Las artes en vivo inundan Terrassa
Pep Pla, que se despide como director del festival de nuevas tendencias, TNT, destaca la importancia de la fusión en las artes escénicas
La creación contemporánea vuelve a ocupar Terrassa desde este jueves hasta el sábado con la duodécima edición del TNT (Terrassa Noves Tendències). El festival presenta una treintena de propuestas de artes escénicas en los espacios más varios (incluidas las calles), siete de las cuales son estrenos absolutos; dos, estrenos en España de espectáculos internacionales y cinco, coproducciones.
La cita anual vallesana es ya una auténtica cantera de artistas que apuestan por las nuevas dramaturgias y la creación contemporánea, posiblemente los géneros que más dificultades encuentran para abrirse camino. "Llevamos 12 años poniendo en valor las artes en vivo, haciéndolas accesibles a todo el mundo. En realidad no hay ningún secreto: se trata de que la gente lo vea y lo juzgue", dice Pep Pla, que este año se despide como director del TNT.
Este año, el conjunto de performances, piezas de vídeo-tecnología, escenografías atrevidas, propuestas rompedoras, danzas arriesgadas tienen como leitmotiv el viaje y la mirada de género. Emprenderemos viajes colectivos hacia parajes oníricos como el que proponen los franceses Carabosse en uno de los estrenos internacionales en España, Par les temps qui courent..., que inundará la plaza del Vapor Gran de instalaciones vivas por donde deambularan músicos, bailarines, acróbatas, poetas y fuego. O viajes interiores, sensoriales, como el que nos traen los murcianos Onírica Mecánica en Le grand Tour. Estará también muy presente el punto de vista más crítico con el turismo, como hace Alba Valldaura con Mos Maiorum en Gentry.
El TNT mira las problemáticas comunes a nuestra sociedad en clave abiertamente feminista. Temas como la cosificación de la mujer, la idea de belleza, de placer, la explotación laboral estarán presentes este año en obras como Pla-dur, del colectivo Atzur, sobre las kellys; Unheimlich, de Irene Vicente y la Cía Pelipolaca; Catalina, de Iniciativa Sexual Femenina o el solo de Ada Vilaró en 360 gramos, una pieza vital y generosa a partir de la vivencia propia de haber hecho frente a un cáncer y una de las coproducciones del TNT.
Pep Pla remarca la importancia de las coproducciones en la historia del festival: "Las que hemos hecho en el TNT [desde el 2007 se han realizado 2.048 funciones coproducidas, con 116.772 espectadores] han ayudado a contaminar a otros teatros públicos y privados de esta visión de las artes escénicas: de aquí han salido espectáculos como Rebota, rebota y en un cara explota, de Agnès Mateus, o Birdie, de la Agrupación Señor Serrano, que han recorrido mundo", esplica el director.
Vuelve la música
Igual que el año pasado, el TNT incorpora propuestas musicales no convencionales y vanguardistas. "La música nos ayuda a llegar a un público más joven", explica Pla, que ve el futuro como "una fusión entre las artes escénicas, la danza, los audiovisuales, la música..." Un ejemplo son Balago, grupo que crea encuentros entre la programación electrónica y la obsesión analógica con influencia de la ciencia-ficción, la religión o la filosofía; o el dúo de pop electrónico barcelonés Hidrogenesse, que presentará sus Joterías Bobas, gratis, en la Plaça Vella; o la jornada Mutacions, del Centre de Creació La Lluerna, que cerrará el TNT con cuatro artistas que presentarán propuestas de música electrónica de pequeño formato.
E igual que lo harán los niños, protagonistas del TNT Kids, también disfrutarán durante la mañana y la tarde del viernes los aficionados a las artes digitales más innovadoras con el VSL TNT, un espacio dedicado a las nuevas experiencias creativas en los ámbitos de la experimentación audiovisual, las instalaciones interactivas y el arte digital en general, con charlas, muestra de proyectos y conciertos.
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