Castells: "En el acto de la Complutense no se alteró el orden público"

En la tarde de ayer, el abogado Miguel de Castells ha relatado en una rueda de prensa los sucesos ocurridos el pasado lunes en la Universidad Complutense de Madrid, en relación con una charla sobre la amnistía y las consecuencias que han surgido a raíz de su detención. La detención se produjo cuando el abogado donostiarra bajaba del tren que le traía de Madrid. Fue llevado al Gobierno Civil de San Sebastián, donde le metieron en una celda. A las tres horas, en compañía del letrado Juan María Bandrés, fueron conducidos a la Dirección General de Seguridad, en Madrid, poniendo en libertad en Burgos al señor Bandrés, quien había sido detenido por error.Después de diferentes interrogatorios, Miguel Castells fue puesto en libertad provisional sin fianza, pero a disposición del juez de Orden Público bajo la simple acusación de haber participado en una charla ilegal sobre la amnistía. Posteriormente, el señor Castells ha manifestado:

«Quisiera, ante todo, recalcar la discriminación de que este acto ha sido objeto, contando que charlas de este tipo se han dado muchas en las cuales jamás ha pasado nada, siendo la primera vez que salimos del País Vasco a tratar de la amnistía, de las cárceles y de los exiliados, y viendo, por consecuencia, que nos han detenido e interrogado y nos han puesto a disposición del Juzgado de Orden Público.»

Según el abogado, la charla se dio en el anfiteatro de la Universidad Complutense. Todo parecía legal. Instalaron varias mesas y unos altavoces para que la gente allí concentrada pudiese participar en el acto.

De Euzkadi vinieron nueve representantes, de los cuales varios pertenecían a las diferentes comisiones gestoras pro amnistía. En ningún momento hubo alteración de orden público, y el acto siguió con toda normalidad de doce a dos y media de la tarde.

«Dejamos bien claro -añade el señor Castells- que no se tocó para nada el tema de los partidos políticos; de lo que se trataba para nosotros era traer una información veraz sobre lo que ocurre en Euzkadi y romper de esta manera con el silencio.»

«Por cierto, que mañana y pasado hay una serie de conferencias en Venecia sobre el mismo tema, que habíamos conjuntamente preparado y que a causa de mi detención no he podido desplazarme con el resto de mis compañeros. Al parecer, en Venecia sí está autorizado hablar sobre la amnistía.»