Los New York Knicks ganan una eliminatoria de la NBA por primera vez en una década

Para los seguidores de los New York Knicks, el XXI está siendo un siglo duro. El equipo campeón de 1970 y 1973 se codeó con los grandes durante décadas. Era raro que se quedase fuera de los playoffs. En 1999 perdió su última final de la NBA y en 2000 cayó en la final de la Conferencia Este. Desde 2001, sin embargo, se ha quedado fuera de las eliminatorias en la mayoría de las temporadas y solo había conseguido superar una ronda en 2013. Hasta este año. Por primera vez en una década, los Knicks pasan una eliminatoria.

El equipo neoyorquino quedó quinto de la Conferencia Este en la temporada regular y le tocó enfrentarse a los Cleveland Cavaliers de Donovan Mitchell y Darius Garland. Este miércoles ha vencido a domicilio con cierta comodidad (95-106) en el quinto partido de la serie y se clasifica con un 4-1. Se enfrentará en las semifinales de la Conferencia Este al vencedor de la eliminatoria entre los Milwaukee Bucks y los Miami Heat, que sorprendentemente dominan los de Florida.

Los Knicks han dominado el partido y la serie con relativa comodidad. Este miércoles se han adelantado 26-33 en el primer cuarto, han llegado al descanso con 10 puntos de ventaja (51-61), han ampliado a 12 la diferencia en el tercer cuarto y han administrado su ventaja en el tramo final del partido.

Dominio del rebote

Jalen Brunson y RJ Barrett han liderado a su equipo en ataque, con 23 y 21 puntos, respectivamente. Brunson salió de Dallas al acabar la pasada temporada y ha triunfado en su primera temporada, mezclando muy bien con Julius Randle y RJ Barrett. Este miércoles, pero el triunfo se ha construido a partir de los 18 rebotes de Mitchell Robinson y los 12 de Josh Hart.

En Cleveland, Mitchell batió en la temporada regular a LeBron James como jugador de los Cavaliers que supera los 40 puntos en más partidos (12) durante una misma temporada. Llegó a sumar 71 puntos en un partido. Sin embargo, pero al llegar los playoffs tanto él como Garland han sido incapaces de mantener la regularidad. En el cuarto partido, Mitchell anotó 11 puntos en 42 minutos tras una serie de 5 de 18 en los tiros de campo, en uno de sus peores partidos de la temporada. En el tercero fue Garland el que pinchó.

En el quinto y último, no han estado tan mal en el tiro, pero los Knicks han dominado debajo de los tableros con 48 rebotes, frente a los 30 de Cleveland. La diferencia en el rebote ofensivo (17-4) ha sido abismal. Esas posesiones extra han marcado la diferencia y han permitido a los de Nueva York darse la mayor alegría en una década.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.