Rudy toma Santiago

Conforme el Madrid acumula horas de vuelo y kilómetros sobre el parquet, aparecen en su calendario algunos encuentros en los que el rigor y la aplicación dimiten en favor del dinamismo más impreciso. Así ocurrió en el Multiusos Fontes do Sar, convertido en una montaña rusa, tan distendida como emocionante, con dos equipos lanzados sin remilgos al intercambio de golpes. Rudy Fernández con un arrebato de puntería en el tercer cuarto (15 puntos en ese periodo y 20 en total) fue el encargado en esta ocasión de tumbar la resistencia del Obradoiro y de allanar el camino rumbo a la 22ª victoria madridista en la Liga. El segundo mejor arranque de toda la historia liguera a ocho victorias del 30-0 que logró el Madrid en la temporada 1972-73. El 45º triunfo en los 46 partidos oficiales que acumula la enciclopédica secuencia del líder.

Anticipando el desenlace del partido, el Madrid arrancó efervescente, con Rudy al mando de las operaciones, y con su habitual fluidez ofensiva que le llevó a firmar un cómodo parcial de 4-12 en los primeros cinco minutos. Aún no había afinado Corbacho y Pumprla era el único sustento en el Obradoiro, pero bastó que Moncho Fernández repasara con los suyos la cartilla para que cambiara el aire en Santiago. La presión del conjunto local provocó varios robos de balón y, al contraataque, respondieron a lo grande al conjunto de Laso.

La quinta pérdida de balón del Madrid (nueve al descanso y 15 al final) y un triple de Berzins sellaron el 18-2 con el que Obradoiro se afianzó en el partido (22-14, m. 12) ante un rival que seguía gestionando la fatiga y la motivación. Con las bajas de Draper y Carroll (también Bourousis evidenció algún achaque), la rotación madridista ha perdido profundidad y alternativas así que Laso recurrió a lo más concreto de su repertorio para equilibrar el entusiasmo local. Con Sergio Rodríguez al mando de la brújula (7 asistencias) y Felipe dominando la pintura, el líder se rearmó gracias al tercer parcial de la tarde, esta vez un 2-14 que redondeó Dani Díez con una de las pocas carreras que consiguieron rescatar los visitantes en la primer mitad (24-28, m. 17). Equilibrado el pulso, la enérgica dirección de Rafa Luz, la puntería de Pumprla y los centímetros del gigantón Berzins (2,13m) llevaron al Obradoiro a aguantar con solvencia el constante ida y vuelta en el que se había convertido el choque. Se sumó además a la cita Corbacho que, con su primer triple tras una secuencia errática, ajustó el marcador al borde del descanso (29-30, m. 29).

Llegaba el Obradoiro a la cita tras una secuencia de seis victorias consecutivas que, lejos de 21-0 del Madrid, pasaba por ser la segunda mejor racha de la Liga. Todo logrado además a contracorriente, con la baja de Muscala, su figura en el primer tramo del curso y ahora en Atlanta, y sin los lesionados Junyent, Sanz y Scott -tampoco tenían a Mejri, su icono la temporada pasada, ovacionado en su vuelta a Santiago vestido con la camiseta del Madrid-­. Pero, pese al conmovedor esfuerzo del cuadro gallego, no le bastó ante el Madrid. Cuando no encuentra la fluidez como grupo, el conjunto de Laso recurre a los fundamentos de alguna de sus sobresalientes individualidades y, como ya ocurriera ante el CAI en Zaragoza, Rudy salió al rescate. Con 15 puntos del alero mallorquín en el tercer cuarto (20 en total), el líder zanjó la disputa y selló su 22ª victoria en la Liga.

Tres triples del alero mallorquín y uno más de Mirotic (23 puntos entre ambos en ese acto) desmontaron la resistencia del Obradoiro que, incapaz de contener la efectividad del Madrid dimitió en el tercer acto (42-59, m. 29). Alcanzada su máxima renta en el marcador, a los de Laso les bastó la inercia anotadora de Llull y del propio Mirotic (16 puntos por cabeza) para tramitar un cómodo aterrizaje tras un partido ajetreado, al menos hasta el descanso. El Madrid ya está clasificado para los 'playoffs' a 12 jornadas del final de la liga regular.