El novillero Sedano Vázquez, primer triunfador de la feria de La Magdalena
Correctas actuaciones de Toñete y Ángel Téllez ante una buena novillada de Fernando Peña
La primera oreja de la Feria se la llevó el local Sedano Vázquez. Oreja ganada a pulso, aunque de mal remate con la espada. El novillo de Fernando Peña fue de esos que cambian varias veces en el transcurso de la faena. Manseó en varas, siguió suelto en banderillas, lo mismo que en los primeros compases de la faena. Sedano no perdió la ilusión y con el novillo en el centro del ruedo logró sujetar tan incierta embestida. No fue una faena de tono brillante, pero sí tuvo un pronto de seguridad y actitud irreprochable. Buscó las vueltas al novillo y logró meterlo en cintura a base de insistir. Siempre muy cerca del novillo, sin dejarse sorprender y dejando claro quién debía mandar en todo aquello. Antes de los rodillazos finales, una serie con la izquierda de cinco naturales, los mejores servidos, y tres manoletinas de calado en el tendido. Luego se le fue la mano con la espada, pero el paisanaje hizo fuerza para que hubiera premio.
Mayor mérito con el quinto, de una condición más exigente que su primero. No fue de fácil gobierno en principio, y solo la seguridad del castellonense cambió las trazas de un novillo que parecía ponerse complicado. En banderillas le hizo hilo a Alfonso Carrasco, al que derribó y solo un milagro le salvó de percance grave. Sedano, con seguridad, consintiendo en momentos clave y plantando firme las zapatillas, se hizo con la situación. Hubo pocas concesiones fáciles y de la impronta frágil de un novillero de principios pasó a parecer lidiador experto en trances de mayor exigencia. Hubo hasta buen toreo una vez rendido el novillo. Una oreja de premio a labor de mucho mérito.
PEÑA / TOÑETE, SEDANO, TÉLLEZ
Novillos de Fernando Peña, de correcta presentación y muy manejables; destacó el que abrió plaza por su fijeza y recorrido.
Toñete: dos pinchazos y estocada baja (silencio); estocada perdiendo la muleta (oreja).
Sedano Vázquez: estocada contraria y pasada que asoma _aviso_ y descabello (oreja); pinchazo _aviso_ y estocada (oreja).
Ángel Téllez: estocada (oreja); pinchazo hondo _aviso_ y siete descabellos (palmas).
Plaza de Castellón, 4 de marzo. Primer festejo de la Feria de La Magdalena. Menos de media entrada.
La segunda oreja de la tarde fue para Ángel Téllez. Ante un novillo que llegó muy mermado a la muleta, con alguna caída sobre la arena. Sin fuerza ni emoción. Lo puso todo un elegante Téllez, sin brillantez, pero con cierta distinción. El novillo, muy parado al final, dio para apenas nada más que la voluntad de Téllez. La estocada tuvo premio final. Generosa oreja.
El sexto novillo empezó con buen aire y se fue apagando poco a poco. Le dio tiempo a Ángel Téllez a mostrar sus buenas condiciones, aunque sin alcanzar mayores niveles. Lo mejor, la firmeza que mostró. Más torero al principio y mayor galería al final, cundo el novillo tenía ya poco que rascar de verdad.
Oficio y suficiencia de Toñete en sus dos novillos. En el primero, el de mejor juego de un encierro muy manejable, un derroche de preparación técnica, De puesta a punto. De seguridad ante todo, aunque algo ligero en tono general. Mejor y más acoplado sobre la mano derecha y muy irregular en el toreo al natural. La espada le privó de un premio que se veía venir. El cuarto, precioso novillo burraco, sacó de nuevo el oficio. Este novillo, sin plantear problemas, tuvo cierto picante de principio. Toñete dispuso sus ya conocidas cartas sobre la arena y la voluntad superó cualquier otra razón. Esta vez acertó con la espada y el generoso presidente le envió el correspondiente regalo en forma de oreja.
Babelia
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