Las familias que perdieron su hogar desconocen cuándo serán realojadas

Las 42 familias que se han quedado sin hogar tras el incendio declarado durante la pasada Nochevieja en dos bloques de viviendas de Trintxerpe desconocen una semana después cuándo podrán ser realojados, aunque la alcaldesa de Pasaia, Amaia Agirregabiria, de Bildu, les ha asegurado este miércoles que su traslado se producirá “cuanto antes”.

En principio, serán acomodados en los pisos sociales que ha ofrecido la sociedad pública Alokabide en los barrios donostiarras de Morlans e Intxaurrondo y en los municipios de Rentería, Irún y Hernani. Agirregabiria reunió a todos los moradores de los bloques 5 y 7 de la Avenida Euskal Herria, que ahora habitan en casas de sus allegados y en el hotel Lintzirin, para informarles de las gestiones que el consistorio está realizando para encontrarles una nueva morada mientras se decide si se derriban o reconstruyen los edificios incendiados.

Al respecto, la alcaldesa indicó después a los periodistas que la fachada de uno de los bloques se ha desplazado sobre otro colindante, lo que ha impedido “por precaución” que los vecinos pudiesen acceder a sus antiguas viviendas para recoger enseres personales. Los vecinos trasladaron a la regidora su malestar por la incertidumbre que tienen con su realojo y las condiciones que el Gobierno vasco ha planteado inicialmente para ceder los pisos sociales.

Expresaron su disconformidad con la propuesta de Alokabide, que en principio plantea que los vecinos no paguen ninguna cantidad en los nuevos pisos durante los primeros seis meses, aunque superado ese periodo se revisará el patrimonio de cada familia para determinar si deben abonar una renta por el alquiler. Agirregabiria no quiso poner una fecha al realojo de los afectados porque “sería crear falsas expectativas y una irresponsabilidad”. Señaló que el hotel donde ahora se encuentran es una solución de “emergencia” y “no es un lugar para vivir”.

Respecto a la investigación abierta para determinar las causas del incendio, la alcaldesa afirmó que no ha recibido “ninguna notificación oficial” que concluya que el fuego se desató por el lanzamiento de una bengala, como se ha especulado durante estos días. La Ertzaintza tomó declaración el pasado fin de semana a los testigos y la brigada judicial está analizando los escombros para poner luz en este asunto. El Ayuntamiento ha creado una mesa técnica para hacer un seguimiento de las actuaciones y prestará asistencia a los vecinos afectados ante las aseguradoras y las entidades bancarias. También les exonerará del pago de las tasas municipales.