San Juan sostiene que cumplió los contratos que firmó con el Ejecutivo
El acusado asegura desconocer las transferencias entre dos firmas de la trama
El juez instructor de la supuesta trama de corrupción conocida como caso De Miguel retomó ayer las declaraciones de los imputados y personas relacionadas con la investigación con la declaración, a petición propia, de Iñaki San Juan, administrador de las empresas Errexal y la extinta Ortzi Muga y uno de los acusados. San Juan solo respondió a las preguntas que le formularon el juez y su defensor. Aseguró que sí realizó los trabajos por los que sus empresas fueron contratadas la legislatura pasada por el Departamento de Cultura —al menos 16, la mayoría de ellos por parte de la Dirección de Juventud entonces dirigida por Xabier Sánchez Robles, también imputado. La investigación mantiene que no consta que se realizaran esos trabajos.
Fuentes presentes en la declaración explicaron ayer que San Juan no aportó ninguna documentación que sustentara sus afirmaciones y que se centró en responder con evasivas a otras cuestiones que el juez instructor, Roberto Ramos, le planteó. Entre estas se encuentran las transferencias de dinero entre Errexal y Kataia Consulting, dos de las principales firmas supuestamente vinculadas a la trama, que involucra a exaltos cargos del PNV.
Se trata de la primera vez que San Juan declara en torno al caso De Miguel. El imputado fue citado en 2011 por el juez instructor, ante el que se negó a declarar. También fue llamado en enero de 2011 a comparecer ante la comisión de investigación del Parlamento vasco, pero no contestó a las cuestiones que se le plantearon. Se limitó a remitir un escrito a los medios informativos quejándose del “linchamiento mediático”.
San Juan no aporta documentación que confirme que realizó los trabajos
El acusado aseguró desconocer los detalles de transferencias entre Errexal y Kataia Consulting, ya que era Aintzane de Miguel quien se encargaba de estas cuestiones. Kataia y Errexal compartieron sede en Vitoria en el lugar en que estaba ubicada una sociedad gastronómica.
San Juan se centró en realizar afirmaciones en la misma línea que ya había hecho Sánchez Robles en torno a los contratos con la Dirección de Juventud, e insistió en que los trabajos fueron realizados. Apuntó que el contrato más cuantioso al que se presentó no le fue adjudicado.
Errexal logró contratos relacionados con dicha dirección en circunstancias que están siendo investigadas. Así, logró los contratos para realizar los planes de juventud de varias cuadrillas alavesas, dinero procedente de una subvención aprobada por el Gobierno con escaso margen para concederla. La compañía se creó en octubre de 2005, poco después de que Sánchez Robles anunciara a las cuadrillas que la subvención saldría a concurso. Esta fue aprobada el 27 de diciembre de ese mismo año y las seis cuadrillas contactaron con Errexal para realizar el trabajo, por el que se embolsó 90.000 euros en contratos menores.
El acusado prestó declaración ante el juez durante más de cinco horas
En su declaración, que duró más de cinco horas, San Juan dijo que su relación con el exdiputado foral Alfredo de Miguel es “cordial”, aunque negó que sean amigos. En una declaración de hace un año, De Miguel no pudo explicar uno de los correos electrónicos que figuran en el sumario enviado por San Juan en el que aseguraba: “Xabier no puede meternos un duro”, supuestamente en referencia a Sánchez Robles y a nuevos contratos públicos.
La de San Juan es la última declaración fijada en el calendario de la instrucción del caso. Las fuentes informantes no descartan que el juez llame a declarar a otras personas en las próximas semanas.
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