‘Presunto culpable’ cumple sin sorprender
La serie de Antena 3 tiene una excelente factura visual y grandes paisajes, pero su primer capítulo no llega a explotar
El thriller se ha instalado en nuestra televisión. Del mismo modo que hace años eran las historias familiares que mezclaban drama y comedia las que triunfaban, ahora el suspense está por todas partes. Es un género agradecido, engancha y fideliza con ese deseo del espectador de saber qué ha ocurrido y la tensión que invita a ver un capítulo más. Pero con el tiempo la cosa puede empezar a cansar. Es complicado innovar y que no suene a visto.
Presunto culpable, serie que Antena 3 ha estrenado este martes, es un thriller correcto. En este caso, más que en la trama en sí, la diferencia está en la ambientación y la localización. Su primer capítulo discurre con ritmo pausado sobre un escenario húmedo, frío, con niebla, el del País Vasco en el que se rodaron buena parte de las escenas. La historia tiene su centro en el misterio que rodea a la desaparición de una joven (no sabemos si ha desaparecido, si ha muerto, ni por qué su familia da por hecho que ha muerto si no ha aparecido el cuerpo) y la posible culpabilidad de su novio. Ambos habían puesto en marcha unos laboratorios que parece que pueden tener alguna clave para lo ocurrido. Por supuesto, sus familias están enfrentadas, y más después de las sospechas que flotan sobre él. Además, algo turbio ocultan los hermanos de él...
A través de unos flashbacks bien integrados en la trama principal, el espectador va descubriendo cómo era la relación de los dos jóvenes y qué ocurrió las horas previas a la desaparición. El presente muestra las reticencias con las que es recibido Jon en su regreso a su pueblo natal. Pasado y presente se entremezclan para ir avanzando muy lentamente en la historia.
Con una excelente factura visual y unos impresionantes paisajes, algunos de ellos mostrados desde las alturas, se construye una historia que, en su primer capítulo, no llega a explotar ni a sorprender y que, arrastrada por la parsimonia de la vida bajo la lluvia, discurre con demasiada lentitud.
La serie invita a los espectadores a formular sus propias teorías sobre lo que ha ocurrido. Otra cosa es que les llegue a interesar qué ha pasado con Anne. Veremos.
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