El Barcelona martiriza de nuevo al Madrid
Las azulgranas dejan sentenciada en la ida la eliminatoria de Copa ante el Real tras endosarle la tercera goleada de la temporada
Otra vez más, como si fuera un maleficio interminable, el Madrid volvió a sufrir un martirio ante el Barcelona. Bajo una lluvia constante, con el césped del estadio Alfredo di Stéfano pesado por la cantidad de agua que caía esta tarde en la capital, las azulgranas arrasaron por tercera vez esta temporada al Real, incapaz de superar la barrera futbolística y psicológica ante su rival más temido, el que le ha ganado los 17 enfrentamientos directos y al que no marca desde hace más de dos años. La goleada fue de tal calibre, la sensación de impotencia tan, tan grande para las blancas, que hubo momentos en los que el estadio se quedó en silencio. Las tetracampeonas dejaron sentenciada la eliminatoria en la primera mitad, en la que le endosaron cuatro goles al equipo de Alberto Toril. El Madrid irá la semana que viene a Barcelona a jugar una vuelta de semifinales intrascendente que amenaza con convertirse en otra pesadilla tras encajar finalmente cinco tantos. En el horizonte de marzo aparece también el partido de Liga, en donde la idea de recortar los cinco puntos de diferencia con las catalanas parece una quimera tras los tres bofetones que ya se ha llevado el Real este curso.
El Barça, con Alexia Putellas en el banquillo tras recuperarse de su lesión en el tobillo, ni siquiera necesitó trenzar el juego con su velocidad habitual para golpear a las blancas. En el segundo minuto, Graham Hansen lanzó un centro desde tres cuartos que Salma convirtió a bocajarro después de que Feller dejara de seguir a la extremo. La secuencia se repitió casi exacta solo un instante después, pero fue Pajor quien anotó a placer tras una gran parada de Misa. La portera desvió otros dos disparos de Aitana Bonmatí desde la frontal mientras su equipo se quejaba de un fuera de juego pitado a Olga Carmona cuando encaraba mano a mano a Cata Coll. Sin que la federación instale el VAR hasta la final, las jugadas no se pueden revisar y la acción fue tan justa que es complicada para arbitrar sin la ayuda de la tecnología.
El Madrid llegó al partido con el centro el campo en los huesos. El equipo de Toril no contaba con más mediocentros que Angeldahl y Toletti tras las lesiones de Tere Abelleira y Leupolz. A última hora se cayó de la convocatoria Linda Caicedo, la futbolista con más desborde, por una sobrecarga. Con tantas bajas, el técnico optó por doblar el lateral izquierdo con Yasmim y Olga Carmona, pero por ese carril llegaron tres de los cuatro primeros goles del Barça. Antes del descanso, Pajor anotó con un disparo en el que a Misa se le quedó demasiado corto el despeje y Salma embocó a placer otro centro de Graham Hansen después de que Antonia se desentendiera de su marca. Cata Coll tampoco dio opción al Real de meterse en el encuentro con dos buenas estiradas a tiros de Brunn y Antonia, y Patri Guijarro salvó con el cuerpo una ocasión franca de la delantera danesa tras una cabalgada poderosa de Feller.
Con la eliminatoria decidida, Toril dio carrete tras el descanso a Shei, Irune Dorado, Athenea y Eva Navarro. El partido se convirtió en el segundo tramo en una brega constante por el césped, incapaz de drenar el agua. En los minutos finales, cuando el aguacero dio un respiro, Pajor completó su triplete tras un buen pase de Rolfö y certificó que la vuelta el próximo miércoles en el estadio Johan Cruyff será solo un trámite para el Barça, el equipo que domina el fútbol europeo.
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