_
_
_
_
Crítica:CINE / DON JUAN EN SICILIA
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Intriga ramplona y machista

El fracaso de un director

Don Juan en Sicilia (Don Giovanni in Sicilia)

Guión y dirección de Alberto Lattuada, sobre la novela del mismo nombre de V. Brancati.Intérpretes: Lando Buzzanca, Ewa Aulin, Katia Moguy. Estreno en v.o. en Sala Dúplex.

Alberto Lattuada es un nombre de trayectoria muy irregular en el cine italiano contempóraneo, a medias entre el deseo de realizar obras personales y el sometimiento a las más abyectas presiones de la industria. Se suele recordar El alcalde, el escribano y su abrigo (desdichada denominación española de Il Capotto, según la obra de Gogol, como su mejor película, pero tampoco hay que olvidar su contribución como director a Luci del varietá, la primera experiencia de Federico Fellini que fue su guionista y amigo personal. En su filmografía abundan los desaciertos y la dispersión, con inesperados contactos con su vocación originaria de hacer un cine más directamente comprometido con la realidad de su país.La última etapa de su carrera, de la que es muy representativa el filme anteriormente llegado hasta nuestras pantallas, Venga a tomar café con nosotros, se caracteriza por una inserción en lo comercial más descarada, si cabe, y un abandono casi absoluto de cualquier aspiración hacia el cine literario y esteticista que señaló sus comienzos.

Don Juan en Sicilia es la peor de sus películas, un compendio de horrores sin cuento, realizada en 1967 y a la que los azares de la distribución y de la censura habían impedido hasta ahora el acceso a nuestras pantallas. Su inesperado estreno en versión original testimonia el caos de una política cinematográfica que parece empeñada, desde hace años, en que todo nos llegue a destiempo, cuando se han atemperado los posibles daños que podía ocasionar. Lo mismo podría haberla firmado Lattuada que cualquier aprendiz, a la vista del infame resultado que no logra la comercialidad -con una intriga ramplona, machista, torpe- ni mucho menos retratar las aspiraciones conquistadoras del hombre siciliano. No tiene sentido la resurreción de este engendro cuyas audacias expresivas hoy son inoperantes, aunque en su momento pudo haber pasado como obra de ruptura contra la mojigatería de un ambiente estancado. Hasta el cine español actual -con todas sus limitaciones- ha superado las tímidas cotas expresivas de este Lattuada convertido en vehículo de uno de los peores actores de la historia: Lando Buzzanca.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_