La lección de Kieran Culkin en los Bafta, el ganador que no recogió su premio

La Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión (BAFTA, por sus siglas en inglés) celebró este domingo en Londres su gran fiesta anual. Entre los títulos e intérpretes ganadores de la noche, Cónclave, la intriga en la elección del Papa basada en la novela de Robert Harris, ganó el Bafta a la mejor película. Por su parte, el equipo de Emilia Pérez, cinta salpicada por la polémica generada por los tuits antiguos de su protagonista, Karla Sofía Gascón, vio como Zoe Saldaña se alzaba con el premio a la mejor actriz de reparto.

Uno de los momentos con más eco en redes de la gala lo protagonizó alguien que no estuvo en la ceremonia. Kieran Culkin, ganador del premio a mejor actor de reparto por su papel en la road movie A Real Pain (merecedora durante la noche del mejor guion original), fue sustituido sobre el escenario por su compañero y director de la película Jesse Eisenberg, quien recogió el premio en su nombre.

Durante el discurso de agradecimiento, Eisenberg explicó que Culkin no había podido asistir a la ceremonia: “Hemos hablado esta mañana. Está en Nueva York con un familiar que está bastante enfermo”, reconocía. Para añadir luego: “Es tan devoto como padre de familia que intentó abandonar mi película dos semanas antes de que empezáramos a rodar porque no quería dejar a sus hijos”.

Ante las sonrisas de aprobación del público congregado en el Royal Festival Hall del Southbank Centre de Londres, Eisenberg terminaba así de recoger el premio en nombre de su amigo: “Es real, es hermoso y es admirable su devoción por su familia. Es una de esas personas afortunadas que tiene un talento brillante, pero que, por alguna suerte del cosmos, tiene sus prioridades en orden”.

Su papel como Roman Roy en la serie Succession ha catapultado a este actor de 42 años, el mediano de una familia de siete hermanos (entre ellos, Macaulay Culkin) que crecieron siendo actores —con una situación complicada en el hogar— y en la que él es ahora el que (no) recoge premios.