Trescientos comerciantes y vecinos contra las galerías de alimentación

Cerca de 300 comerciantes y vecinos de la zona de la Cruz de los Caídos se reunieron anteayer por la noche con objeto de discutir la construcción de una nueva galería de alimentación para la que se ha solicitado permiso. A la reunión asistió el teniente alcalde de San Blas-Hortaleza, señor Llantada, ante el que se expusieron los principales problemas que la aparición de esta galería presenta para los comerciantes de la zona. El motivo principal que éstos esgrimen es la saturación de comercios de alimentación que existen en el barrio, así como la falta de planificación que permite que haya un excesivo número de establecimientos de una misma rama, mientras que de otros se da una carencia absoluta. Por lo que consideran que sería más necesario emplear los 2.002 metros cuadrados que ocupa esta galería en cubrir otras necesidades de la zona, tales como colegios, guarderías, etc. El tema se agrava en este caso debido a que el propietario que quiere abrir la galería es dueño ya de otras tantas que existen en la zona.En la reunión se leyó un escrito realizado por la asociación de pequeños comerciantes en el que se exponen los motivos que tienen para negarse a la apertura y, por otro lado, presentan una queja a nivel general de los problemas que el pequeño comercio tiene planteado.

Según el reglamento, esta galería estaría encuadrada en las de tipo A, que establece un mínimo de 21 puestos y un máximo de 40. En la actualidad se encuentra con permiso de instalación, pero no de funcionamiento, para lo que necesita el visto bueno de la Gerencia Municipal de Urbanismo, la Delegación de Obras y Servicios Urbanos y la Delegación de Saneamiento y Limpieza. El plazo dado por la Delegación de Abastos termina el día 21 de este mes.

Falsa competencia

El escrito, avalado con 300 firmas de otros tantos comerciantes dice, entre otras cosas: «Estamos convencidos de que una nueva galería con 37 puntos de venta no soluciona el problema de falta de abastecimiento de productos alimenticios en el barrio, sino que, por el contrario, originará un nuevo problema al generar una competencia ficticia y falsa, que solamente puede traer como consecuencia un encarecimiento de los productos para poder seguir manteniendo el mismo nivel de renta de los comerciantes que no hayan podido ser desplazados por la nueva galería.Se da el caso de que el propietario es un constructor de obras que a su vez cuenta con varias galerías en la misma zona y que, según estos comerciantes, con la apertura del nuevo establecimiento, trata de encubrir bajo el velo de un mejor servicio comercial al barrio la maniobra de venta de 2.002 metros cuadrados de servicios comerciales que consideramos superfluos, dado el número elevado de galerías vacías que en la actualidad hay en el barrio.