Detenidas dos mujeres implicadas en el atentado contra Cisneros y el secuestro de Rupérez
Françoise Marhuenda, psicóloga francesa, y Marla Begoña Aurteneche Larrucea, industrial residente en Madrid, han sido detenidas como autora material y colaboradora, respectivamente, en el atentado y secuestro también respectivamente, de los diputados de UCD Gabriel Cisneros y Javier Rupérez, según la Dirección de la Seguridad del Estado (DSE). Françoise Marhuenda, domiciliada en San Juan de Luz, se trasladó a España, junto a Maryvonne Gervaise, siguiendo instrucciones del dirigente de ETA (p-m) José Aulestia Urrutia en junio de 1979. Por otra parte, la LCR ha protestado por la detención de una de sus afiliadas.
Durante, una semana vigilaron el domicilio y vehículo de Gabriel Cisneros. En la cafetería Riofrío, de Madrid, pasaron la información a Aulestia. Este las puso en contacto con Arnaldo Cítegui Mondragón, el Gordo; Luis María Alcorta-Magureguí, el Bigotes, y José María Ostolaza Pagoaga, el Barbas, encargados de secuestrar al diputado.María Begoña Aurteneche, natural de Amorebieta (Vizcaya), casada, con domicilio en la calle de Sánchez Barcáiztegui, número 39, de Madrid, entró en contacto con Otegui Mondragón en agosto de 1978, el cual se alojó en su domicilio durante tres o cuatro meses. En abril de 1979, María Begoña compró un Seat 127 beige, matrícula M-5926-CN, para uso de Otegui en sus actividades de ETA, y, para el mismo fin, le entrega las llaves de su chalé en Hoyo de Pinares (Av¡la), calle de José Antonio, númerd 83. En agosto de ese mismo año, Otegui le indica por teléfono que qué no abra el armario del primer dormitorio de la primera planta, porque está lleno de armas.
La nota sigue diciendo que el día 3 de julio de 1979, Luis María Alcorta y José Ostolaza, armados, se apostaron cerca del domicilio de Gabriel Cisneros. Arnaldo Otegui y Françoise Marhuenda, también armados, dentro de un 127 beige, en la esquina de las calles de Uruguay con Fernán Núñez, y, al final de lá calle, igualmente armada, en un Ford Fiesta, Maryvonne Gervaise. A las diez y cuarto de la no che llegó Cisneros, en un. Mini-Morris rojo. Cuando salía de coche fue sujetado por Aleorta, pe ro logró huir, aunque resultó gra vemente herido por los disparos de Alcorta. Cisneros permaneció internado durante varias semanas.
A mediados de septiembre, en Francia, Françoise y José Aulestia planean el secuestro de Javie Rupérez, sigue informando la DSE. Françoise alquila un piso en la calle de la Encomienda, núme ro 20, de Madrid, con documenta ción falsa, y se pone de nuevo en contacto con Alcorta, Otegui y Os tolaza.
El 11 de septiembre, sobre las ocho de la mañana, llegan cerca de la casa del diputado en un 127 rojo tras dejar aparcado un 127 beige en la Casa de Campo. Françoise se sienta en un banco de la plaza de la Morería, mientras Otegui y Alcorta se sitúan en la esquina de Alfon so XIII y Ostolaza queda al volante delcoche.
Françoise, Otegui y Alcorta salen, pistola en mano, al paso de Javier Rupérez y le hacen sentarse en la parte posterior de su propio coche, junto a Alcorta. Conduce Otegui, y a su lado va Françoise. Detrás los sigue Ostolaza.
En la Casa de Campo dan dos píldoras de Valium-10 al diputado y lo meten en el maletero del 127 rojo. En este coche viajan Otegui, Alcorta y Françoise, y en el 127 beige abre camino Ostolaza.
Ya en Hoyo de Pinares -según la nota de la DSE-, entran directamente al garaje del chalé. Llevan a Rupérez al interior de la casa, con los ojos cubiertos por gafas opacas, y lo introducen en una especie de tienda preparada en uno de los dormitorios simulando una cárcel del pueblo, y durante un mes es vigilado alternativamente por todos los miembros del,comándo.
En esta vivienda, la policía ha intervenido, entre otras cosas: tres pistolas FN, una pistola de gás Rech, una metralleta Stein, una escopeta Remington, dos cargadores de metralleta y seis de pistola, unos grilletes, cuatro granadas ae mano, ochenta kilos de goma-2, 44 cartuchos de escopeta, trescientos de pistola calibre nueve milímetros Parabellum, un detonador, dos aparatos de control remoto, un temporizador, un aparato de explosionar a distancia, 45 cartuchos de revólver calibre 38 especial, cuatro artilugios explosivos, nueve placas de matrículas, diversas anotaciones y documentos y el e¡tado Seat de color beige.
A Françoise Marhuenda se le imputan además los siguientes hechos: atraco frustrado en el hospital de Vialdecilla, de Santander, el 28 dejunio de 1978; vigilancia de un teniente del Ejército de Tierra y de un oficial de alta graduación de la Marina en febrero de 1979; colocación de un artefacto explosivo en el Spórting Club de Marbella el 29 de julio de 1979; otro, al día siguiente, en Puerto Banús; otro, el 4 de julio, en el agujero número uno del campo de golf de la urbanización Santa Cristina, en San Feliú de Guixols; atraco en el Banco Herrero de Oviedo, el 9 dejulio. El 16 de marzo de 1980, por orden de José Aulestia, se incorpora en Málaga a la infraestructura del comando del también detenido (véase EL PAIS de ayer) José Aramayo Urola, con el fin de realizar las informaciones previas a los secuestros programados y tomar parte en las acciones terroristas que se llevarán a cabo en la zona.
La captura de Aramayo Urola
La detención e identificación de implicados en las acciones contra los señores Cisneros y Rupérez, así como las restantes citadas, de las que se dio información en el número de ayer, forma parte de una operación policial iniciada en la estación de ferrocarril de Valencia durante las pasadas fechas falleras, según las notas facilitadas por la Dirección de la Seguridad del Estado.
El despliegue de fuerzas policíales hizo que un joven reaccionara de forma anormal y sospechosa, según la policía, al dejar en consigna la bolsa que portaba. Los hechos sucedieron en la estación del Norte, a la llegada del tren de Málaga con destino a Barcelona. Se le pidió la documentación y presentó un DNI a nombre de Juan Pablo Fernández-Bailio, pero, ante su creciente nerviosismo, los policías registraron su equipaje. En él se hallaron varios carnés falsos, algunos de ellos como corresponsal de Interviu y Diario 16, así como un bloc, 23.000 pesetas en metálico y un taco de billetes de viaje de ferrocarril.
El joven, posteriormente ídentificado como José Aramayo Urola, contestó que no diría nada cuando le preguntaron su verdad identidad y añadió que se consideraba prisionero de guerra. Considerado como presunto miembro de ETA (p-m), se localizó su domicilio, desde veinte días atrás, en una casita de aspecto desvencijado en la plaza de Aras de Alpuente, número 6, barrio de Nazaret, de Valencia, cuya propietaria, Aída García Recatala, su hija Pilar Beses y el marido de ésta, Manuel Gimeno Bermúdez, empleado de teléfonos, fueron también detenidos. Así como Juan Beses Pérez, estibador, propietario de otro piso en la calle de Francisco Falcons, número 8, donde también pernoctó Aramayo Urola en varias ocasiones. La esposa de Beses Pérez, Antonia Ramos Jorda, estudiante, fue retenida y puesta en libertad más tarde.
Redada en Asturias y protestas
La Liga Comunista Revolucionaria (LCR) de Asturias y Madrid ha expresado su protesta por la detención en Gijón de Felicidad Alvarez López. «Bajo el pretexto terrorista se está deteniendo a gente que se solidariza con la causa del pueblo vasco, pero que en absoluto tienen actividades terroristas, como es el caso de Felicidad Alvarez, y hace dudar de la auténtica implicación de otros detenidos en los hechos que se les imputan. »
Según la policía, Felicidad Alvarez perteneció a los Comités Antirrepresivos (CAR). antes que a LCR.
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