Una científica asegura que no hay datos para oponerse a la vacuna del papiloma

“No existen evidencias empíricas para oponerse a la vacuna del papiloma”. Así de contundente se ha mostrado Nubia Muñoz, investigadora de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de Lyon (IARC) y propuesta para el premio Nobel en medicina en 2008, en la presentación del congreso Young Europe que organiza la Academia Europea y que se celebrará esta semana en Barcelona.

La rueda de prensa de presentación ha tenido lugar en el Institut d’Estudis Catalan (IEC) y además de la doctora Muñoz han participado la socióloga Saskia Sassen y el investigador Gordon McBean. En ella se han expuesto los tres principales bloques temáticos que se abordarán en el congreso – avances en medicina y salud, aspectos sociales y oportunidades y medio ambiente y sostenibilidad-, que pretende abordar los retos futuros en campos tan significativos como la salud, la sociología y la sostenibilidad.

Muñoz ha destacado la vacuna contra el papiloma como elemento indispensable para la lucha contra el cáncer de útero ya que la infección es un elemento necesario, aunque no suficiente, para contraer la enfermedad. Por otra parte se ha mostrado muy disgustada por el eco mediático que han conseguido las asociaciones contrarias a dicha vacuna de las que ha dicho estar mal informadas “de lo contrario no se opondrían”.

Por su parte la profesora Sassen ha reflexionado sobre los términos de desigualdad y ha pedido “ir más allá en las investigaciones sociológicas” y ha asegurado que el capitalismo actual está excluyendo cantidad de personas y empresas que están quedando fuera del sistema. Además ha avanzado algunas de las gráficas que mostrará en el congreso en la que se detectan ciertas similitudes entre las curvas de desigualdad en países con graves problemas, como España o Portugal, y países como Alemania.

Por último el profesor Mc Bean ha abordado temas de sostenibilidad y ha destacado necesidad de que gobiernos y empresas se conciencien de la necesidad de un desarrollo sostenible, que ha definido como “la capacidad de desarrollarse satisfaciendo las necesidades del presente sin comprometer las delas generaciones futuras”. Ha destacado además el problema de la escasez de agua como uno de los principales retos del futuro.