ha decretado la calamidad pública por cuenta de los incendios forestales y el desabastecimiento de agua. “Por favor, a los ciudadanos, nada de quemas controladas. Por favor, estar alertas, atentos y solidarios. Sobre todo, cuidar el agua”, pidió.
Los incendios empezaron durante el fin de semana en Bucaramanga. Se fueron extendiendo rápidamente. Para la mañana de este martes, 582 municipios, más de la mitad de los de 1.102 del país, están en alerta roja, según anunció la ministra de Ambiente, Susana Muhamad. Agregó que 883 municipios se encuentran en alerta general. Hace dos semanas, el presidente Gustavo Petro había advertido sobre el peligro de los incendios, que llegaba a casi todo el territorio nacional: de La Guajira en el norte a Nariño en el sur, y de Santander en el oriente al Cauca en el occidente. Tenía razón.
En la capital, Bogotá, parte de los Cerros Orientales está en llamas desde hace más de 24 horas, y ha llenado la localidad de Chapinero, donde viven más de 170.000 personas, de un fuerte olor a quemado. El alcalde, Carlos Fernando Galán, ha recomendado usar tapabocas en el oriente de la ciudad para protegerse de una densa nube de humo que desciende de la montaña. Mientras tanto, los bomberos y el Ejército trabajan incansablemente para apagar el fuego. Los helicópteros de las autoridades sobrevuelan los cerros y descargan agua una y otra vez sobre el incendio. Un total de 3.400 galones de agua y 5.000 de líquido retardante han sido arrojados durante la mañana, según la Fuerza Aeroespacial. El objetivo, ha confirmado Galán, es extinguirlo antes de que termine el día.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS sobre Colombia y aquí al canal en WhatsApp, y reciba todas las claves informativas de la actualidad del país.