Sherpa acepta finalmente firmar el contrato de compra de Cegasa

Sherpa Capital, el fondo de capital riesgo que se interesó por tres unidades de negocio de Cegasa, tampoco se presentó ayer a la cita para firmar la compraventa del fabricante de pilas, en concurso de acreedores desde hace casi un año. Sus responsables optaron por comunicar vía telefónica a los administradores concursales que aceptan rubricar el contrato hoy por la tarde.

Es un corto retraso que mantiene en vilo a los 130 trabajadores que mantendrían su empleo si finalmente fructifica, como parece, la operación de compraventa de las unidades de sistemas de energía (pila industrial), fabricación de manganeso y comercializados de energía y luz, unos activos por los que Sherpa Capital ofreció 2,5 millones de euros durante el proceso concursal.

Los responsables de Sherpa Capital estaban citados con los administradores el 29 de diciembre para consumar la adquisición de Cegasa, pero no acudieron a aquella cita. Volvieron a ausentarse el pasado jueves, lo que llevó a los administradores a dar un ultimátum al fondo de capital riesgo y fijar la reunión definitiva para ayer. Si no había firma, declararían la liquidación para todo el Grupo Cegasa, lo que supondría la pérdida de empleo de la plantilla al completo (cerca de 500 trabajadores).

Pese a no acudir a esta última reunión, los directivos de Sherpa se comprometieron verbalmente a zanjar hoy la operación “en los términos del auto” de la jueza. La titular del Juzgado de lo Mercantil 1 de Vitoria autorizó la venta a Sherpa a cambio de 2,5 millones en metálico. Esta cantidad podría incrementarse en otros tres millones si al cierre de 2015 la cifra de negocio supera los 48 millones. Además, aportaría otros 6,3 millones por ahorrarse el pago de las indemnizaciones por despido a los 130 trabajadores que continuarán en sus puestos. Y Sherpa se comprometió también a inyectar siete millones para financiar la actividad productiva.

La jueza hizo constar en su auto que la propuesta de Sherpa era la “mejor alternativa” y la “única vía” para “mantener in extremis una actividad empresarial” que estaba “ahogada”. El fondo de capital riesgo asumió el compromiso de dar trabajo a 131 personas. Si prospera, Azkar podría hacerse con Cega Multidistribución y captar otros 28 empleados. En el mejor de los escenarios, al menos 320 trabajadores de las plantas de Vitoria y Oñati perderán su puesto.