_
_
_
_

La implosión de ‘Emilia Pérez’: cómo la principal apuesta al Oscar de Netflix se evaporó entre polémicas

Los viejos mensajes de Karla Sofía Gascón han sido la guillotina de una campaña millonaria por la que la plataforma ansiaba su primer Oscar a mejor película y que ahora tendrá suerte si logra un par de galardones

Karla Sofia Gascon posa en la gala de los premios César, en París el pasado viernes, en su primera aparición pública tras la polémica por sus tuits.Foto: Sarah Meyssonnier (REUTERS)

La confianza se le notaba en la voz a Ted Sarandos, el presidente de Netflix. Era una llamada con los principales accionistas de la empresa, el otoño pasado. El ejecutivo presumía de Emilia Pérez como una de las bazas fuertes con las que la plataforma cerraría 2024. Acertó. Tras su triunfo en Cannes haciendo doblete —premio del jurado y de interpretación femenina—, la cinta del francés Jacques Audiard se convertía en la película en un idioma distinto al inglés más nominada en la historia de los premios Oscar, con 13 candidaturas. Arrancó la campaña como favorita y era una de las más sólidas esperanzas para que Netflix consiguiera, al fin, ese anhelado premio de mejor película que lleva años buscando. La burbuja se pinchó a finales de enero, cuando una periodista canadiense rebuscó en la cuenta de X de la protagonista del filme, Karla Sofía Gascón, e hizo públicos decenas de antiguos mensajes ofensivos escritos por la protagonista de la película. Fue así como Emilia Pérez perdió a Emilia Pérez rumbo a la gran gala de Hollywood. Y como se perdió ella misma por el camino.

Después de semanas de idas y venidas, la gran incógnita se despejó el pasado lunes: Gascón ha confirmado que acudirá a los premios. Pero su presencia puede significar una tormenta mediática para la Academia de Hollywood. “Si Karla se nos une esa noche, espero que haya respeto”, señaló Bill Kramer, el consejero delegado de la organización, al medio especializado The Hollywood Reporter. “Tenemos más de 200 nominados, y la noche es mucho más que una sola persona. Estaremos ahí para celebrar a todos”, añadió Kramer, después de dejar claro que la Academia no aprueba el discurso de odio que Gascón mostró en tuits de hace varios años contra el afroamericano George Floyd o contra comunidades como la china y la musulmana.

Emilia Pérez era una película única para Netflix. Había sido validada por la crítica en Cannes, uno de los festivales de cine más importantes del mundo, que además premió a su elenco, a cuatro mujeres a la vez, con un histórico reconocimiento. Su temática, un musical sobre un capo del narcotráfico mexicano que decide cambiar de sexo para cambiar de vida, encaja con la visión de la empresa, un estudio que siempre se ha percibido como un disruptor en Hollywood. Sus ejecutivos pronto la pusieron a la cabeza de sus prioridades en la temporada de premios. En una proyección privada en noviembre, Sarandos describió la cinta como “brillante y audaz”. También como “arriesgada, emotiva y trascendente”.

Adriana Paz, Edgar Ramirez, Selena Gomez, Jacques Audiard, Karla Sofia Gascon, and Zoe Saldana
Adriana Paz, Edgar Ramirez, Selena Gomez, Jacques Audiard, Karla Sofia Gascon y Zoe Saldana posan con sus premios en los Globos de Oro, el pasado 5 de enero.Mario Anzuoni (REUTERS)

La decisión de Netflix significó para la película de Audiard un respaldo de millones de dólares para una campaña mundial de promoción, entre 20 y 30, según la prensa especializada. La inversión dio jugosos frutos a finales de enero, cuando la Academia reveló sus 13 nominaciones a los Oscar. Se quedó solo a una del récord histórico, en manos de Titanic, La La Land y Eva al desnudo. Una de las más importantes, la de mejor actriz protagonista, recayó sobre Gascón, que se convertía así en la primera intérprete abiertamente trans que aspira a un galardón.

Emilia Pérez ha sido favorecida por varias cuestiones, así como por las reglas de la Academia. Por ejemplo, hace doblete en la categoría de mejor canción original, con El mal y Mi camino. En cambio, Wicked, que apuntaba como gran favorita en lo musical, ha quedado fuera de esta carrera porque en su banda sonora aparecen temas ya utilizados en el musical original de Broadway. Por otra parte, a pesar de estar hablada en español, al estar producida en Francia, Emilia Pérez fue la elegida por este país para la competición de mejor película internacional. Puede darle el décimo galardón en esta categoría al país galo, que no lo gana desde 1992 con Indochina, protagonizada por Catherine Deneuve. Su director, Jacques Audiard, nominado a cuatro premios (película, director, guion adaptado y canción original), ya compitió en 2009 con Un profeta, aunque se lo arrebató la argentina El secreto de sus ojos.

Es difícil calcular cuántos premios logrará Emilia Pérez. Podrían ser 12, como máximo (hace doblete en mejor canción), pero es posible que se quede en dos, máximo tres: Zoe Saldaña a mejor actriz de reparto, canción por El mal y, quizá, con suerte, película extranjera. El de mejor película queda ya lejos. También es difícil calcular el daño que le pueden haber hecho las declaraciones de Gascón, que llegaron en el peor momento: a finales de enero, en plena fase de votación de premios. Además, Gascón cometió un error de cálculo: no ponderó la importancia de pedir perdón y callar. Realizó docenas de entrevistas, se disculpó, pero también buscó justificaciones y habló de campañas de odio y de “algo muy oscuro” en su contra. En Hollywood, el silencio y una sonrisa de Mona Lisa son las mejores bazas, pero ella no es parte de su ecosistema y no se comportó así, lo que solo hizo que la incomprensión general aumentara.

Tuvo que llegar Jacques Audiard a castigar duramente las palabras de su protagonista para que ella guardara silencio, pero también para que muchos se cuestionaran si su comportamiento era tan “imperdonable” como le reprochaba el director. Un cineasta que tuvo, también, su propia dosis de polémica, al reaparecer un vídeo de meses atrás —en la misma semana de los tuits, casualmente o no— donde comentaba que “el español es un lenguaje de países modestos, de países en desarrollo, de pobres y migrantes”. Fue la gota que colmó el vaso de muchos lugares donde jamás se vio con buenos ojos Emilia Pérez, especialmente México. El columnista Antonio Ortuño hablaba en este diario de “condescendencia y banalización de la violencia”; de “exotización y lluvia de estereotipos”; del “paupérrimo y muchas veces ridículo uso del español”.

Jacques Audiard posa con el premio a mejor película en habla no inglesa en los Bafta, el pasado 16 de febrero en Londres.
Jacques Audiard posa con el premio a mejor película en habla no inglesa en los Bafta, el pasado 16 de febrero en Londres. Isabel Infantes (REUTERS)

Todo ello se sumaba a los polémicos tuits, que se convirtieron en Hollywood en el centro de la conversación. La cuestión salpicó a Netflix, que decidió cortarle el grifo a su emergente estrella y sacarla de la promoción. Ella no volvió a aparecer por Hollywood durante todo febrero, ni en los Bafta británicos, ni siquiera en los Goya españoles. En ambas galas la película fue premiada. Bela Bajaria, la todopoderosa jefa de contenidos de Netflix, reconoció en un podcast especializado en la industria, The Town, que todo el escándalo significó un “bajón” para la empresa, que tenía sus esperanzas muy altas. “Creo que todo esto llevó la discusión pública a otra parte”, señaló. La ejecutiva aseguró que no es tradición de la empresa revisar las redes sociales de una estrella involucrada en sus proyectos. Esto a pesar de que hay varias empresas especializadas, como Xg Consultant Group o Merrill Herzog, en EE UU; o, en el Reino Unido, People Check. Todas ofrecen servicios por entre 325 dólares y 725 dólares para revisar los antecedentes y las redes de los artistas. Contactadas por este periódico, afirman haber trabajado con todas las plataformas, incluida Netflix.

Pero los tuits de Gascón ya estaban ahí y no había vuelta atrás. Quizá ella, quizá la película, quizá Netflix, pero alguien debería haber hecho scroll en su cuenta. Eso no sucedió. Entonces, ¿cómo acaba esta fábula que refleja a Hollywood mejor de lo que ella misma se atrevería a hacerlo en pantalla? Pues como toda historia angelina, con un final si no feliz, al menos agridulce. Porque al mes, resucitó. El lunes, siete días antes de los Oscar, Netflix anunció que su estrella iría a los premios. Los tiempos eran perfectos: el escándalo se desató a finales de enero, la española decidió callar el 7 de febrero, las votaciones al Oscar empezaron el 11, acabaron el 18 y el 24 Gascón regresó. Además, ha sido una vuelta gradual y medida: para que los grandes premios de Hollywood no sean su primer gran acto, aterrizó este viernes en los César, los premios del cine francés, donde paseó por la alfombra sin abrir la boca, y así siguió toda la gala. Ni siquiera tuvo que hablar para recoger un premio: no ganó en la categoría de mejor actriz, donde competía con su compañera Zoe Saldaña, que sorprendentemente tampoco ganó. Se lo llevó Hagsia Herzi, por la película Borgo. No obstante, Emilia Pérez fue la protagonista de la noche, con siete galardones, entre ellos el de mejor película y mejor dirección. Este domingo se sabrá el final del cuento.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_