Morbidelli logra su primera ‘pole’ en Montmeló

En un año extraño, con un calendario comprimido, con muchas carreras seguidas, sin público en los circuitos, con la baja del dominador de MotoGP, Marc Márquez, y una selección de pilotos increíblemente competitivos, la experiencia se entremezcla con la juventud y la igualdad mecánica hace el resto. Para delicia de los aficionados a las motos, a quienes siempre les gustó descubrir caras nuevas, ni que sea desde su casa y por la tele. Y siempre que siga asomando por la pantalla Valentino Rossi, que acaba de anunciar que seguirá corriendo un año más. Total solo cuenta 41 veranos a sus espaldas y 21 temporadas en MotoGP.

Así las cosas, la general no parece la clasificación de un mundial después de siete carreras, más bien da la sensación de que acaba de comenzar el curso. Pero no es así y los pilotos intentan tomar posiciones. No es fácil. Ni aunque brille el sol sobre un asfalto de Montmeló considerablemente más frío que el que solían encontrarse los pilotos en el mes de junio. Se ha acabado el verano y las temperaturas obligan a un esfuerzo extra con unos neumáticos Michelin que llevan a algunos de cabeza por su inconsistencia e irregularidad. Ofrece todo lo que tiene Franco Morbidelli, con una Yamaha que rueda por el trazado catalán con el mejor de sus vaivenes. Y el italobrasileño, que va mejorando con cada uno de sus ataques baja el tiempo una y otra vez hasta dejarlo en 1m,38′798s. Le falta poco para superar la vuelta perfecta de Jorge Lorenzo en 2018 (1m,38′680s), pero se acerca mucho al récord en unas condiciones que no son las mejores. Y con esa vuelta de escándalo se adjudica la primera pole position de su carrera en MotoGP. “Hemos trabajado bien, con energía, estamos a un buen nivel”, concede al bajarse de la moto. Y se postula como uno de los favoritos a la victoria este domingo (15.00, DAZN).

Claro que su Yamaha no es la única que se desliza con elegancia y velocidad por el Circuit. También lo hacen la de su compañero de equipo en el Petronas Fabio Quartararo, que acaba a dos décimas de segundo, o la de Rossi, a tres décimas. Vuelve a la primera fila de la parrilla el nueve veces campeón del mundo más de un año después. Está contento con el funcionamiento de su Yamaha y valora la gesta no en sí misma, sino por lo que pueda venir: “Es importante salir en primera fila para la carrera”, indica. La última vez que ganó fue en Assen en 2017.

Tampoco responde mal la M1 de Maverick Viñales, que pelea por la pole con las otras Yamaha, pero al final cede por unos pelos al empuje de Jack Miller (Pramac Ducati), que se cuela cuarto por delante de aquel. El Mundial está en un puño y todo es posible. La pole se decide después de que once pilotos acaben separados por menos de un segundo; entre ellos se encuentra la sensación de las últimas carreras, Joan Mir, octavo. El líder del campeonato, Andrea Dovizioso, no pasó a la Q2 y saldrá 17º, cerca de Alex Rins, 13º.