Importante elección parcial en Escocia
El Partido Laborista británico mide hoy sus fuerzas con los nacionalistas escoceses en la elección parcial de Glasgow-Garscaddel, cuyos resultados pesarán decisivamente en la estrategía electoral del primer ministro cara a los próximos comicios generales. El hecho de qué Escocia constituya la gran esperanza laborista que la votación de hoy sea la primera parcial celebrada allí desde 1973 confiere un insuperable valor del test a su resultado.El Gobierno, que ha hecho un despliegue propagandístico de sus primeras fíguras en los últimos días, acude a la prueba de hoy con todas sus armas: el proyecto de devolucióri de autonomía restringida a Escocia, aunque precario, navega por la Cámara de los Lores; los ecos favorables del presupuesto presentado por el ministro de Hacienda están todavía en el aire (y la zona sufre un paro superior al 9 %); la inflación está contenida en tina sola cifra y las previsiones a corto plazo son de que bajará.
Sin embargo, el Partido Nacionalista escocés (SNP) ha experimentado un ascenso meteórico en los últimos años y su objetivo confesado es copar la mitad más uno de los 71 escaños de la región, momento en el que considerará que tiene un mandato irrevocable para pedir la independencia de Escocia.
El volátil clima político escocés de los últimos tiempos invalida los pronósticos. En ausencia de candidato liberal y habida cuenta del poco arraigo conservador en la zona, el grueso de las papeletas irá a parar a laboristas y nacionalistas. Los dos sondeos de opinión más amplios efectitados arroían resultados opuestos.
Hay, sin embargo, un factor que puede resultar decisivo: el religioso. Un 35% del censo son católicos practicantes y firmemente oPuestos al aborto. El candidato nacionalista, Keith Bovey, se manifestó públicamente en contra al comienzo de su campaña; el laborista, Donald Dewar, se pronunció a favor. Las organizaciones católicas han hecho una campaña contundente en contra de los aspirantes proabortistas. Y los católicos han sido en Escocia durante los últimos años un firme apoyo del laborismo.
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