‘Episodes’, la inteligencia de reírse de uno mismo
Quizá no haya sido tan popular como 'Friends', pero 'Episodes', también con Matt LeBlanc, es una comedia muy reivindicable
Matt LeBlanc siempre será Joey. Ya lo debe haber asumido. Los protagonistas de Friends siempre tendrán que cargar con sus personajes en la popularísima comedia. Claro que gracias a Friends se hicieron millonarios y pueden vivir a todo tren. Al menos, el Matt LeBlanc de Episodes llevaba esa vida. Hasta que empieza a tener problemas financieros y tiene que aceptar cualquier cosa, incluso presentar una especie de reality show en el que los participantes viven metidos en cubos de metacrilato a los ojos de todos los espectadores. Un Gran Hermano extremo que conduce sin ninguna gana. O poner su nombre a unos chalecos de calidad más que sospechosa solo para hacer caja. Y mientras, trata de reivindicarse como actor más allá del ingenuo y simpático Joey. Tarea complicada.
Quizá no haya sido tan popular como Friends, pero Episodes, que acaba de despedir su última temporada en Movistar Series, es también una comedia muy reivindicable. En sus cinco temporadas ha sido suficientemente inteligente para aprovechar la imagen que los espectadores tienen de LeBlanc, que en la serie se interpreta a sí mismo, y para reírse de ello y del mundo de la televisión. Gracias a Episodes hemos conocido mejor las entrañas del Hollywood televisivo, cómo funciona la relación entre guionistas, actores, productores y cadenas, cómo es la temporada de pilotos, los motivos ocultos que puede haber detrás para dar luz verde a una serie o para renovar otra... O la frustración de creadores que ven que sus series, sus criaturas, por motivos varios, se les escapan de las manos para terminar siendo otra cosa diferente de la que tenían en mente. Todo desde el humor y la exageración... aunque seguro que la realidad supera a la ficción.
Episodes es una comedia inteligente, divertida, bien interpretada y muy metarreferencial. Ha sabido mirarse el ombligo y plasmar los excesos, absurdeces y extravagancias de un mundo que llena horas y horas de nuestro ocio. Beverly y Sean, los dos guionistas británicos que en el primer capítulo llegaban a Hollywood para adaptar su exitosa comedia —y auténticos protagonistas de Episodes—, hacen de guías de los espectadores por este loco universo y son los ojos a través de los que descubrimos esa realidad alternativa que hay detrás de las cámaras. Aunque dé pena que su recorrido haya llegado a su fin, siempre se agradece que una serie sepa retirarse a tiempo (de hecho, ya había dado alguna que otra vuelta innecesaria en los últimos tiempos). Eso sí, lo sentimos por él, pero, por suerte o por desgracia, Matt LeBlanc siempre será Joey.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.