Gacio mantiene el acta de concejal para “primar la voluntad de los ciudadanos”

En una breve comparecencia de tres minutos en el salón de plenos de Boqueixón, el alcalde de Boqueixón, Adolfo Gacio, del Partido Popular ha anunciado que registrará hoy mismo su renuncia como regidor pero que prevé mantener el acta de concejal porque en un estado libre “debe primar la voluntad de los ciudadanos”.

Gacio,alcalde de Boqueixón durante los últimos 21 años, asegura que su decisión la ha adoptado de forma voluntaria y por iniciativa propia para no perjudicar a su partido en vísperas electorales y tampoco a su familia y amigos que se han visto “gravemente afectados por la presión pública”.

“Soy total y absolutamente inocente de los cargos que se me imputan, todas y cada una de las contrataciones administrativas del Ayuntamiento de Boqueixón se ajustan a la legalidad”, proclamó rodeado de todos los ediles y junto al director general de Xuventude de la Xunta, Ovidio Rodeiro, a quien legó la presidencia local del PP hace unas semanas. El regidor aludió a una “macrooperación en la que se está investigando un contrato administrativo adjudicado por su Ayuntamiento suscrito por unanimidad por la mesa de contratación del Ayuntamiento del que yo no formo parte”. Aludía así al contrato del servicio de ayuda en el hogar que hace seis años su Gobierno adjudicó por 200.000 euros a la empresa Sermasa y que motivó su detención en la Operación Pokémon en la que la juez le imputa los delitos de blanqueo, prevaricación y cohecho.

Sin tiempo apenas para preguntas, solo permitió formular dos o tres sobre la futura organización del Ayuntamiento, anunció que espera quedarse en la corporación aunque sin competencias y que tampoco prevé tomar parte en la elección de su sucesor que se conocerá en los próximos días.

En el salón de plenos y en las puertas del consistorio un grupo de unos cuarenta vecinos corearon varias veces gritos de “alcalde, alcalde” y aplaudieron varias veces durante su comparecencia.

Su discurso guardó tiempo un hueco para varios reproches a la juez Pilar de Lara que instruye este sumario. Aludió al “maltrato” recibido “al pasar 48 horas detenido e incomunicado” e incluso la obligación de comparecer esposado en discriminación con respecto a otros imputados que no recibieron este trato vejatorio”. Todo eso, aseguró el aún regidor de Boqueixón “ocasionó perjuicios serios” a su “imagen, familia, amigos y al pueblo de Boqueixón. Y esos son los motivos que alegó para formalizar su renuncia y quedarse como concejal en el ayuntamiento que gobierna desde hace 21 años, en este mandato con nueve de los 11 concejales de la corporación.