El precedente de Juan Padrón, mano derecha de Villar, abre una vía para hacer caer definitivamente a Pedro Rocha

El Consejo Superior de Deportes (CSD) convocará a su comisión directiva la semana que viene y votará si suspende o no provisionalmente a Pedro Rocha y a toda la comisión gestora de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tras el expediente incoado por el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) por falta muy grave. El tribunal deportivo asegura en su resolución que tanto Rocha como todos los miembros de la gestora se extralimitaron en sus funciones al asumir, entre otras cuestiones, la renovación del seleccionador absoluto Luis de la Fuente o el despido del secretario general Andreu Camps.

Suspender a los miembros de la comisión gestora es factible para la comisión directiva del CSD porque todos ellos ocupan cargos en la federación. El problema surge con Pedro Rocha, que actualmente no ocupa ningún cargo federativo al dimitir como presidente de la citada gestora y también de la territorial extremeña. Sin embargo, existe un precedente. El 25 de julio de 2017, Juan Padrón, mano derecha del presidente Ángel María Villar, fue suspendido provisionalmente por la comisión directiva del CSD ad cautelam porque tampoco ocupaba ningún puesto en la RFEF.

A Villar y a Padrón el TAD les abrió expediente a raíz de su detención y encarcelamiento en el marco de la Operación Soule, en la que el juez Pedraz describía una supuesta red clientelar y presuntos delitos de administración desleal, corrupción en los negocios, apropiación indebida y falsedad documental. Cuando se desató la Operación Soule el dirigente vasco había sido proclamado presidente de la RFEF, pero aún no había nombrado junta directiva, por lo que Padrón no ostentaba cargo alguno. Villar le iba a conceder continuidad a su cargo de vicepresidente, pero no le dio tiempo al ser detenido. Esto provocó que en la resolución de la comisión directiva se incluyeran dos puntos. En el primero se anunciaba la suspensión provisional de ambos conforme a la Ley del Deporte de 1990 y en el segundo, se especificaba: “En lo que respecta a la suspensión de Juan Morales Padrón, se condiciona el acuerdo de suspensión a que por la RFEF se acredite la condición de directivo, de miembro de órgano de gobierno o de control de la citada federación”.

Rocha, virtual ganador de las elecciones a la presidencia de la RFEF al ser el único candidato que presentó los 21 avales necesarios, figura como investigado en la Operación Brodie sobre una supuesta trama de corrupción en el seno de la entidad federativa. La impugnación a su candidatura presentada por el presidente de Cenafe, Miguel Galán, impidió que el pasado lunes fuera proclamado ya nuevo presidente. Este viernes se ha conocido que el TAD también ha estimado un recurso de Galán contra el proceso electoral y ha acordado retrotraer las actuaciones a fin de que la Comisión electoral dicte una resolución ajustada a Derecho.

La próxima fecha tope para que Rocha sea proclamado presidente de la RFEF es el 26 de abril, pero no podrá ejercer si la comisión directiva del CSD le suspende provisionalmente si aplica la misma resolución que con Juan Padrón.

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