La justicia europea determina que el Real Madrid no recibió ayudas públicas ilegales

El Real Madrid está más cerca de recuperar los más de 20 millones de euros que abonó al Ayuntamiento de Madrid en noviembre de 2016. El Tribunal General de la UE anuló este miércoles la decisión de la Comisión Europea, que obligó al club blanco a reintegrar 18,4 millones de euros —más otros dos millones en intereses— al estimar que se había beneficiado de ayudas públicas ilegales a través de la firma de acuerdos ventajosos con el Ayuntamiento en diversas permutas de terrenos. El dinero no tiene todavía rumbo fijo al equipo merengue. La Comisión Europea cuenta ahora con dos meses y diez días para recurrir la decisión.

El caso se remonta a 1998, cuando se firmó un convenio por el cual el Real Madrid, presidido entonces por Lorenzo Sanz, cedería ciertos terrenos de su ciudad deportiva al Ayuntamiento y, como contrapartida, este aportaría otros, situados en Julian Camarillo sur y Las Tablas, por un importe equivalente. Pero hubo un problema: el Consistorio no pudo cumplir su palabra con la parcela de Las Tablas porque tenía calificación de equipamiento deportivo básico, es decir, nunca podría pasar a manos privadas.

Para cerrar la deuda pendiente, el Ayuntamiento dirigido por el popular Alberto Ruiz-Gallardón se comprometió en 2011 a entregar al Real Madrid, ya bajo la presidencia de Florentino Pérez, terrenos de un valor similar al de Las Tablas, pero en ese tiempo se habían revalorizado, y se estableció su precio en 22,7 millones de euros.

Bruselas empezó a investigar el asunto en 2013 ante las sospechas de que el Real Madrid se había beneficiado de una transmisión ventajosa, lo cual está prohibido por las leyes de Competencia europeas, que lo castigan como ayuda de Estado ilegal. La Comisión Europea encargó a un centro de estudios inmobiliarios que analizara el valor real de la parcela de Las Tablas, y esta lo cifró en 4,2 millones, un precio muy inferior a esos 22,7 millones con los que se había compensado a la entidad, con lo que calculó que los terrenos que se adeudaban al club se sobrevaloraron en 18,4 millones y condenó al Real Madrid a devolver esa cantidad.

El club rebatió la posición de Bruselas alegando que el informe pericial de la consultora, en el que se basó la Comisión Europea para calcular el valor de la parcela, carecía de valor como prueba. Y además, argumentó que el Ejecutivo comunitario no encargó ninguna tasación de los inmuebles cedidos al Real Madrid para comprobar si también estaban sobrevalorados, y se ciñó a los valores que les otorgó en 2011 el Ayuntamiento.

La justicia europea dio por buenos esos argumentos, y concedió la razón al Real Madrid: estima que Bruselas “no probó de modo satisfactorio que se hubiese conferido una ventaja al Real Madrid”, y por tanto revoca ese pago que la entidad se apresuró a abonar en 2016. “La Comisión no tuvo en cuenta todos los elementos de la operación controvertida y su contexto. Así pues, no pudo cumplir con su obligación de llevar a cabo un análisis completo con el fin de demostrar no sólo la cuestión de la evaluación del importe de la ayuda, sino también —y sobre todo— la de la propia existencia de una ventaja”, concluyeron los jueces comunitarios.