Los famosos aderezan ‘MasterChef’

Los fogones de la primera edición en España de MasterChef protagonizada por famosos se encienden este domingo a partir de las 22.05, ocupando el vacío que deja en TVE el reencuentro de OT y desplazando, al menos durante el mes y medio que durará en emisión, la película de la semana. Los nueve concursantes, Cayetana Guillén Cuervo, Fernando Tejero, María del Monte, Miguel Ángel Muñoz, Loles León, Manuel Díaz ‘El Cordobés’ y su mujer, Virginia Troconis, Fonsi Nieto y María ‘Niña Pastori', arrancarán desorientados, deambulando por unas cocinas en las que no saben ni dónde están las cazuelas, y amedrentados por el tictac del reloj y por unos jueces, Samantha Vallejo-Nágera, Pepe Rodríguez y Jordi Cruz, que serán con ellos tan implacables como fueron con los aspirantes anónimos de las ediciones anteriores. Nadie tiene bula si quiere estar en una cocina profesional.

“Los vais a ver sufrir, fuera de su zona de confort”, dice Macarena Rey, de Shine Iberia, la productora encargada del programa de TVE, y lo dice sonriendo desde su sofá de la sala Florida Retiro (Madrid) donde se presenta el programa. Y es que, aunque todos, salvo Virginia Troconis, son sospechosos habituales de la pantalla, se han visto superados —y se han derrumbado ante la cámara— por la exigencia que supone servir puntualmente mesa para cien comensales. “Es imposible impostar”, reconoce Guillén Cuervo a propósito de lo vulnerables que se muestran. El brete no fue fácil tampoco para los jueces. Cuenta Pepe Rodríguez que al principio temió perder el pulso con ellos, no saber conducir la relación con los concursantes —María del Monte confiesa seria que ni siquiera les daban los buenos días—. Luego todo siguió su cauce. “Han tenido inmenso respeto por el oficio”, sentencia Jordi Cruz.

La primera gala

• La noche de este domingo, el chef Pepe Solla ayudará a los aspirantes ante su primer reto: un plato con bogavante. ¿Cómo lo afrontará Cayetana Guillén Cuervo, que presume de arroces?
• Viajarán a Chinchón donde, bajo la supervisión de Rodrigo de la Calle, cocinarán para 100 vecinos. Mucho ojo a 'El Cordobés' y a Fonsi Nieto. Una anécdota: el expiloto aprovechó un descuido, cuando todavía no sabían qué receta tendrían que ejecutar, para subir a la cocina del bar que les servía de camerino y preguntar a la dueña de esos fogones qué plato típico tenía el pueblo y cómo se preparaba. ¿A quién se encontró allí? El torero se le había adelantado.
• Para salvarse de la eliminación reproducirán la tarta "más fea de España", la de queso de Cerezo, concursante de la primera edición de MasterChef.

Para dejar patente cuánto se han implicado, Samantha Vallejo-Nágera le pide a Fernando Tejero que desvele el dineral que se ha dejado en cursos de cocina. “Más de lo que he ganado, os tendría que pasar la factura”, responde el actor. Miguel Ángel Muñoz dedicó cinco horas diarias a practicar elaboraciones en cocinas de restaurantes, dando cenas para amigos. En una de esas, en un paso de peatones a la salida del supermercado, un coche se le acercó tanto que pensó que le iba a atropellar y trató de usar las bolsas de la compra para protegerse. Una de ellas, “de papel, no de las de plástico, recalca Muñoz justificándose, llevaba dentro un cuchillo boca abajo que atravesó el papel y le perforó varios centímetros el muslo. “El Cordobés se burlaba de que me quejara”, exclama bromeando. Nadie se libró. Guillén Cuervo llegó a tener que cocinar con nueve dedales azules a causa de los cortes y quemaduras.

Esta edición del reality culinario rendirá tributo a las pruebas que han sido más destacadas del programa, por lo que se volverán a ver platos como la croquembouche de Paco Torreblanca o el solomillo Wellington. El ganador semanal podrá destinar los 4.000 euros del premio a la ONG que prefiera y el vencedor final dispondrá de 75.000 euros para entregar a una obra benéfica. Si bien MasterChef es, en palabras de Rey, “uno de los pocos programas que quedan que se pueden ver en familia”, el reclutamiento de famosos dispuestos fue complicado —con la honrosa excepción de Fonsi Nieto, que hasta telefoneó al hermano de la jurado para ofrecerse—. Desde TVE están seguros de que para la segunda edición Celebrity, que la habrá, se multiplicarán las solicitudes. A fin de cuentas y tal como dice la presentadora Eva González, cualquiera de ellos está ahora preparado para dar una cena en un buen restaurante. Y nunca se sabe cuándo le va a ir mal a uno en su negocio y va a tener que reciclarse.