San Lorenzo (con bula papal) reza por su primera Copa Libertadores
El club argentino San Lorenzo de Almagro y el Nacional de Paraguay disputan la final de un torneo que nunca han ganado
San Lorenzo, desde 2013 más conocido mundialmente como el club del papa Francisco aunque con una gran tradición e historia en Argentina, es el único de los cinco grandes de su país que nunca ha ganado la Copa Libertadores de América, el trofeo más importante de Latinoamérica. Está a dos partidos de lograrlo. Este miércoles disputará en Asunción la primera de las dos finales de la copa ante un rival que tampoco la ha levantado con anterioridad, el paraguayo Nacional.
Nacional es el quinto equipo con más ligas en la historia paraguaya: suma nueve, detrás de los dos más populares y famosos del país, Olimpia (39) y Cerro Porteño (30), de Libertad (17) y Guaraní (10). Su última conquista ocurrió en 2013, bajo la conducción técnica de Gustavo Morínigo, de solo 37 años y excentrocampista de la selección paraguaya en Japón-Corea del Sur 2002. Es de uno de los barrios más poblados de Asunción, el Obrero, de donde también es Cerro Porteño, su clásico rival. La humilde Academia paraguaya busca un título continental que en su país solo ha logrado Olimpia, en tres oportunidades, la última vez en 2002.
“San Lorenzo es amplio favorito, pero no le tememos”, dijo Morínigo. El Cuervo ha ganado 12 ligas argentinas (los dos más equipos más populares, River Plate y Boca Juniors tienen 35 y 24, respectivamente; los otros dos grandes en términos de hinchada, Independiente, 14 y Racing, siete, menos que los diez del más modesto Vélez Sarsfield). Pero San Lorenzo sufre por la deuda pendiente de la Libertadores, un trofeo que en Argentina también han obtenido Vélez, Estudiantes de La Plata –último campeón continental proveniente de este país, en 2009- y Argentinos Juniors. Su vicepresidente, el popular conductor televisivo Marcelo Tinelli, espera que esta vez se concrete el esquivo sueño.
Desde el año pasado, el club que enloquece al actor norteamericano Viggo Mortensen, que vivió de niño en Argentina, sumó otro hincha más famoso aún: Jorge Bergoglio, que como arzobispo de Buenos Aires ya portaba el carné de socio, pero no se había mostrado tan fanático como en tiempos de Papa. San Lorenzo había sido fundado en 1908 por un cura, Lorenzo Massa, y de ahí que lo apoden Cuervo, por la sotana negra de los sacerdotes, Santo o Santos de Boedo, su barrio en la capital argentina.
Los hinchas azulgranas deberán encomendarse a los dirigidos por Edgardo Bauza para levantar el trofeo. Ya anhelan jugar la final de la Copa Mundial de Clubes con el Real Madrid. Bauza, uno de los candidatos a seleccionador argentino, ganó la Libertadores con la Liga Deportiva Universitaria de Quito en 2008 y reemplazó en 2013 a Juan Antonio Pizzi, que entonces había ganado el campeonato argentino, antes de irse al Valencia. Este miércoles, Bauza intentará vencer con este previsible once incial: Sebastián Torrico; Julio Buffarini, Fabricio Fontanini, Santiago Gentiletti y Emmanuel Más; Héctor Villalba, Juan Mercier, el paraguayo Néstor Ortigoza, que llegó a cuartos de final en Sudáfrica 2010, e Ignacio Piatti; Leandro Romagnoli y Mauro Matos. Nacional alineará al argentinoparaguayo Ignacio Don; Ramón Coronel, David Mendoza, Leonardo Cáceres y Raúl Piris; Julio Santa Cruz o Marcos Riveros, Silvio Torales, Derlis Orué y Marcos Melgarejo; Brian Montenegro o Fredy Bareiro y Julián Benítez. Habrá que ver si el equipo donde brilló Arsenio Erico, el gran goleador paraguayo de la liga argentina entre 1934 y 1947, doblega al San Lorenzo donde brillaron José Sanfilippo, Ricardo Lavolpe, Jorge Olguín, Oscar Ruggeri, Pablo Zabaleta y el español Isidro Lángara, el atacante del Oviedo que combatió por el bando republicano, emigró a Argentina tras la Guerra Civil y con sus goles entre 1939 y 1942 llevó a que muchos emigrantes de su país simpatizaran por este club argentino.
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